Capítulo 31

591 61 2
                                    

Stefan lanzaba varios puñetazos pero Alessandra lograba esquivarlos todos. Hasta que en un movimiento en lugar de dar un puñetazo dio una pata que derribó a Alessandra.

Alessandra no tardó en levantarse y su mirada se había tornado más fría que de lo habitual.

—Già è iniziato bene.— dijo Cassandra

Yo la mire confundido porque como siempre que hablaban italiano no entendía lo que decían.

—Dijo que ya empezó lo bueno.— dijo Allison mirándome

—¿Lo bueno fue que golpearan a Alessandra?

—No, pero a Alessandra no le gusta que la derriben y cuando lo hacen despierta en ella su lado letal, mira sus golpes.— me explico Allison

Voltee a ver a Alessandra y era cierto lo que dijo Allison, sus golpes eran más agresivos, más rápidos y mucho más precisos. A Stefan se le complicaba un poco poder esquivarlos.

En uno de sus movimientos Alessandra logro saltar lo suficientemente alto para enrollar sus piernas en el cuello de Stefan para asfixiarlo, entre más peleaba Stefan para soltarse mas apretaba su agarre Alessandra, en cuanto Stefan golpeó el piso con su mano Alessandra soltó su agarre.

Alessandra se levantó primero y ayudó a Stefan a levantarse después de que recuperó el aire.

—No te confíes no porque al principio vayas ganando significa que ganes la pelea.— le dijo Alessandra

—Esa chica de verdad que es mortal.— dijo mi padre asombrado

—Es una clase de combinación de black widow con Lara croft.— dijo Clayton

De la nada Milo salió corriendo hacia Alessandra e iba tan rápido que la fuerza del golpe tiro a Alessandra.

La pelinegra empezó a acariciar a Milo en las orejas.

Alessandra levantó la mirada y la fijo en una de las ventanas del segundo piso, se levantó y empezó a caminar hacia la puerta de la casa.

—¿A donde va?— preguntó Clayton

—A la alcoba de nuestros padres.— contestó Allison

—Tal vez deberías ir con ella.— dijo Cassandra para mi sorpresa

—¿Que dijiste?— pregunté sin poder creerlo

—No lo volveré a decir.— dijo Cassandra sin mirarme

Entre a la casa y subí al segundo piso encontré a Alessandra afuera de una habitación pero sin entrar a ella.

—Antes no había poder humano que me sacara de esta habitación, ahora me da miedo entrar.— dijo Alessandra sin dejar de mirar esa puerta.

—No tengas miedo, yo estaré contigo para enfrentar todos tus miedos.— dije tomando su mano

Sin que me lo esperara Alessandra me dio un beso rápido en los labio para luego darme un apretón en mi mano. Abrió la puerta lentamente y entró a la habitación todavía tomada de mi mano, la alcoba estaba perfectamente arreglada, en una de  las mesas de noche había fotos de la familia completa de Alessandra y en la otra mesita había una foto de Alessandra con su padre ambos estaban haciendo muecas raras.

La Alessandra de las fotos que había visto se veía alegre siempre llevaba una sonrisa en la cara, pero claro esas fotos eran de antes de la muerte de sus padres.

Alessandra soltó mi mano y camino hacia la mesita de noche en donde estaba la foto familiar.

—Los extraño tanto.— dijo de pronto Alessandra rompiendo el silencio que se había formado

Bellezas mortalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora