Después de que el señor Thomas nos ayudara subimos al avión, estaba por sentarme al lado de mi hermano cuando una mano me detuvo. Mire hacia atrás y me encontré con la mirada triste de Allison.
—¿Por que mejor no te sientas con Alessandra?— me pregunto
—Ella no me quiere cerca.—conteste
—Créeme ella te quiere cerca, pero su miedo es mas grande.— dijo para luego pasarme y sentarse al lado de mi hermano
Camine y pase los asientos en donde estaban mi hermano y Allison, respire hondo antes de sentarme al lado de Alessandra, ella me miro de reojo para luego voltear a verme por completo.
—¿Qué parte de aléjate de mi, no entiendes?— pregunto
—Lo entiendo, pero tu hermana se sentó al lado de mi hermano.— dije para luego tratar de ignorarla
Me estire lo que el espacio entre asientos me dejaba, mire la hora en el reloj de mi muñeca eran las 2:00 de la madrugada. Voltee a ver a Alessandra creyendo que estaría dormida pero no era así ella estaba mirando por la ventana mientras agarraba el dije que colgaba de su cuello.
—¿Nunca duermes?— pregunte
—No me dejan dormir mucho tiempo.— dijo todavía mirando por la ventana
—¿Quienes?— pregunte confundido
—Las pesadillas.— contesto
—¿Desde cuando las tienes?
—Desde la muerte de mis padres.— contesto
—Me estas diciendo que desde hace 7 años no duermes bien.— dije asombrado
—Sí.— contesto esta vez mirándome
La mirada de Alessandra se dirigió a mis labios, para luego desviarla hacia la ventana, coloque mi mano en su barbilla e hice que me mirara de nuevo, acerque mi rostro al de Alessandra.
—No lo hagas por favor.— susurro
—¿Porqué?— pregunte en un susurro
—Por que no soy tan fuerte.
—Solo déjame entrar.—dije haciendo que Alessandra cerrara su ojos puesto que al estar tan cerca nuestros labios se rozaban al hablar
—Tu quieres más que eso, Connor.
Fue Alessandra la que junto nuestros labios, puso una de sus manos en mi nuca, la otra la coloco en mi pecho y se pego a mi lo mas que podía.
—¿Qué me has hecho?—pregunto cuando nos separamos—Ya no puedo evitarlo más, luche con todas mis fuerzas para no sentir nada por ti, pero cuando me di cuanta ya era demasiado tarde, cada vez que te tenia cerca despertabas una tormenta en mi interior y con el tiempo que pasábamos juntos la necesidad de estar contigo crecía, pero mi miedo también crece Connor.
—¿A qué tienes miedo?
—A tenerte y que luego te arrebaten de mi lado.— contesto mientras una lagrima resbalaba por su mejilla— No puedo quererte, porque eso seria condenarte.
—Entonces condéname.— dije juntando su frente con la mía
—No lo entiendes, las personas que quiero siempre terminan muertas, yo no podría condenarte a eso, no soportaría perderte a ti.— dijo con dolor—Necesito que te mantengas alejado de mi, es por tu bien.
***
Era entrada la tarde cuando después de un largo viaje por fin habíamos llegado a Italia, ahora estábamos esperando a Alessandra que había ido a recoger a Milo.
Luego de la plática que tuvimos en la madrugada, no hemos hablado más.
—Ya vine.— dijo Stefan
Una vez que Alessandra y Milo llegaron con nosotros nos apresuramos a detener un taxi para subirnos, fue Alessandra la que les dijo a ambos taxistas a donde tenían que llevarnos.
El viaje duro 40 minutos, cuando el taxi se detuvo nos dejó enfrente de una gran casa.
—¿De quien es la casa?— pregunto mi padre una vez que todos estuvimos reunidos enfrente de la casa
—Es nuestra casa.— contesto Allison mirando igual que sus otras dos hermanas la casa con una mirada melancólica
Alessandra camino hacia una de paredes donde había un tablero y Mateo al ver que se alejaba camino hasta ella y tomo su mano, Alessandra lo miro y le sonrió.
Ella volvió a mirar el tablero y empezó a teclear en el, después de unos segundo la reja se empezó a abrir.
Las primeras en atravesar la reja fueron las Di mauro, Alessandra se agacho y soltó la correa de Milo, el cual salio corriendo hacia la parte de atrás de la casa.
Cuando estuvimos frente la puerta de la casa, fue Alessandra la que abrió la puerta y di un paso al frente para entrar a la casa seguida de sus hermanas.
—Aquí fue donde murieron sus padres.— dijo Stefan cuando las gemelas y Alessandra entraron a la casa
Cassandra se dio vuelta para mirarnos.
—Pasen.— nos dijo para luego mira
Fije mi mirada en Alessandra que pasaba su mano por los cojines de la sala, mire hacia Allison y ella miraba las escaleras sonriendo, y Cassandra miraba hacia una de las ventanas y se abrazaba asi misma.
Vi como Steven se acercaba a Cassandra, la abrazaba y le daba un beso en la cabeza.
—¿Qué le pasa a Alessandra?— me pregunto Mateo, ni siquiera sentí cuando se había colocado a mi lado
—Esta recordando pequeño.
Mire alrededor y había sobre una mesa porta-retratos, me acerque y comencé a mirarlos, en el primero aparecía una pareja abrazándose, la señora de la fotografía era muy parecida a Alessandra lo único que tenían diferente era que ella tenia los ojos de color verdes como el de las gemelas y el señor que estaba abrazando a la señora, era parecido a las gemelas la diferencia era que el tenia el mismo color de ojos que Alessandra, eran los Di mauro, los padres de las chicas.
Ahora que miraba a la mamá de Alessandra en esa fotografía comprendí por que Baroni había llamado a Alessandra por el nombre de su madre eran idénticas.
—Son los padres de las chicas.— dijo mi hermano colocándose a mi lado y mirando la misma foto que yo— Alessandra es idéntica a su madre a excepción de los ojos.
En otra foto solo estaban las gemelas de pequeñas, la fotografía que llamo mi atención era una en donde aparecía una niña pequeña de cabellos negro como la noche y que sonreía alegre a la cámara, pero lo que me cautivaba de esa foto era el pequeño brillo que tenia ella en la mirara.
—Iré a hacer las compras, vuelvo en un rato.— dijo de pronto Alessandra haciendo que todos la volviéramos—Díganles donde se van a dormir.—le dijo a sus hermanas a lo cual ambas asintieron, luego salio de la casa
ESTÁS LEYENDO
Bellezas mortales
Teen FictionLas Di mauro son tres chicas que no hablan con nadie y no dejan que nadie se acerque a ellas, despiertan la intriga de sus compañeros de escuela pues son un misterio para todos. Pero todo cambia con la llegada los hermanos Bennet ¿Podrán ellos averi...