Alex, Nayeli y yo nos dirigimos a donde están Bianca y Valeria. Les damos un aviso de que nos sigan.

-Bien, chicas. –Comienza Alex. –Vamos a ver sus ''Habilidades sobrehumanas''. Robert estará dormido, así que sólo yo observaré.

-Bien. Bianca puede moverse más rápido que cualquiera cuando escucha música. –Volteo hacia ella y veo que tiene su iPod para encontrar algo. Intento hablar, pero ella me hace una seña para que no diga nada mientras sigue con la cabeza abajo, observando su aparato para encontrar algo.

-Ok. ¿Qué quieren que haga? ¿Sólo correr? –Pregunta Bianca.

-Hazlo en distintas direcciones. Imagina que hay zombis a tu alrededor. Utiliza tus cuchillos y muévete rápido como lo hiciste allá afuera.

-Entendido. Pero necesito que me presten un cuchillo largo. O un machee pequeño. Lo que sea sirve, no usaré mi espada por el momento. –Dice, tronándose los dedos, uno por uno.

-Seguro. –Dice Alex. –Toma. –Dice, entregándole un cuchillo militar.

-Lindo. ¿Me lo regalas?

-Bianca. –Exclamo. –Concéntrate. Ella se coloca los audífonos mientras hace rodar sus ojos expresando fastidio.

Ella empieza a correr, pero no es tan veloz como antes. Se detiene, da unos pasos a la izquierda. Mierda. Está empezando a bailar.

-Oh mama mia, mama mia. Mama mia let me go. Beelzebub has a devil put aside for me. For me. !For me! –Reconozco esa canción. Bohemian rhapsody de Queen. Ella abre los brazos dando un giro lento con los ojos cerrados. Mueve la cabeza hacia la derecha. Pareciera que está poseída. Luego abre los ojos y el show comienza.

Corre de un lado a otro, haciendo cortadas hacia la nada. Es... impresionante. Da un salto y hace un giro espectacular en el aire, luego cae con el cuchillo hacia el suelo, voltea hacia atrás y realiza tres cortes. Uno bajo. Otro alto y el último medio. Es como si hubiera un zombi o quizá una persona detrás. Haciendo un corte hacia las piernas para hacerlo caer, luego un corte al cuello y por último, el estómago.

Se mueve de izquierda a derecha de una manera interesante. Es muy rápida. Corriendo de un extremo a otro en menos de un segundo.

-So you think you can Stone me and spit in my eye. So you think you can love me and leave me to die. !wow! Oh, baby. Can't do this to me baby. Just gotta get out. Just gotta get outta here. –En eso, saca su arma y dispara hacia la roca que está alado de mí.

-¡Puta madre, Bianca! –Exclamo. -¿Qué mierda te sucede?

-¿Querías un show? Esto es parte del espectáculo, muchacho.

A lo largo, se escucha un aplauso. Es Robert. Estuvo viéndola todo este tiempo. –Brillante. Espléndido. Esta chica tiene habilidades sobrehumanas.

-¿Quién es el G.I. Joe? –Dice Bianca. Yo la observo con intriga por decirle algo así. Podría expulsarla del lugar. Pero a Robert no parece molestarle. Se ríe de ello.

-Me agrada esta. Mi nombre es Robert. Soy quien ordena las cosas por aquí. Y eso que hiciste fue impresionante. Eras difícil de ver.

-Gracias. –Responde Bianca. Luego se va y se sienta en una banca del otro lado del árbol y estira los brazos hacia enfrente. Valeria se levanta inmediatamente para mostrar lo que puede hacer. Se aleja un poco más a cada segundo para no hacerle daño a nadie. Pero se da la vuelta y apunta su dedo índice hacia una roca. Entonces, con puño cerrado, empuja la piedra con un rayo, haciéndolo caer del otro lado de la explanada. Voltea a vernos con sus ojos brillantes color rosa. Su cabello flota en el aire, luego todo su cuerpo se eleva. La energía emana de sus brazos, su torso, su cabello y especialmente, de sus ojos.

Robert queda asombrado al verla. Pero poco después, Valeria desaparece. Luego reaparece detrás de nosotros.

-Santa... Mierda. –Exclama Alex. –Eso no me lo esperaba.

-Tu demostración fue corta, pero muy buena. –Dice Robert. –Es increíble que esto suceda. Hace unos días, conocimos a los zombis. Ahora también tenemos poderosos.

-Aún falta Nayeli. –Dice Alex. Ella se levanta, pero se queda inmóvil por un momento. Aún no sabe qué puede hacer.

-Te tienes que concentrar. –Dijo Valeria. –Cerré mis ojos e imaginé que controlaba la energía la primera vez que me di cuenta de lo que podía hacer. Fue confuso, pero poco a poco lo pude controlar. Golpea algo.

Nayeli mira el brazo que tiene la marca y cierra los ojos y su puño. En eso, las escamas azules aparecen y cubren su brazo. Ella toca su brazo. Siente lo resistentes que son las escamas. Entonces se agacha, grita y golpea el suelo.

Quedamos atónitos por el resultado. El suelo se parte como si una roca enorme hubiera caído y hubiera roto todo.

-Yo esperaba... que golpearas... algo más ligero. –Dice Valeria sorprendida.

Volteo a ver a Robert. El sonríe. Sé lo que piensa. Esta es una oportunidad grande para proteger a los sobrevivientes de este lugar.

-Parece que las cosas se pondrán interesantes ahora. –Dice Alex.

-En efecto. –Dice Robert. –Sin duda esta es una gran revelación. Tenemos a nuestras guardianas.

-Lindo. Un ascenso. –Dice Bianca.

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Apocalipsis MutanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora