El mundo era una jodida mierda.
Lleno de días grises.
De lluvia que no cesaba.
De ganas de mandarlo todo a la mierda.
Entonces, aparecías y me sonreías.
Se detenía todo por un segundo.
Incluso dejaba de llover en tus pestañas.
Y te juro que me daba igual
Que mi día hubiese sido una mierda
Si tú me decías que estarías conmigo.
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Cartas de un corazón roto.
AcakSi perteneces al club de los que aman tanto que rompen su propio corazón, eres bienvenido, disfruta tu estadía.