Capítulo 30-Los expertos y el nuevo maestro.

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-¿Expertos?-Preguntó Shizen extrañado.

-Sí.-Tomomi contestó con una sonrisa que podría definirse como sexy y segura, como si supiera que nadie podía con lo que tenía ideado, como si con lo que tenía en mente salvaría a su querida y verdadera amiga.

-Normalmente descartaría totalmente cualquier cosa que proviniera de tu mente, pero esta vez tendré que confiaré en ti.-Dijo acompañado de un largo suspiro.

-Se acabó.-Dijo una voz grave detrás suya, haciendo que ambos dieran un rebote de la sorpresa.-Hay que dejar de estar parados y buscar la forma de cómo llegar al reino de los tengus para traer de vuelta a Yumiko-sama lo antes posible.-La voz procedía del cazador que estaba tan estresado que no podía contener ni siquiera su voz.

-Sabe hablar...-Murmuró Tomomi sorprendida.-Espera... esa voz... ¡TU ERES...!

-Calla, idiota, nunca se sabe donde puede haber oídos.-Dijo el chico de negro enfadado.

-Yo ya sabía quienes eran.-Añadió el lobo con tono indiferente.

-Pues yo creía que era...

-Que te calles.-Dijo desesperado.-No digas ningún nombre y céntrate de una vez en Yumiko.

-¡Yumiko! Mi corazón, mi amor, mi amiga, mi niña hay que encontrarla.-Dijo lloriqueando como un bebe dramatizando de una forma excesivamente exagerada para mi gusto.

-Esta niña es tonta.-Murmuró el lobo indignado.

-¿A quién estás llamando tonta?-Sonaron otras dos voces de nuevo a sus espaldas, esta vez una era femenina y otra masculina.

-Nii-san, nee-chan ¡Qué rápido habéis llegado!-Gritó Tomomi corriendo a abrazarles.

-¿Esos son los expertos de los que hablabas?-Preguntó Shizen extrañado intentando adivinar la propuesta de la rubia.

-Exacto y es lo mejor que encontrarás.-Afirmó la hermana con un tono vacilante.

-Son mis hermanos mayores, son mellizos, ella se llama Yoko y él Kaito.

-Me parece maravilloso, pero ¿podemos averiguar cómo ir al reino de los tengus para salvar a Yumiko?-Preguntó el cazador desesperado.

-Si queréis volar hay un dios que tu deberías conocer muy bien, Shizen.-Propuso Kaito con una sonrisa vacilante.

-¿Cómo sabes mi nombre? espera... ¿no hablarás de ESA?

-Más bien ¿quién no sabe tu nombre? y creo que deberías tenerle más respeto después de la vergüenza que le hiciste pasar.

-Dios... matarme.

-Si no nos ayuda, exactamente será eso lo que hará.-Opinó Yoko riendo despreocupada.

-¿De quién habláis?-Preguntaron tanto Tomomi como el Cazador al unisono de una forma que mostraba una absoluta confusión.

-Hay una forma... pero no quiero llamarla... hace mucho que no la veo y su furia no es de la que se relaja con los años.-Murmuró el lobo ligeramente asustado.

-Pues tendrás que elegir, llamarla y salvar a tu querida sacerdotisa o abandonar, ya nosotros encontraremos otra forma sin TÚ ayuda.-Le propuso Kaito con los brazos cruzados.

-Nos ignoran.-Volvieron a murmurar al mismo tiempo.

-Ogh... hay que llamar a Seiya.

-¿Alguien me busca?-Preguntó el zorro saliendo de la nada con una llamarada azul a su alrededor.

-¿Tu no te habías ido?-Preguntó el lobo molesto.

-Yo siempre estoy en todas partes, observándoos de cerca, soy omnisciente como los narradores.-Contestó riendo.

Wolf's soul Okami no tamashiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora