Capitulo 11

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Sus manos jugueteaban nerviosas frente a ella, sus dedos danzaban entre ellos fríos y sudorosos, su mirada clavada al piso solo demostraba la inseguridad de lo que haría, había pensando tanto que incluso solía, mojo sus labios respirando hondo, pues sus pulmones se encontraban comprimidos haciendo que su respiración fuera corta pero acelerada, sus nervios explotaban ante la tensión de la situación, si bien sabia que delante de esa puerta se marcaba un antes y un después, ella ahora tenia en sus manos el destino ¿Pero hacia lo correcto? mordió ligeramente su labio inferior ante la presión que se forjaba detrás de su cabeza. Levanto la mano mirándola temblar, toco la puerta varias veces repetidas, escuchando como el sonido seco de la madera impactaba contra sus oídos. Soltó un respingón cuando la mujer que había visto por tantos años ahora estaba parada frente a ella, su piel estaba pálida y sus ojos cansados guardaban una rojez en los bordes.
—Lola, hola —Saludo abatida ¿Que había en su voz que sonaba tan triste?
—Hola...¿Esta Rick?
—S-si, bueno... el...—Un fuerte estruendo se escucho detrás de ella, vidrio quebrado entendió, la mujer corrió dentro, mientras era seguida por la joven, al llegar a la sala una escena desgarradora se presencio, aquel joven, con el que había crecido, con el que compartía tanto, estaba de rodillas al piso, lágrimas bañaban sus ojos, su cabello mojado y el temblar de su cuerpo solo dejaban claro el sufrimiento.
—¡Rick! —Se lanzo a su lado sin poder evitarlo, sintiendo como las lágrimas también bañaban sus mejillas, tomo a ese cuerpo que parecía inerte ante la situación y lo apretó fuerte contra su pecho, la sensación de que se iría la heria en lo mas profundo, quería ver sus ojos vivos de nuevo. Permaneció allí minutos, mientras poco a poco Rick fue aceptando a esa pequeña que se mantenía aferrada a su cuerpo sollozando en quejidos fuertes que partían el alma, la abrazo, lamentándose con lágrimas tibias sobre su cuello.
—Vivian se ira con otro Lola, ¡Se ira! —bramo lleno de amargura.
—Rick —Susurro mirándolo a los ojos —Rick debes calmarte —Pidió asustada de que las peores locuras que por su cabeza pasaran fuera hechas una realidad sin vuelta atrás.
—¡Ella se ira con mi hijo! ¡Con mi hijo! —Grito alejándola, aferrando con sus dedos el cabello negro que ahora estaba sobre su frente.
—¡No! Rick estas equivocado ese bebé no es tuyo —Murmuro suplicante, con lo poco que su voz dejaba oír.
—¿Q-que? —Pregunto el sorbiendo su nariz.
—E-ella...Ella te engaño —Susurro arrepentida, tratando así de que entrara en razón pero lo único que recibió de su parte fue una sonora carcajada.
—Estas loca, ella...ella no haría eso nunca —Defendió.
—¡Rick! ¡Ese bebé es de Jhon! —Grito aferrando a su camisa molesta de que no pudiera entender que había sido engañado, que habían jugado con su corazon. Saco el móvil de su bolsillo trasero y extendió el vídeo frente a el donde el engaño era aceptado, donde el romance hoy producía dolor.
—N-no...no...no —Sus labios repetían la misma palabra una y otra vez hasta que aventó el móvil fuerte contra la pared. —¡Esa no es ella Lola, eres una mentirosa! —Una sonora bofetada fue pronunciada sobre su mejilla, mientras la joven bufaba molesta.
—¡Entra en razón de una vez por todas! —Vocifero al borde. —¡Rick ella nunca te quiso, ella nunca te amo! —Añadió llorando. mientras lo escuchaba sollozar.
—No...te equivocas, ella lo era todo, ella era mi todo, no había una chica igual a ella, que me quisiera como lo hacia ella, que me entendiera tanto como lo hacia ella. —Musito bajo.
—¡Idiota! —Golpeo su hombro —¡Claro que lo había! —Grito levantándose. El la miro confundido imitando su acto.
—¿D-de que hablas?
—T-tu...tu eres un idiota, había una chica Rick, una chica que te amaba en secreto, que se enamoro de ti, que te entendía, que siempre estuvo para ti y nunca la notaste. —Murmuro casi en un susurro.
—¿Lola...D-de que hablas?
—¡De mi! ¡Yo me enamore de ti Richard! —Plañió —Me enamore perdidamente de ti, de tu sonrisa, de tu mirada, yo te ame cuando ella no lo hizo, cuando estabas solo, yo fui quien te amo, yo te amo aun —Su voz se apagaba poco a poco mientras sentía como su interior se sentía libre, tal vez demasiado, la paz que tanto había buscado parecía tomarla de la mano. —Me enamore de ti...como nunca de nadie, sintiendo el dolor de tu noviazgo, todo Rick...Quería decírtelo pero...
—No —Corto el. —Lola tu eres mi mejor amiga, y yo no pienso dejar a Vivian.
—¿Sigues pensando en buscarla? —Pregunto incrédula, con el dolor de sus palabras en la boca. El asintio ligeramente con su cabeza. —¡Eso es una locura! —Recalco.
—Lola ella es el amor de mi vida.
—Rick yo esperaba....—Se detuvo en sus palabras, antes de que su vulnerabilidad fuera demasiada expuesta.
—¿Que esperabas? —Pregunto a su lado.
—¡Esperaba que me vieras como a ella, que me sonrieras como a ella, que me hablaras como a ella, que pensaras en mi tanto como en ella! —Vocifero mientras limpiaba con brusquedad lágrimas que salían de sus ojos. —Y-yo —Balbuceo, bajando el tono de su voz, que parecía apagarse ante el dolor. —Yo solo quería que me vieras como todo lo que esperabas, que dejaras de sufrir por ella.
—Yo la amo —Sus palabras fueron clavadas en su corazon como cuchillos filosos.
—Pero ella no a ti —Trato de hacer notar su punto, pero el solo parecía alejarse ante cada palabra dicha por ella.
—Tu seras siempre mi amiga, nunca te vi de otra forma, lo siento, pero no eres ella, Lola jamas te miraría como algo mas que mi amiga, ella es perfecta tu... bueno —Murmuro, rascando su nuca, diciendo las palabras a las que tanto le había temido, soltó una ligera risa irónica y levanto su cabeza clavando su mirada
—Pues yo no pienso quedarme a sufrir mas, no puedo ser tu amiga
—Susurro dándose la vuelta, dirigiéndose a la salida.
—¡E-espera! —Quiso detenerla pero no fue así, solo la miro salir por la puerta, con la cabeza en alto pero con el corazon roto.

Un amor en septiembreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora