La Coleccionista → EXO

t r e i n t a y s é i s | dicotomía » chensoo

Título: Dicotomía
Pareja: Kyungsoo + Jongdae
Género: comedia, fluff, romance
Número de palabras: 2.2k
Resúmen: Frases para conquistar a tu Pingüinsoo por Kim Jongdae. Resultados no garantizados.
Fecha de publicación: 23/09/15

🐧🐫

Dedicado a Linna 🌸

Kim Jongdae siente un odio rotundo y especial por Kim Jongin, porque, no es como si envidiaría esa tersa piel morena que le hace parecer modelo de revista caribeña, ni mucho menos esos prominentes y sensuales labios, tampoco su forma de moverse sobre el escenario, ni sobresalir con todo mundo, no. Definitivamente Jongdae no odia a su hermano menor por ese hecho.

Tiene que ver con algo más, algo de un metro sesenta y tres y piel blanca.

Do Kyungsoo. Mejor amigo de su hermano menor, para ser exactos.

Jongdae conoce a Kyungsoo desde que tiene doce años, cuando simplemente era una masita deforme y tímida que solía llenar sus pantalones de lodo y que, por alguna razón, adoraba abarrotar los calcetines de Jongin con hormigas y de allí la renuente idea de su hermano a no usarlos por el resto de su morena existencia.

Se sentaba en el banco de su jardín a tomar el sol y a observar cómo, la mitad del tiempo, Kyungsoo y Jongin jugaban a las guerras de loso y terminan con manchas imposibles de remover. Jongdae tenía quince para aquel entonces, y era todo tan llevadero, Kyungsoo solía brindarle rozagantes sonrisas y le decía Hyung cada vez que respiraba.

Pero Jongdae tuvo que mudarse con su tía en Seúl y se perdió del crecimiento de todas las personas en Busan, regresando cinco años después, con la misma apariencia aunque un poco más guapo, y encontrándose con que ya nada era igual, comenzando por el giro radical que había dado su hermano, y por supuesto Kyungsoo.

Kyungsoo ya no era la misma masita que se despidió de él entre gimoteos y balbuceos, ahora era un hombre de casi dieciocho años, que tenía el pelo negro como la noche, el rostro más limpio de todos y los labios abultados.

En pocas palabras, Kyungsoo era otra persona, más hermosa, más atrayente y por Dios, con esos pantalones de tubos ceñidos al cuerpo, más sexy.

Pero no simplemente había cambiado físicamente, también su personalidad tímida había decidido tomarse unas vacaciones y había quedado un Kyungsoo más severo al andar, con escrutinio en la mirada y palabras contadas.

Jongdae incluso sentía miedo de él, aunque las sensaciones que Kyungsoo provoca con su andar van más allá del miedo, si es un poco sincero. Kyungsoo es un enigma y Jongdae quiere ser parte de él en todos los aspectos. Lo único que falta para eso es un poco de habladurías y labia cursi. Y que Jongin suelte el brazo de su chico aunque sea para ir al baño.

—Oh por Dios siento que lo odio —se queja, con sus brazos cruzados, y viendo fijo el lugar donde están los dos menores tomando un helado.

—Jongdae, es tu hermano —refuta un chico exorbitantemente alto y de rizos castaños cayendo en su frente.

—Sí, pero no deja ni a sol ni a sombra a Kyungsoo-yah.

—¿Será porque son mejores amigos?

Jongdae fulmina con la mirada a Chanyeol, uno de sus mejores amigos, y bufa ordenando su tercer helado en lo que va de tarde. Hace calor y no tiene que ver con el sol allá afuera quemando a diestra y a siniestra sino, más bien, con cierto pingüino de tierra caliente que va por la vida con shorts cortos y camisa sin manga, Esto es del diablo, piensa Jongdae.