Sé que no debo escribirte de nuevo, porque tal vez ni siquiera te importe, pero la verdad es que... lo siento, sólo... Te extraño, es todo. Puede que no sea tan importante, o si quiera algo que necesites saber, pero esta es la cuarta noche que no duermo pensando en ti, llevo más de dos cajas de cigarrillos en mis pulmones, y más de una botella en mis riñones, además de mi corazón hecho de porcelana. Estoy perdido sin ti, no sé qué hacer, pensé que podría ser fuerte sin ti... pero no, no puedo, te necesito, eso es algo evidente, la pregunta realmente sería... ¿Tú me necesitas, digo, si quiera piensas en mí antes de dormir, como yo lo hago?
Tal vez los sentimientos desaparecen cuando las personas cambian, pero ha pasado algo de tiempo, y yo sigo siendo el mismo tonto enamorado de mí, nunca terminaré de describir lo bonito que es que mi corazón haya sido roto por ti y no por otra persona, eso me alegra, de algún modo.
He pasado un par de noches fumando en aquella esquina, esa donde mi mente solía pensar que te veía casi a diario, y lo cual terminaba por ser mi felicidad durante el resto del día, recordé las veces en que tus mejillas ardían, y me reía con sólo verte; fue lindo, después de todo, uno siempre vuelve al lugar donde alguna vez fue feliz, por eso volví a ti, de esa confusa manera, no como quisiera, pero tampoco como debería. Los niños me miraban raro, ya no se acercaban a jugar conmigo, como solían hacerlo a menudo, es increíble el poder que tiene la depresión y los vicios, cuando se trata de alejar personas importantes, ¿no crees?
Te extraño, joder, como nunca, como a nadie. Te extraño cuando no puedo dormir, cuando no logro reír, cuando se me dificulta vivir con esta carga sobre mi pecho y mi corazón. Realmente te necesito... Maldita sea, vuelve, por favor. La verdad es que... Te amo, y esto me está matando.
-Dark.
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Cartas de un corazón roto.
RandomSi perteneces al club de los que aman tanto que rompen su propio corazón, eres bienvenido, disfruta tu estadía.