Narra Connor
Desperté con un fuerte dolor de cabeza, estire mi brazo para abrazar a mi pelinegra, cuando sentí lo frió que estaba su lado de la cama, recordé el porque me dolía la cabeza.
-Te amo y eso nada ni nadie lo podrá cambiar.
La voz de Alessandra resonó en mi cabeza, empece a sentir un agüero en el pecho, me levante de la cama y salí del cuarto corriendo, empece a bajar las escaleras.
Todos giraron a verme cuando termine de bajar las escaleras.
-¡Connor!- grito Mateo al verme para después venir corriendo a abrazarme- ¿Es verdad que Alessandra no vendrá por un tiempo a la casa?
La pregunta de Mateo solo hizo que el agüero que sentía en mi pecho creciera un poco más.
-Es cierto enano, pero no te preocupes la traeré de vuelta lo más pronto posible.- conteste
Porque si de algo estaba seguro es que traería a Alessandra de vuelta, así fuera lo ultimo que hiciera en la vida.
-Madre puedes llevar a Mateo a su cuarto, por favor.- le pedí a mi madre mientras miraba al culpable de que la pelinegra no estuviera aquí
-Connor...
-Por favor mamá.- la voltee a ver y aparte de preocupación su cara mostraba tristeza
Cuando mi madre y Mateo desaparecieron por las escaleras me lance contra Stefan.
-¡Connor detente!- grito mi padre tratando de separarme de Stefan
Ignore a mi padre y seguí dándole de golpes a Stefan, él ni siquiera se defendía, Clayton y Steven me lograron separarme de Stefan.
-¡Todo esto es tu culpa!- grite furioso
-Lo lamento, Connor, yo no quería que Baroni se llevara a Alessandra.- se disculpo Stefan cuando se puso de pie
-¡Me importa una mierda lo que querías!
Stefan no pudo contestar ya que el ruido de las rejas abriéndose y después el sonido de un auto estacionándose, hizo que todos nos pusiéramos alerta, aunque deseaba con el alma que fuera Alessandra algo me decía que no era ella.
-Ve con mamá y Mateo.- le dije a mi padre cuando Steven me paso un arma
Mi padre asintió y corrió hacia las escaleras justo cuando se escucharon pasos afuera de puerta.
-Listos.- dije mirando a los chicos, ellos asintieron
Cuando la manija de la puerta empezó a girar, todos apuntamos nuestras armas hacia la puerta.
-No puede ser .- dije cuando la persona que estaba atrás de la puerta la abrió, todos nos quedamos con la boca abierta puesto que no podíamos creer quien estaba enfrente de nosotros
-Esta no era la manera en que esperaba ser recibido, pero aun así me alegra verlos a todos.
Las gemelas no tardaron en correr hacia el señor Héctor, mientras nosotros bajamos nuestras armas sin salir de nuestro asombro.
-¿Cómo es posible que estés vivo?- pregunto Cassandra- Yo vi cuando Israel te disparo en la cabeza.
-Por suerte para mi el chico tiene mala puntería, sin embargo no salí tan ileso.- dijo mientras señalaba una gran cicatriz en su frente que hasta ese momento no habíamos notado- Estuve en el hospital unos días y en cuanto salí me puse a buscarlos.
-Nos alegramos de que este vivo.- dije
-Gracias muchacho.- me contesto con una sonrisa- ¿Donde esta Alessandra?
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Bellezas mortales
Teen FictionLas Di mauro son tres chicas que no hablan con nadie y no dejan que nadie se acerque a ellas, despiertan la intriga de sus compañeros de escuela pues son un misterio para todos. Pero todo cambia con la llegada los hermanos Bennet ¿Podrán ellos averi...