My Puddin

An agent of chaos

A pesar de lo bien que lo pasamos ayer las cosas siguen siendo extrañas, no le he dicho a nadie lo que pasó con Mr J, y ellos intentan no presionarme.
Mi venganza a sido apartada, pero tengo un problema:
Si no consigo atrapar a Mr J me volverán a encerrar en Arkham, pero no quiero volver a estar con él, no quiero relacionarme ni hablar ni luchar con él.
Estoy harta de luchar con él.

- Quizás deberías entregarte, querías dejar la locura atrás.
- ¿Qué? Oye, entendía que defendieses nuestro amor por Mr J, ¿pero entregarnos al manicomio? ¿Qué te ocurre?
- Sólo digo que él fue quien nos hizo sí, si no vamos a volver con él no deberíamos seguir siendo Harley.
- ¿Pero qué te has tomado?
- No todo gira a su alrededor, mira todo lo que hemos conseguido.
- ¿Depresión, locura y una ficha criminal?
- ¡No! Amigos, dinero y un pasado. Y lo más importante: libertad.

Me negaba a seguir pensando en eso.
Ahora estaba sentada en la ventana del salón, mirando Gotham de noche. Las personas desde aquí parecían hormiguitas que se movían de un lado para otro sin orden ninguno.
Cogí una cucharada del Puddin que me había preparado Deadshot. No era un gran cocinero, pero confiaba en no envenenarme.
Los coches circulaban por todas direcciones, los edificios se alzaban aquí y allá y el cielo, ya casi oscurecido, mostraba algunas estrellas entre nubes rosadas por el crepúsculo.
Era el órden perfecto dentro del caos. "Instaura una pequeña anarquía, altera el orden  establecido y empezará a reinar el caos, ¿sabes algo sobre el caos? Es justo"
Las palabras de Mr J resonaron en mi cabeza, literalmente, una y otra y otra vez.
-¡Callaos ya!- Cat apareció por la puerta. Sé que quería que supiese que estaba ahí, porque si no, no la habría escuchado entrar.
-¿Todo bien?- Dijo sentándose a mis pies. Yo asentí y sonreí.- No sonrías tanto. Sé que no estás bien.- Yo la miré mal.
- Vaya, te pasas unos días fuera y no te dejan ni sonreír.
- Vamos Harls, deja los chistes. Floyd y Red no se atreven a presionarte, pero a mi me da igual, porque me importa una mierda que tu frágil corazoncito no quiera contarnos lo que sea que haya pasado.
-¿Floyd?- Dije lanzando una mirada cómplice, Selina me fulminó con la mirada y yo rodé los ojos.- Todo está bien.
- Yo no sé cómo has sobrevivido tanto tiempo con el Joker con lo mal que mientes.
- Bueno, una aprende trucos y cosas que...
- Harley.
- No quiero preocupar a Poison. Sólo es otra pelea.- Selina me miró intentando averiguar si decía la verdad o no.
- Cuando peleáis sueles venir gritando que vas a descuartizarlo y dárselo de comer a tus hienas. Luego le llamas a los tres días pensando que Poison no se entera. Os reencontráis y vuelves con él. En raras ocasiones estás a punto de matarle, pero en el último momento te hace cambiar de opinión y vuelves a su lado.
No sé si te has dado cuenta, pero en todos los casos vuelves con él. Sin embargo esta vez viniste llorando, te encerraste y no dijiste nada a nadie, han pasado cuatro días y no has hablado con él ni trazado un plan para destruirle.
¿ Qué ha pasado?- Yo aparté la mirada. Cat tenía razón, esta no había sido otra pelea, esta vez yo estaba realmente rota.
- Ya sabes que hizo un trato para que me encerrasen en Arkham. No sé qué le prometieron ni por qué lo hizo, pero luego me abandonó allí.
Salí gracias a Waller y me decidí a acabar con él. Era un plan fácil.- Reí.- Me acercaba, le hacía confiar y atacaba. Claro que entonces descubrí lo de su trato con Arkham.
Decidí atacarle de frente, huí con Poison y me enfrenté a él en el baile, todo hubiese acabado como las otras veces de no ser porque el murciélago se interpuso y me quedó inconsciente.
Me desperté en la Batcueva, me curó y me lavó la ropa, para luego llevarme con Amanda, que quiso volver a encerrarme por fastidiar su misión contra el Joker.
Así que escapé. Hace un tiempo conocí a alguien, es muy gracioso y... casi le considero un amigo, excepto porque me engañó para verme hacer twerk.- Selina me miró confusa.- El caso es que estuve con él, pero Mr J había mandado a gente a buscarme, y me encontró, nos encontró.
- Vale, ataque de celos nivel apocalipsis, tu amigo convertido en zombie, y tú... ¿tú qué?
- A mi me intentó matar. Pero cambió de idea.
- ¿Decidió que era mejor torturarte? ¡Menudos novios tienes!
- No, simplemente me dejó ir, me desperté en su cama y él... Estaba muy distinto. No debería contarte lo que pasó, es algo privado, pero te puedo decir una cosa: Se acabó.

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Nuevo cap!! Disfrutadlo
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