capitulo 24

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Luc, me dejo al día siguiente en mi casa, nos despedimos y entre a ducharme porque kendall quedo de pasarme a buscar, afortunadamente mamá no estaba en casa, subí las escaleras a mi habitación entre y me quite la ropa, le escribí un texto a kendall para que pasará por mi en media hora, entre a ducharme y luego de cambiarme baje a la cocina a preparar algo de comer... Sali a fuera a esperar a kendall en la escalerilla de la entrada... La mamá de zac estaba regando el jardín y cuando me vio, me saludó inmediatamente... Le devolví el saludo a fin de cuenta no tenia nada contra ella.

- ¡Gia!¿Puedes venir acá un segundo?

-  Buenos días señora picke, ¿Digame puedo ayudarla en algo?

- si no éstas muy ocupada, puedes venir después de clases, necesitó que sepas unas cuantas verdades... Y no te preocupes por zac, el ya no esta aquí, se fue de viaje nuevamente...

- si señora...

En ese preciso momento llegó kendall, y yo me despedí de ella para irme con mi amiga... Estaba algo confundida, que verdades podría decirme ella...

- Hola kendall

- Hola Gia, ¿Como te fue ayer?

- Bien... Todo fue excelente... Estaba tan absorta pensando que quería decirme la señora picke, que no me anime a contarle a kendall lo sucedido con luc, ya mi mente no estaba ahí... Fuimos el camino entero algo calladas

- ¿Te pasa algo Gia? Desde que te recogí te noto un poco distraída, además prometiste contarme lo de luc, y estas cómo en otra parte. 

- Disculpadme kendall, es que está mañana la mamá de zac, dijo que quería hablar conmigo unas cuantas verdades y eso me tiene pensantiva.

- ¿la mamá de tu ex-novio?

- si...

- ¿y qué querrá?

- no lo sé, pero siento que no es nada bueno...

Me fui a mi clase, y kendall a la suya... Pase el resto del día sin prestar atención en mis tareas, ¡Joder, que querrá decirme esa señora!

...

Luc pasó a recogerme ye invito a cenar, pero decline su oferta y le dije que tenia algo pendiente que hacer con mi mamá, me llevo a casa he inmediatamente lo vi doblar la esquina, corría a casa de los picke, para salir de esta maldita duda... Toque las puerta varia veces, y cuando me disponía a irme en ese instante la señora picke abrió la puerta...

- Gia, querida, que bueno que pudieras venir, pasa.

- Gracias señora picke, la verdad estoy algo curiosa por saber lo que tiene para decirme.

- voy a servir algo de té, antes de empezar... Por favor sientate regreso enseguida.

Me senté en él elegante sillón que habia en la sala, pero una foto en un estante me llamó la atención y me levante a observarla mas de cerca; era zac en un traje militar, llevaba la cabeza raspada y tenia unos cuantos broches de reconocimiento... No sabia que zac se hubiera unido al ejercito

- se ve muy guapo en uniforme

Me gire sorprendida, no había notado que ella había regresado de la cocina...

- ven Gia, sientate, te serviré un poco de té...

- gracias

- sabes Gia, cuando eres padre tu prioridad es evitar cualquier cosa que pueda lastimar a tus hijos, eh incluso a veces sin darnos cuentas le hacemos más daño del que tratamos de evitarles... No me siento orgullosa de lo que hice pero en aquel entonces mi esposo y yo pensábamos que era lo mejor, por muchos años vimos a zac sufrir por nuestra propia culpa...

- lo siento señora picke pero no entiendo de que me hablá.

- Gia, cuando te enfermaste zac nos dijo que nunca te dejaría, nosotros pensábamos que si Morías seria muy duro para él superarlo, al principio no dijimos nada, pero al ver que empeoraste en menos de un mes, pensamos que no sobrevivirias, y que zac no iba a soportar tu partida, así que mi esposo y yo decidimos enlistarlo en el ejercito para poder alejarlo de ti... Zac no comía, no quería salir de su habitación y fue duramente castigado por sus mayores en el pelotón por esta rebeldía... Cuando le tocó su primeras vacaciones del ejército corrió a tu casa antes de llegar si quiera a la nuestra, pero ya te habías mudado, y nosotros realmente no sabíamos donde estabas, zac te busco por todas partes, hablo con todas tus amigas pero nadie sabia nada... Vi a mi hijo morir en vida de dolor, un dolor que yo había causado porque el quería estar a tu lado y se lo impedimos, zac dejo de venir a casa cuando le tocaba visita, dejo de hablarnos y nunca respondía nuestras cartas... Se aisló en el ejercito porque no le dimos más opciones, hace unos meses le envíe una carta diciendo que por favor nos perdonará y que me estaba muriendo de dolor, le conté que nos íbamos a mudar... Y para mi sorpresa el vino a casa días antes de mudarnos, estaba tan agradecida de que el volviera a hablarnos que juré que si algún día te veía te contaría toda la verdad... ¡Gia, zac nunca te dejó!

Estaba muda, las lágrimas corrían por mi cara, ¿Como era esto posible? Todos estos años odiándolo pensando y preguntándome porque lo había hecho...

En Cuanto Te Vi.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora