Capítulo 11: LAS ATALAYAS

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Llegué de hacer motocross sobre las ocho de la noche, era viernes y después de haberme pasado toda una tarde haciendo volteretas y corriendo sobre la tierra lo último que me apetecía era irme de fiesta con mis amigas. Me hice la cena y me puse a ver una peli, acto seguido me fui a dormir para estar completamente descansada para el sábado.

Me levanté al medio día como solía hacer. Comí la comida que mi madre me había dejado sobre la mesa. Parecía que estaba sola en casa. En la puerta de la nevera había una nota de mi madre: "Cariño, nos hemos ido a andar con tu hermana." Comí mientras veía las noticias. Cuando acabé, hice mis deberes.

Me quedé dormida en el sofá mientras veía una película antigua. El sonido de las llaves en la puerta me despertó. Mi familia entró por la puerta.

-Alexis, tienes visita.- ¿Qué yo tenía visita? ¿Desde cuándo la gente venía a visitarme? Me levanté del sofá y me coloqué los pantalones cortos de pijama que llevaba. Me asomé al pasillo y vi a mi mejor amiga.

-Hola, Michelle.- Me moví el pelo y me apoyé en la pared.

-Hola. Como no contestabas al móvil he decidido pasarme.-Me dedicó una de sus irónicas sonrisas. 

-Es que me he quedado dormida en el sofá después de hacer los deberes.- Vi como mi padre entraba cargado de bolsas y detrás de él estaba Juan, un muy buen amigo mío, con otras dos bolsas. Todo indicaba que mis padres también habían ido a comprar al supermercado.

-Hola, Alexis.- Juan me hizo un movimiento de cabeza a modo de saludo.

-Hola, Juan.- Le sonreí.-Bueno, Michelle, ¿qué pasa?- No me importaba que Michelle hubiese venido y mucho menos que hubiese arrastrado a Juan, seguro que lo sacó a regañadientes, con lo quisquilloso que es él para la hora de la siesta.

-Verás, hoy nos vamos a ir de fiesta y nos gustaría que vinieses, llevas toda la semana desaparecida, apenas hemos hablado, ni hemos pasado tiempo juntas.- Parecía apenada.- Si no estás estudiando, estás trabajando, porque un día te desfases no te vas a morir.- Me reí. Mi jefe solo me hacía trabajar entre semana, me decía que era muy joven para no tener mis días de fiesta los fines de semana.

-Está bien. ¿Dónde quedamos?- Michelle dio un saltito de alegría y aplaudió.

-Hemos pensado en irnos a las Atalayas.-

-¿A las Atalayas? ¿De discoteca?- Estaba flipando. Cuando yo lo proponía me llamaban loca.

-Sí. Nosotros también vamos.- Juan rodeo a Michelle y ella apartó su brazo.

-¿Quiénes sois "nosotros"?-

-Vamos a ir: Luis , Alejandro, Javier ... Los del instituto.- Asentí. Lo cierto es que todos me caían muy bien pero nunca habíamos salido con un grupo tan numeroso.

-De acuerdo. Entonces, ¿a las once y media en las Atalayas?- Michelle y Juan negaron con la cabeza.

- A las nueve en la Plaza de Santo Domingo. Cenaremos allí y luego nos vamos a las Atalayas.- Michelle me explicó el plan.

-¿Dónde trabajas tú?- Juan interrumpió a Michelle cuando me iba a decir algo.

-Trabajo en un bar que está en la Plaza de las Flores.-Juan sonrió.

-¿Podríamos cenar ahí?- Miró a Michelle y luego me miró a mí.

- No creo que haya ningún problema. Solo que necesito que me digáis cuantos somos en total para decirles que nos guarden las mesas. Los sábados se llena el triple que entre semana.- Juan sacó su móvil y tecleó varias veces la pantalla.

- Te he metido en el grupo de Whatsapp que tenemos. Ahora te digo cuantos somos.- Empezó a contar en voz alta, y se calló.

-¿Y bien?- Miré a Michelle.

-Somos unos veinte.-Madre mía, menudo grupo íbamos a llevar.

-Vale, llamo ahora. Tú encárgate de que vayan a la Plaza de las Flores.- Juan asintió.

-Alexis, ¿podrías recogerme en el cruce que hay con La Alcayna y Altorreal?- La Alcayna era una urbanización al igual que Altorreal. Michelle pasaría ahí la tarde.

- Claro sin problema. A las ocho y media en el cruce.- Se tardaba una media hora en bajar al centro de Murcia dado que nuestras urbanizaciones estaban en las afueras.

-Perfecto, gracias.- Me dio un beso en la mejilla y me despedí de Juan.

Cuando se fueron llamé al bar y reservé las mesas, después, me fui a la ducha. Eran las cuatro y media. Necesitaba mucho tiempo para arreglarme. 

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Buenas noches, mis amores!! Lo que se conoce en Murcia como "Las Atalayas" es una zona donde hay discotecas, un Estadio de baloncesto, y un centro comercial. Es la zona que todo el mundo adolescente escoge para irse de discotecas. Los más adultos prefieren los pubs del centro de la ciudad. Hasta el próximo capítulo:)

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