Mírame, observa mi rostro y mis ojos.
Verás un mar de amor y pasión,
un deseo ardiente, una mirada de emociones y sentimientos.
Encontrarás en mi mirada un
nombre ..... Tu nombre "
El matrimonio no siempre es por amor✖️
Los primeros 5.Capítulos son...
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—Es sangre—dije mientras la olía así que Andre se acerco a la pared y paso sus dedos sobre esta y al igual que yo olió la sangre.
—Esta fresca—dijo así que me aleje de ella pero con lo que me encontré fue aún más aterrador.
—Dios—Dije con los ojos abiertos como un par de platós.
—¿Qué?—pregunto pero no respondí simplemente comencé a seguir el camino de sangre que me llevaba hasta la cocina. Al llegar allí la puerta trasera estaba abierta y frente a ella había una especie de lo que parecía ser la cabeza de un cerdo, rápidamente unas enormes ganas de vomitar me invadieron así que desvíe la mirada y camine hacia el lavabo —Esto es tan.. —comenzó a decir pero lo interrumpí.
—¿Asqueroso, aterrador?
—Yo iba a decir genial pero aterrador se escucha mejor —respondió así que voltee a verlo horrorizada pero el solo encogió los hombros.
—Por dios —dije mientras me frotaba el rostro
—Lo siento pero es que no todos los días vez esto frente a tu puerta —dijo mientras alzaba los brazos en señal de rendición.
—Si porque no siempre un psicopata lo coloca frente a ella—dije con obviedad así que abrió la boca para responder pero lo interrumpí—¿Sabes qué? mejor tu limpia eso y yo limpiare lo demás—dije mientras apuntaba esa cosa.
—Pero ...—
—Quita eso de mi vista—Espete mientras sacaba un paquete de bolsas de la alacena para después comenzar a caminar hacia la sala.
Comencé a recoger todo aquello que no tenia arreglo y lo coloque en la bolsa y al estar esta llena la amarre y me encamine hacia el contenedor de basura que estaba afuera. Coloque la bolsa en el contenedor y me dispuse a volver a dentro pero escuche a alguien llamarme así que voltee. Sofia caminaba hacia mi así que voltee a ver hacia mi casa y luego comencé a caminar hacia ella.
—Hola—la salude cuando ya la tenia más cerca.
—Hola, Creí que llamarías ya que dejamos una platica pendiente—dijo con una sonrisa así que me frote la frente.
—Oh, si, lo siento —dije apenada por lo que sucedió.
—Tranquila —Respondió con una sonrisa pero note algo raro.
—¿Qué haces aquí?—Pregunte mientras miraba a sus costados y detrás de ella ya que se acercaban hombres vestidos completamente de negro. Estos al alzar la cabeza tenían el rostro cubierto por lo que sabia de quien se trataba —corre—dije mientras tomaba su brazo para que comenzara a correr pero ella no se movió.
