Wolf's soul Okami no tamashi

Capítulo 27- Las tres malas situaciones.

Lunes por la mañana, hora de ir al instituto, nada más terminar el desayuno, salgo y ya me encuentro la primera mala situación del día: Shizen me esperaba en la parada del autobús. Si a alguien se le había olvidado, sí, el chucho ahora asiste a mi instituto, aprovechando mis talismanes protectores que le dejé.

-¿Se puede saber qué haces aquí?-Pregunté de forma increíblemente fría.

-Sería raro coger el autobús en la parada del templo ¿no crees?

-Primero: ¿desde cuándo te importa lo que piensan los demás? y segundo: Siempre puedes ir corriendo, con lo veloz que eres llegarás antes que el vehículo.- Él se quedó pensando hasta que por fin me miró con aquellos intensos ojos que tantas veces anteriores me había dejado sin palabras.

-No es que me importe su opinión, es que no quiero llamar la atención, ya que solo te traería de alguna forma, problemas, y podría ir corriendo pero también sería raro que yo apareciera de la nada ¿no?

-Así que lo mejor es parecer que vives en mi casa o cerca mio ¿no?-Pregunté vacilante.

-Supongo.-Contestó encogiéndose de hombros, para más tarde levantarse y dirigirse al autobús que había estado hay desde hacía unos segundos y del que no era consciente hasta ese momento. Cuando subimos, absolutamente todo el mundo se quedó mirándonos y lo único que pude hacer, fue mirar con odio al chucho ¿que no quería llamar la atención? por favor... ¿acaso piensa que soy idiota?

Una vez en el instituto Tomomi corrió hacía mi para abrazarme, algo que intenté esquivar, pero esa chica es demasiado rápida.

-Uhh... este de nuevo.-Murmuró malhumorada mirando a Shizen con desagrado y asco, siendo bastante mutuo, ya que formaron en seguida una pelea de mirada.

-Hola Yumiko.-Saludó Hikari, quien acompañaba a Tomomi, pero llegó un poco más tarde por no querer correr al igual que su prima.

-Hola Hikari...-Murmuré sintiéndome increíblemente agotada.

-¿Ya están peleando?-Preguntó acordándose de su mala relación en el tiempo del almuerzo del otro día en el que no hacían otra cosa que no fuera discutir.

-Sí...

-¿Llegará el día en el que se lleven bien?

-Se llevan bien, Shizen no le presta atención a nadie y menos hablar o discutir a menos que le agrade.

-¿Acaso es un tsundere?

-Totalmente.-Contesté al instante sin pensarlo ni un segundo.

Cuando sonó el timbre, por fin la pelea fue interrumpida y por lo tanto Hikari y Shizen se fueron hacía su clase, al igual que nosotras a la nuestra.

-Chicos, sentaros, hoy os presentaré un nuevo alumno, el otro día no pudo asistir por problemas familiares, pero hoy se incorporará con nosotros, por favor, entre y preséntese.-Pidió el profesor.

-¿No hay muchos alumnos nuevos este año?-Preguntaron las chicas que tenía delante, mientras yo miraba sin mucho interés al chico que entraba, hasta que por fin lo reconocí...

-Mi nombre es Seiya y estudiaré aquí, no necesitáis saber mucho más de mi, excepto que no estoy interesado en ser vuestro amigo.-Se presentó haciendo que casi me cayera del asiento, llamando la atención de toda la clase.

-¿Le pasa algo, señorita Gakusha?-Preguntó el profesor con mala cara.

-No, nada.-Negué avergonzada ¡¿Pero qué hacía ese aquí?! ¡¿Por qué mi instituto se había convertido en el nuevo interés educativo para cazadores y youkais de cientos años de edad?! Me preguntaba una y otra vez... ese canoso... pero entonces me percaté de algo... Tomomi, giré lentamente mi cabeza viendo que ya había desaparecido.