Capitulo 8

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La tarde siguiente lo paso sola, el domingo paso lluvioso si mucho o nada que decir, durmió casi todo el día y cuando estuvo despierta solo estudio un poco para la semana que se le venia encima, comió poco y no sonrío ni una sola vez, su madre quien se encontraba en casa no pudo hacer mas que ver como su única hija se sumergía en esa depresión que al haberse mantenido oculta comenzaba a hacer mecha en ella notandose en esos semicírculos negros debajo de sus ojos rojizos después de tanto llanto.
—¿Comeras algo? —Pregunto la mujer mientras entraba con un tazón de sopa en sus manos, la chica sorbió su nariz limpiándola con su ante mano.
—No tengo hambre, de hecho estoy cansada —Musito soltando un bostezo cansino y débil.
—Lola, Julia me lo a contado ¿Puedo saber que piensas al respecto? —Pregunto bajito tratando de no derrumbar su alma que parecía querer irse con el viento.
—Mamá yo no... —Trato de excusarse removiéndose entre sus sabanas.
—Sin excusas hija, quiero la verdad —Pidió con desesperación, con esa nostalgia plasmada en cada letra.
—Y-yo...tenia esperanzas de estar con el, de que Rick un día se diera cuenta de que yo puedo ser todo lo que el espera...pero el esta enamorado de esa mujer y ahora de su bebé ¿Que puedo hacer yo? Solo quiero saberlo feliz ante toda la tristeza que esta viviendo en casa. —Musito en pausa, tratando de convencerse a si misma de que lo que decía era lo correcto de que poner la felicidad de el ante todo era lo mejor por ahora.
—Lola ahora te daré un consejo que me dio tu abuela cuando estaba mas joven casi de tu edad, pasaba por un ruptura y estaba perdida, pero tu abuela me dijo Para amar a alguien mas debes amarte a ti mismo , justo en ese momento no logre entender esas palabras pero luego si lo hice y ahora entiendo cuanta sabiduría había en esta frase, ¿Como amaras a alguien si no sabes lo que se siente el amor? ¿Como averiguar lo que se siente el amor si dentro de ti no hay ningún aprecio? Amándote, amas, porque estas llena de ese sentimiento y puedes transmitirlo, entonces si amas a Rick no pienses que sera mejor para ti el no decirlo porque te estas lastimando y el debe saberlo para dejar de lastimarte.
—Voy a perderlo si le digo —Exclamo con miedo, porque aunque entendía que debía decir lo que llevaba dentro, también sabia que había un precio.
—Pero dime...¿Seras feliz? —La pregunta retumbo en su cabeza llena de verdades falsas que se había imaginado pues si bien había pensado mucho en el asunto solo se había llenado de escenarios imposibles donde el amor que sentía era posible y real.
—N-no ---Respondió con simpleza.
—Rick siendo tu amigo ¿Querrá que seas infeliz? —De nuevo la respuesta fue un rotundo no. —No puedes vivir amarrada a algo falso hija, tienes una vida por delante ¿Porque desperdiciar tus años hermosos en una vida sin felicidad? —De nuevo tenia razón, y esa seguridad que había deseado tener se veía latente en sus ideas, debía hablar, debía decir lo que sentía para ser liberada de esos demonios color rosa que la atormentaban haciéndola víctima de sus sentimientos bellos pero hirientes, debía pagar un precio por su libertad y eso seria la sorpresa de su amigo.

Un amor en septiembreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora