-Decidido, me aburrí. Hagamos algo.
Yo alcé la mirada hacia Dan que se había puesto de pie de un salto.
-¿Y qué planeas, hermanito? -canturreó burlonamente Natalia.
-No sé, pero hagamos algo, salgamos, vayamos a alguna reunión, lo que sea.
-Tarado, sabes que a Ale no la dejaron ir a la fiesta de José. Es bastante lejos -mi mejor amiga contestó por mí antes de que pudiera decir nada.
Solté un suspiro, fastidiada. Mis papás eran bastante preocupados con todo el asunto de salidas y de cómo me movilizaría. Solían ser más flexibles cuando sabían que Logan manejaría, pero tampoco era justo tenerlo siempre de chofer.
Estábamos en la casa de Logan reunidos amigos suyos y míos en un grupo con el que solíamos salir juntos. Habíamos almorzado hacía unas horas y en ese momento la mayoría estaba echada en el piso, flojeando.
-Además, esa fiesta era en la noche -comentó Renato -la idea sería hacer algo ahora.
-De seguro a Lorena se le habría ocurrido algo ¿no, Dan? -comentó mi novio para fastidiar a su amiga.
-Ni me recuerdes a esa loca -el aludido puso cara de traumado.
-Creí que te gustaba -se mofó Carolina.
Dan miró a mi mejor amiga como si estuviera loca. Después cambió de expresión a una coqueta.
-Tú sabes que siempre serás mi favorita.
Fue imposible identificar cuánto de esa frase era una broma para fastidiar y cuánto era realidad. Al instante solté un comentario al azar para desviar la atención.
.¿Cuánto tiempo duraron?
-Mes y medio -respondió Natalia también al instante, colaborando en mi intención.
-Me tuvo haciendo mil tonterías por ella y luego no se qué le dio y terminamos.
-Ella te terminó -corrigió Renato riendo por lo bajo.
-Calla, idiota -Dan no pudo evitar reír un poco también.
-A fin de cuentas ¿los únicos que tienen una buena relación son Logan y Ale? ¿Es en serio? -Natalia hizo un gesto dramático.
-Somos un desastre -rió Hans que hasta entonces había estado mayormente callado.
-¡Hey! Que conste que a mí no me está yendo nada mal con mi chico -protestó con una sonrisa Caro.
-Silencio que Dan se pone celoso -se burló Logan.
Dan, que había estado dando vueltas desde que se había parado se detuvo de golpe.
-¿Saben qué me acabo de acordar?
Todos lo miramos intrigados.
-¡La muy maldita desgraciada me hizo escribir nuestros nombres en un árbol!
Fue imposible no reír.
-Zorra desgraciada -masculló él por lo bajo.
-¿Cómo llegó a pasar eso, hermanito? -se rió Natalia.
-Me da casi asco de pensarlo -contestó él pasando por alto el que lo tratara de "hermanito" cuando la mayoría de las veces solía quejarse de ese apodo pues él era el mayor.
-¿Por qué? ¡Es tiernísimo! -rió Hans -Sus nombres estarán ahí probablemente incluso más de lo que duren sus vidas. Muy romántico ¿eh?
Dan se giró horrorizado.
ESTÁS LEYENDO
The Real Good Girl
Teen FictionSecuela de The Real Bad Boy Tener a mi hermano mayor como hermano mayor no era fácil. No tanto por tratar con él, desde chico había aprendido a hacer eso. Es complicado ser alguien si te conocen como "el hermano de...". Ser el hermano de Castiel no...