24. La shiva

11.2K 592 40
                                    

Me disculpo por cambiar el capítulo pero el de antes no me convencía.

Por un momento abrí los ojos y mire a los paramédicos a mi alrededor, escuchaba voces, sonidos pero nada de manera clara

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Por un momento abrí los ojos y mire a los paramédicos a mi alrededor, escuchaba voces, sonidos pero nada de manera clara.
Sentía como me apagaba lentamente hasta que todo sucedió solo cerré los ojos y todo se detuvo.

A N D R E

Es impresionante como malditamente todo cambia en un segundo como al principio estaba sentado en casa y luego un mensaje lo cambio todo. Llamé a Alaska una tras otra vez hasta que al cabo de un rato alguien más respondió su teléfono dándome la noticia y luego todo pareció destruirse.

Intentaba ser fuerte intentaba no llorar pero no podía creer que esto fuera real. He llevado dos meses esperando a que ella despertará pero nada sucedía. Según los doctores ella
había caído en coma por el golpee y lo único que deseaba era que despertara, que me perdonara. Lo que más quería era verla en casa caminando descalza y al final del día mirar sus hermoso rostro y besarla.

—Vamos, cariño eres fuerte quiero que despiertes se que me odias pero quiero que despiertes–dije de nuevo como todos los días atrás desde hace dos meses. La misma frase pero sin respuesta alguna—No puedes dejarme, corazón.

—Andre—Me llamo su padre así que voltee —Yo me quedo ve a descansar—dijo así me puse de pie mire a Alaska, bese su frente y salí de ahí para ir a tomar una rápida ducha.

Desde hace dos meses los doctores no decían nada bueno, todo había sido una mierda. Con lo del bebé y luego tener a mí esposa sin moverse en esa cama.
Luke no la había pasado tan mal como ella pero pasaba cada minuto del día atento a nuevas noticias y disculpándose por todo. 

Y aquel maldito enfermó no mostraba señales de vida.

—————

A L A S K A

Comencé a abrir los ojos lentamente pero todo el cuerpo me dolía, la cabeza me explotaba, mi garganta estaba demasiado seca.

Mire a mi alrededor y estaba rodeada de algunas enfermeras. Mi padre y Andre estaban aquí.

—Todo esta bien cariño—dijo Andre mientras se acercaba a mi y tomaba mi mano.

—Yo...yo...–intente hablar pero la garganta me dolía, raspaba demasiado.

—No hables—dijo así que cerré los ojos fuertemente.

—Solo necesita beber un poco de agua —dijo el doctor ya que Andre y mi padre lo miraron preocupado.
Las enfermeras le pasaron un vaso con agua a Andre y alcé un poco la cabeza y comencé a beberla con su ayuda. Mi garganta lentamente se comenzó a acoplar.

Matrimonio por contrato|NO EDITADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora