19.Secretos al aire

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Habían pasado algunas semanas desde lo ocurrido con Margaret y yo simplemente me quedaba en casa guardando reposo con policías preguntando sobre el asesinato y también yace dos semanas que no veía a Kai lo cual me alegraba

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Habían pasado algunas semanas desde lo ocurrido con Margaret y yo simplemente me quedaba en casa guardando reposo con policías preguntando sobre el asesinato y también yace dos semanas que no veía a Kai lo cual me alegraba.

Me tocaba el vientre el cual seguía plano pero por alguna razón en mi rostro una sonrisa se dibujaba. La doctora me había dicho que después de aquel sangrado el embarazo se había vuelto de alto riesgo por lo que tenia que mantenerme en reposo y era eso lo que hacia.

—¿Te encuentras bien?—pregunto Andre a unos cuantos pasos de la silla donde estaba sentada.

—Si ¿Por qué? —pregunte.

—Porque estas semanas has estado muy pensativa—dijo y la razón de estar pensativa era porque buscaba una linda forma de decirle sobre el embarazo ya que le había pedido a la doctora que me guardara el pequeño secreto y lo engañara piadosamente con algo.

—Esas son puras estupideces—dije con una sonrisa mientras me ponía de pie—Yo estoy bien ¿y tú?–pregunte mientras pasaba mis brazos al rededor de su cuello y el la suyas alrededor de mi cintura.

—Si tu estas bien yo estoy bien —dijo para luego besar mis labios.

—Tengo que hablarte de algo — susurre contra sus labios para después volver a besarlo.

—Habla, corazón —susurro contra los míos así que sonreí. Queria decirle ya sobre el embarazo y estaba apunto de decirselo cuando la puerta al ser tocada nos interrumpió.

—Señorita Alaska, Thea la busca esta en la sala —aviso la nueva empleada mientras asomaba su cabeza por la puerta.

—Okey, gracias —dije aun mirando a Andre—Esto pude esperar—dije para después separarme de él y comenzar a caminar hacia la sala—Hola—la salude con una sonrisa pero Thea al verme se acerco furiosa a mi—¿Te..—comencé a preguntar pero antes de poder terminar la palma de Thea golpeo fuertemente mi mejilla haciéndome girar la cabeza.

—¡Eres una maldita perra se supone que eras mi amiga, Alaska!—alzo la voz y esto solo podía significar una cosa.

—Thea deja explicarte—dije mientras la miraba con lagrimas en los ojos.

—¡¿Explicarme qué Alaska?, Tu no pensabas decirme nada. –soltó y debía admitir que estaba en lo correcto.

—Thea,por favor—pedí pero ella solo golpeo de nuevo mi mejilla haciéndome enfurecer —¡Tu sabes que no soy así, jamas te haría daño!—grite ahora yo mientras la apuntaba con mi dedo indice.

—Solo se que eres una perra—dijo e intento golpearme de nuevo pero detuve su mano.

—Thea—dijo Andre a mis espaldas.

—Yo confié en ti, estuve para ti–dijo mientras comenzaba a llorar así que lentamente la solté.

—Yo lo siento—susurre mientras la miraba.

—Lo besaste y no solo me traicionaste a mi si no también a Andre —susurro decepcionada.

—¿Qué sucede? —pregunto Andre.

—Que te lo explique tu esposa— le dijo remarcando esta ultima palabra—te juro que te vas a arrepentir —dijo antes de salir y no sabía si eran las hormonas o algo mas pero comencé a llorar.

—¿Alaska qué sucede?—me pregunto Andre mientras me rodeaba con sus brazos.

Lo siento, lo siento—repetía una tras otra vez—Lo siento de verdad.

Alaska tranquilízate y dime que sucede—Me pidió.

Yo..—Y este era el momento de hablar o callar.

Destruir y afrontar.

—Naomi

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Naomi

Matrimonio por contrato|NO EDITADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora