Sangre Salvati

❣ Capítulo 17 ❣

 Espero les guste lo que han leído hasta ahora y les sorprenda lo que queda. Cualquier crítica constructiva o demás pueden dejarla en los comentarios y no olviden dar su voto al final de cada capítulo en la estrellita

Cariños ^^

(Narra Karl)

Los nervios me tenían sin poder quedarme quieto, cometí un error al ayudar a Bech y lo peor es que lo ayude dejando ver mi rostro a los Transgrand. Tarde o temprano llegarían a casa por explicaciones y lo único que tenía a mi favor es que Bech se había marchado lejos de aquí, pero que les iba a decir cuando hablaran con mis padres, estaba claro que Lui me mataría y Lucy me cortaría las bolas al enterarse de que puse en peligro a toda la familia. Debía pensar en algo rápido pero lo único que se cruzaba por mi mente en este momento es que antes de ir a juicio quería ver a Franheska, era la única que me podía calmar aunque ni ella tuviese conocimiento de eso.

Fue así como emprendí marcha a casa de Franheska. Allí estaba Isabela, su madre tan sonriente como siempre y con unos guantes que dejaban en evidencia que se encontraba haciendo alguna especie de dulce en el horno

—Buenas noches Señora Isabela, disculpe la hora en la que vengo a molestar, pero quisiera preguntarle si existe la posibilidad de ver a Franheska - dije con 

—Buenas noches Karl, ella se encuentra en su cuarto si quieres ve por ella debe estar observando los árboles desde su ventana como siempre - dijo amablemente

Subí las escaleras y caminé hacia su cuarto, desde allí pude escuchar el agua caer. lo que me indicaba que ella se encontraba tomando una ducha. La paciencia no es una de mis fortalezas y después de pronunciar su nombre dos veces haciendo un llamado desde fuera de su cuarto, me dispuse a entrar y ahora sí era mucho mas claro el sonido del agua, pero ademas se podía escuchar como cantaba mientras se duchaba, eso siempre la había caracterizado y me alegra saber que las viejas costumbres no las ha perdido.

Mi cerebro y mi impulso estaban teniendo una fuerte guerra en cuanto a que era correcto hacer en este momento. Mi cerebro decía que debía esperar fuera como todo un caballero y respetar su espacio, pero mis impulsos me insistían en que debía abrir esa puerta y ver lo que probablemente sería el cuerpo desnudo de Franheska. Tan solo pensar aquello me ponía con el pulso al docientos porciento. Su piel blanca y suave acompañada de su cabellera roja y larga mojada era mas exitante que cualquier pornografia que se pudiese haber realizado hasta el momento.

Con eso en mi mente ya no pude resistir y me dispuse a abrir tan solo un poco la puerta para poder espiarla sin que fuese descubierto, lentamente fuí abriendo la puerta de su ducha y esta emitió leves chirridos por las bisagras que necesitaban algo de aceite, pero no fueron lo suficientemente fuertes para que Franheska me descubriera. Estaba a punto de lograr ver su silueta cuando sentí la manilla de la puerta en su habitación girarse. Me escondí lo mas rápido que pude bajo su cama y guarde silencio.

Solo lograba ver unos zapatos negros y un pantalon de tela, cada paso que daba parecía ser seguro por lo que supuse que aquella figura correspondía al cuerpo de su padre.

(Narra Franheska)

Sin duda una ducha caliente después de un día de deporte era lo mejor del mundo, aunque por bañarme con agua caliente los musculos que no tenía iban a doler profundamente, aún así merecía la pena.

Tome la toalla y la envolví en mi palido cuerpo para tomar la ropa sucia y llevarla al canasto que estaba en el cuarto del lado.

Al salir del baño me encontre con un hombre bien parecido, de piel morena, ojos azules y un traje que dejaba ver su fuerte figura, pero algo en él me causaba terror y aún no sabía que hacía en mi cuarto

—Volvemos a encontrarnos Franheska- dijo con una escalofriante sonrisa en su rostro

—¿Quién eres? y ¿Qué haces en mi cuarto? - dije asustada tomando fuertemente lo único que cubría mi cuerpo de su descarada mirada que recorría cada centímentro de mí

—¡Oh!, lamento lo despistado, había olvidado que no podías recordarme. Soy Jacob Transgrand tu amo y señor o mas bien tu lider - hizo una reverencia ante mí y levantó su mirada viendo a mis ojos

—No sé que clase de broma es esta, pero no me gusta y te pido por favor que  te retires de mi cuarto - intenté sonar lo mas seria que pude, pero mi voz estaba quebrada, algo en él me hacía temblar del miedo