Narra Justin:
Me encuentro sentado a su lado en una silla metálica. Sus respiraciones son tranquilas y pacíficas, algo que me calma, pero solo de momento.
Me dijeron que ella ya está fuera de peligro, pero del bebé…eso no se sabe aún, por lo menos yo no lo sé, nos dirían a ambos luego cuando ella despertara.
Perdí la cuenta de las veces que lloré en el día, pero cuando me dijeron que lo más probable era que recuperara su conciencia ahora, mi corazón empezó a dar saltos en su interior.
Observo su rostro, todas sus facciones están relajadas, sin signo aparente de estrés, y así es como me gusta verla… no en una cama de hospital, pero sí relajada y sin preocupaciones.
Di un respingo de aire al mismo tiempo que tomé su mano y entrelacé sus dedos con los míos.
Se me hace inevitable imaginarla embarazada. Sonrío ante el pensamiento de una niña con los ojos hermosos de su madre. Siento un sollozo ahogado desde el fondo de mi garganta, pero me lo trago como si fuera agua y cierro mis ojos.
-¿Sr. Bieber? – El doctor Philip ingresa con un pequeño portapapeles de metal- No debe tardar en despertar. Pero recuerde que quizás esté débil por un tiempo, ella fue violada…-Dijo con un deje de tristeza y sentí pinchazos detrás de mis ojos, los cerré para evitar más lágrimas y bajé mi cabeza.
-De acuerdo…-Dije asintiendo y volviendo mi vista a ____. Algo llamó mi atención… sus ojos aleteaban como si estuvieran a punto de abrirse.
-¡Doctor!-Lo llamé y este enseguida fijó su atención en donde yo la dirigía.
-Mhm…-Se acercó a ella y la examinó.-Debe de estar por despertarse.-Sonrió tristemente. Rápidamente me concentré en sus ojos verdes abriéndose totalmente desorientada.
-¿Mhm?- Se quejó mirando todo a su alrededor. Su mirada se fijó en mí y sus ojos inmediatamente se humedecieron. Me incliné y besé dulcemente sus labios con la intención de proporcionarle tranquilidad.
-____, tengo noticias que darle.- El doctor intervino.-Necesito que se relaje antes de recibir esta noticia.-Ella asintió con total nerviosismo en sus facciones.-Bien, dado a los tratos violentos que usted ha recibido además de los golpes, su bebé… su bebé perdió todo signo vital, tuvimos que retirarlo, lo siento mucho…
NARRA ____:
¡NO! ¡POR QUÉ! Debí haber sido yo…. Mi pobre bebé. Las lágrimas generaban una inundación en mi rostro. Mi respiración se agitó de tal manera que sentía que me iba a desmayar.
-Mi bebé….-Susurré acariciando a mi ahora vacío vientre. Lloriqueé. Dirigí mi vista a Justin y él estaba igual que yo.
-Nena…-Murmuró entre sollozos.-Lo siento mucho…-Dijo con su voz totalmente quebrada. Me envolvió en sus brazos consoladoramente mientras trazaba círculos en mi espalda.-Estoy seguro que hubieras sido la madre perfecta…-Susurró con tristeza sobre mi cuello.
-Y tú hubieras sido el padre perfecto…-Mis sollozos incrementaron.-Debí haber muerto yo… pero mi bebé no…-Lloré aún más fuerte. Me abrazó aún más fuerte.
-Lo siento.-Volvió a decir.
-Disculpen…-El doctor intervino.- Solo quiero decirle, que si pasó esto es por una razón…
-¿Cómo dice?- Pregunté entre sollozos.
-Tú eres demasiado joven aún para tener un hijo.
-Lo hubiera querido de igual manera. Lo hubiera querido más que a mi vida, yo me imaginaba a mi pequeño bebé con la melena dorada y los ojos mieles de su padre…-Lloré con más intensidad.-Me imaginaba contándole cuentos para niños, llevándolo a su primer día de escuela, comprándole ropa y su cuna….arrullándolo por las noches…viéndolo respirar por primera vez.
-Ya, nena, no llores…-Sentí las lágrimas de Justin sobre mi piel.-Luego de que salgamos de todo esto te prometo que tendremos un hijo… y será igual de hermosa que su madre…-Me sonrió tristemente haciéndome llorar aún más.
-Mientras tanto señorita…-El doctor me mira con tristeza.-Lamento mucho lo de su hijo, realmente. Le deseo una buena recuperación, y un consejo para el futuro….-Dijo mirándome con una pequeña y débil sonrisa.-Ser padre no es fácil, pero ante toda adversidad, debe aprender a sobrellevarlo de alguna manera, con el tiempo aprenderás cosas, y eso es lo que importa…
Dijo dedicándome una triste sonrisa y saliendo por la puerta.
|PRÓLOGO|
-¡Justin!- Dije bajando la escalera.-¿Tú tiene mi….-Mi voz se desvaneció al ver un enorme arreglo de flores en la mesa del comedor y una pequeña cartita.
La desenvolví e inmediatamente la empecé a leer.
“Nena, enhorabuena felicitaciones por tu graduación. Ya te he dicho cuanto te amo, pero como para cerrar nuestro pacto, quiero hacerte una propuesta. Jugaremos un juego… pero es con pistas, al final del juego tú me encontrarás y te daré una sorpresa.
*PISTA 1: Ve a un sitio con una gran cantidad de agua. Te gusta asolearte allí los fines de semana.”
Arqueé mis cejas. ¿Qué mierda es todo esto? No pude evitar poner mis ojos en blanco.
Por otro lado, la intriga me comía por dentro, sí que me detuve a pensar…Mhm… ¡La piscina!
Corrí al jardín trasero y registré cada metro cuadrado del patio, hallé otra nota.
“Bien hecho, nena. Te quedan dos pistas más.
PISTA 2: En la noche, contemplamos las estrellas desde allí en más de una oportunidad. Es uno de tus los lugares preferidos de la casa.”
Sin dudarlo, corrí hasta el balcón de mi dormitorio para ver una notita pegada contra la ventana.
“Esta es tú última pista, presta mucha atención.
PISTA 3: Sonrisas, páginas descoloridas y muchas estanterías. Mi lugar favorito en la casa. Te he hecho mía allí en más de una oportunidad.”
Me sonrojé y empecé a pensar.
¿Baño? No lo creo
¿Cocina? Mhm… nop.
¡La biblioteca!
Arrojando la nota al piso, corrí bajando las escaleras a toda velocidad.
Abrí el portal de dos puertas de la biblioteca y caminé mirando todo a mí alrededor en busca de una señal. Localicé un papel en una de las mesitas y a paso rápido, caminé en esa dirección.
Lo desdoblé:
“CÁSATE CONMIGO”
Coloqué mi mano sobre mi boca aguantando un sollozo y me di la vuelta. Allí estaba él, vestido de traje y arrodillado ante mí sosteniendo una cajita de terciopelo azul en sus manos. Su rostro parecía tenso y nervioso, pero una sonrisa se extendía allí.
-¡Oh, Justin! ¡Sí! ¡Me casaré contigo!- Aullé de alegría e inmediatamente me arrodillé junto a él enredando mis brazos en su cuello y besándolo desenfrenadamente.- ¡Te amo!- El sonrió y sostuvo mi mano deslizando el impactante anillo en mi dedo anular. Mi respiración se cortó. – Es hermoso….
-No más que tú, baby…-Besó suavemente mis labios.- Haberte secuestrado fue lo mejor que pude haber hecho…-Mi corazón se abarcó de dulzura ante sus palabras.
-Y ser secuestrada por ti fue lo mejor que me pudo haber pasado, porque al mismo tiempo…has secuestrado mi corazón y alma…-Murmuré entre lágrimas.-Te amo…
-Pero no más que yo ti…-Susurró sobre mis labios.- ¿Qué dices si tenemos un hijo?- Me mira con esperanza en sus ojos brillantes. Volvió a susurrar y cerró nuestro pacto con un beso que me quitó totalmente el aliento, y bueno…. Ustedes se imaginarán lo que hicimos después…
Hola!! hasta aquí llegó esta novela, espero que les haya gustado, las amo. Comenten, voten y recomiendenla, me harían muy feliz. Voya a subir otra novela que se va a llamar "Out of Town Girl"
