Todos nos acercamos, pero nadie abre la puerta. Es demasiado tarde. Cuando veo al hombre siendo devorado, haciendo sus últimos gritos, es cuando revivo la visión. 3 soldados llegan a la puerta para hablar con Robert. Yo me quedo quieto. Nayeli se tapa la boca y se voltea en cuanto llega a ver lo sucedido.

Oscar se enfurece entonces. ¿Era su amigo? Entonces él se acerca a mí con el puño cerrado acercándose con velocidad que ni si quiera lo noto. Me da un golpe en la boca.

-¡Maldito! –Me grita.

-¡Oscar! –Grita Robert. Oscar sigue encima de mí, golpeándome y gritándome cosas que ya no comprendo. Ya no puedo ver bien, pero cuando veo que se voltea a gritarle a Robert, lo pateo y doy un codazo en el estómago al estar de rodillas. Escucho a Newit gritar de lejos y lo veo correr hacia nosotros. Robert y uno de los soldados detiene a Oscar y Newit me ayuda. Nayeli llora, esperando que no muera de alguna manera o que me vuelva... que me vuelva... Todo... está oscuro...

Despierto en una camilla y Nayeli está dormida, sentada a mi lado derecho. Empiezo a gemir, porque mi voz no quiere sonar correctamente. No siento mis labios y mis dientes duelen. Ese fue un golpe fuerte. Bueno... varios golpes. Nayeli despierta y se sorprende al ver que estoy despierto.

-Hola.

-H-Hey. –Es lo único que puedo decir.

-Tranquilo, no te esfuerces.

-Estás muy mal, amigo. –Dice Newit.

-Cállate, ¿Quieres? –Dice Nayeli.

Newit suelta una risa. –Perdón, es que sí fue un golpe. Pero me alegra que ya estés bien. Aunque te estás empezando a ganar una reputación como el chico que siempre cae inconsciente.

-Sólo fueron... -Es lo que puedo decir. Luego hago una seña con mi mano para decir ''Dos''.

-Ya veremos qué tal será la tercera vez. –Responde Newit.

-No pasará. –le dice Nayeli.

-¿Cuánto pasó? –Digo en voz baja.

-Un día. A Oscar lo encerraron en el mismo lugar que a ti, pero saldrá mañana.

Genial. Me hará la vida difícil. Creerá ahora que todo lo que pase sea por mi culpa. Al menos ahora no tuve visiones. Aunque sigo pensando en lo que fue. Ahora que lo pienso, una de mis primeras visiones fue de zombis comiendo. Entonces revivo la imagen del soldado siendo devorado. Al principio vi sólo a los zombis. Pero ahora puedo conectar ambas visiones. Eran una sola. Quiere decir que sólo quedan 2 visiones originales por revisar. La chica encapuchada y el bosque fueron las visiones de la primera vez que caí inconsciente.

¿Cuántas más tendré que ver?

Después de varias revisiones, la doctora me deja salir de la enfermería. Por fin puedo hablar normalmente, aunque quedaron unas cicatrices y un poco de molestia entre los dientes. Adiós comidas sólidas o carnosas por los siguientes días.

Al salir, Alex me da indicaciones de ir a entrenar con los demás.

-¿Entrenar? –Le pregunto.

-Así es. Ahora que estás bien, necesitas estar en forma para proteger el lugar. –Responde.

Me llevan a los vestidores de la escuela y me dan algo de ropa cómoda para iniciar el entrenamiento. Una camisa de manga larga y gruesa unos pants. Salgo a la explanada y veo 2 líneas formadas de personas. En una, están mis amigos, pero hay más gente. ¿Será que en mi ausencia, hallaron más gente?

-Muy bien. –Exclama Alex. –Para los que acaban de llegar. El grupo de Jimmy y el grupo de Ángel son los nuevos en integrarse, así que les explicaré. Todos los que llegan a este lugar necesitan entrenar para mantenerse en forma. Nuestra prioridad es salir a lugares en grupos de tres y tratar de encontrar sobrevivientes, comida, armas y lo que sea que nos sirva para sobrevivir. Y encontrarán infectados en su camino. Deben estar listos para luchar o escapar cuando sea necesario. Empezaremos con el calentamiento.

Bueno, así inicia el día. Salgo de tener heridas superficiales para terminar con dolores internos de tanto entrenar además de ser acompañado por quien me dejó inconsciente. Fascinante. 

Apocalipsis MutanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora