❣ Capítulo 31 ❣

45 5 1
                                    

(Narra Franheska)

Entre en la casa de Sam y esta vez ya no se me hacía tan cómodo. Pensar que estaba rodeada de chupa sangre y yo podría ser su cena no era de lo mas agradable.

Desde una de las puertas apareció Lucy, la madre de los chicos.

—Hola Señorita Franheska, que agrado verla visitar nuestra choza -dijo riendo, porque estaba claro que ésta casa podría ser todo pero una choza no era opción.

—Hola Señora Lucy, Sam me pidió que viniese porque Matt quería verme y bueno, no me puedo negar a las peticiones de ese pequeño -sonreí

—Entiendo, Matt está en su habitación jugando con sus muñecos -me limité a asentir y Sam me tomó de la mano para subir las escaleras.

Cuando ibamos subiendo la voz de la señora Lucy volvió a oirse

—Espero que te quedes a cenar y no aceptaré un no como respuesta ¡eh!

Me causo risa la forma en que formuló aquel grito, con tanta gracia y estilo, pero Sam arruinó el momento.

—Cuando Lucy dice que no aceptará un no como respuesta, es porque así sera. Mejor que te vaya dando hambre o la harás poner de mal humor si no comes y luego se desquitará con nosotros haciendonos cortar árboles toda la tarde.

Esto último me había hecho sonreír del solo imaginar a Sam siendo torturado cortando árboles toda la tarde ¡ja! , de todas formas se lo merecía por gritarme...

—Esta es la habitación de Matt, por favor se buena con él. Recuerda que eres su madre y bueno -una voz nos interrumpió

—¡Ya te oí papá!, deja tranquila a mamá y dejame jugar con ella -era la voz de Matt. Por alguna razon escuchar aquello me había dado ternura y tranquilidad.

Entre la habitación y Sam caminó hacia la suya.

—Hola Matt ¿Cómo estas? -dije amablemente

—¡Mami! - Matt se levantó y corrió para abrazarme. Instintivamente lo levante y lo acurruque entre mis brazos — te extrañé - acabó diciendo en un leve susurro

No entendía por completo que me estaba sucediendo, pero sí sabía que Matt estaba provocandome una sensación que no puedo explicar, estaba completa. Era como si no necesitara nada mas que este abrazo para ser feliz. De pronto una imagen en mi cabeza, era Matt de bebé en una incubadora, pude saber que era él por un brasalete que decía su nombre y luego Sam me abrazaba, no pude ver mas.

—No te asustes mami, fue mi culpa . Lo siento -dijo Matt

—¿De que hablas pequeño? -dije asustada, pero mi voz sonó tranquila

—Entonces es verdad que no recuerdas nada -respondió triste

—Matt, ¿De qué querías hablarme? -dije intentando cambiar el tema

—Sientaté aquí conmigo -me señaló su cama — Mamá, ¿ya sabes que eres mi mamá?, ¿verdad?

—Si, bueno Sam me lo dijo, pero yo - no terminé la frase y me quedé en silencio

—Lo sé mamá, pero te ayudaré a recordar. Tomaré de tu cabeza, pero no tengas miedo, no te haré nada malo. Solo te haré ver las cosas que yo recuerdo ¿si? -dijo con total normalidad

Ya no sabía que cara poner, primero resulta que los vampiros efectivamente existen, segundo que yo estoy casada con uno de ellos, tercero tenemos un hijo y para rematar resulta que quien se supone que es mi hijo también tiene la habilidad de hacerme ver sus propios recuerdos. 

Estaba en coma y ésto solo era producto de mi imaginación o definitivamente me había vuelto loca. Quisé pensar que era la primera y seguí con el curso de mi loca imaginación

—Esta bien Matt, hazlo -le respondí

Matt puso sus manos en mi cabeza y sentí que mi cuerpo se durmió.

(En los recuerdos de Matt...)

Podía verme a mi mísma estirandole los brazos, pero mi cabello era dorado y tenía una sonrisa que jamás pensé tener. Estabamos en un parque y Matt estaba dando lo que parecían sus primeros pasos, escuchaba su risa al intentar dar cada paso hasta que por fin llegaba y se dejaba caer. Luego estabamos en una habitación y Matt me veía mientras le leía cuentos, él estaba entre mis brazos y cada vez veía mas borroso hasta que se dormía. Ahora estabamos en un bosque, pero también estaba Sam y Matt nos seguía a traves de los árboles, pero alto, estabamos saltando de árbol en árbol, ¿cómo podía hacer eso?. Ahora estabamos con Sam abrazados en una banca y nos estabamos besando mientras Matt jugaba en la arena...

(Fin de los recuerdos...)

—Mami, ¿Estás bien?

—Yo yo debo irme Matt -me levanté le dí un beso y salí de la habitación, pero cuando estaba cruzando la puerta choque con un hombre grande y entonces no recuerdo nada...











Sangre SalvatiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora