Capítulo 45: Secuestrada, de nuevo

542 21 0
                                    

-¿Segura que te sientes bien?- Justin pregunta por milésima vez mientras nos adentramos al lugar. Asiento sin ganas con una sonrisa forzada y tomamos asiento en los taburetes de una barra de bar. El resto de los estudiantes ya se encuentran bailando y tomando bebidas alcohólicas.

-¿Quieres unos shots?- La voz de Justin invade mi mente. Niego con la cabeza. Aún no sé si conservaré el bebé, pero me conviene no tomar nada que sea riesgoso.-Mhm… ¿Qué tal un tequila?

-No, no tengo muchas ganas…-Acaricio mi vientre disimuladamente por sobre el vestido.

-Hay algo extraño aquí, y tú me dirás que es…- Interviene una vez más.
Dios… ¿Le digo o no? No sé…. Quizás…. No, bueno sí, si se llegara a enterar involuntariamente se enfadaría conmigo… Pero no ahora, mejor más tarde…

-¿Te gustaría tener hijos algún día, Biebs?- Pregunto con una doble intención. Él parece confundido por mi repentina pregunta, pero igualmente contesta.

-Sí, por supuesto que me gustaría, pero no aún, tú tienes 17 y yo 19, no lo veo muy conveniente a esta edad…-Mi garganta se cerró….Joder…. Sin embargo le contaré…

-Aja…-Contesto con total naturalidad.-Bueno, ahorita vuelvo, voy al baño…-Me pongo de pie y corro al baño con la gran necesidad de expulsar todo por mi esófago, y así lo hago una vez que ingreso a una de las cabinas y la tranco.
Me quedé de rodillas frente al retrete, y automáticamente lágrimas cayeron por mis ojos en forma de cascada. 
Tengo una vida dentro de mí, y pensar que cualquier error que llegue a cometer le quitará su vida…. No…no por favor…no quiero que nada le pase pero Justin no lo querrá de todas maneras….
Seco mi rostro con el dorso de mi mano.
¿Qué hago? ¿Qué haré si él me llegara a dejar? No, no puedo ni imaginarlo…lo amo demasiado como para perderlo….pero…… mi bebé, mi pequeño bebé ¿Qué hago?
Mi rostro se ilumina al imaginarme a un pequeño bebé igual a su padre, un Justin pequeño, con ojos grandes y mieles, y una sonrisa matadora corriendo por la casa…pero no sé qué hacer.
Lloro un poco más por la impotencia…. ¿Qué mierda hago ahora? Bueno, lo mejor será decirle de todas formas, no quiero que se enoje por no haberle contado antes, porque quiera o no, el embarazo se notará en algún momento…

Me miro a un espejo y respiro calmándome. Salgo del baño hacia la fiesta y no veo a Justin en el taburete. Enseguida me pongo nerviosa, pero eso se termina cuando veo su tan familiar silueta en el jardín. Sonrío y salgo a su encuentro, pero mi corazón se frena al verlo con Analía… besándose…
Trago grueso, pero el dolor es inevitable. Sin esperar más corro en su dirección y carraspeo mi garganta. Analía se separa de él con una sonrisa de satisfacción en su rostro.
Justin se da la vuelta y sus ojos se abren del tamaño de una casa.

-Yo…yo….no es lo que parece…-Aguanté mis lágrimas. “No es lo que parece”… me cree idiota, ¿Cómo se atreve?

-No puedo creerlo…-Me doy la vuelta y comienzo a caminar en la dirección contraria, pero él me toma de la cintura.-Suéltame, maldito imbécil…-Sollocé.- ¡No me toques!- Pero él hizo caso omiso a mis gritos y me giró dejándonos rostro a rostro.

-Ella me besó, ___, lo juro…-Murmuró. Sus ojos estaban un poco rojos y tristes.- Por favor, no me dejes…

-¡Te vi besándola!

-¿No confías en mí? Joder, yo siempre confío en ti, nunca dudo de nada de lo que me dices, y Analía me besa y ¿tú me culpas? 

-SÍ, y en parte es porque le seguiste el beso…-Lo miro con toda la furia.-Confié en ti…

-No, no lo hiciste en ningún momento…

-Ahora tu eres el que duda de mi…-Lo desafío con la mirada.

-¿Sabes algo? Cuando en una relación no hay confianza, no es una relación.-Su rostro demuestra tristeza y molestia al mismo tiempo.

-¿Qué mierda es lo que quieres decir con eso?- Me cruzo de brazos expectante y por una parte con todo el miedo del mundo. Escuché como tragó saliva y miró hacia abajo reuniendo fuerzas para decirlo.

-Terminamos, ____....-De a poco levanta su cabeza. Mis ojos se bañan en lágrimas, al igual que mis mejillas. Mi diafragma de contrae de alguna manera provocando un dolor aturdidor en lo más profundo de mi vientre. Llevo mis manos allí tratando de aligerarlo, pero es en vano. 
Las lágrimas caen con más sintonía y fuerza, y me encuentro a mí como si se tratara de un funeral.

-_____...-Él lleva su mano a mi mejilla, pero yo la apartó de un golpe y corro lo más rápido que puedo en dirección a la acera decidida a tomar un taxi.
Me freno en seco esperando a algún autobús o coche que me pueda llevar. Busco algo de dinero en mi bolso y me encuentro con que la carta que había hecho para Justin momentos antes en el baño no está. Joder… se me debió haber caído cuando corrí, ¿Y si él ya la leyó? Estoy muerta…
Una camioneta negra con vidrios polarizados se detiene en frente de mí. Frunzo el ceño….
Las puertas se abren y unos hombres todo vestidos del mismo color que la camioneta descienden de la misma. Retrocedo, pero enseguida me veo acorralada contra un árbol.
Uno de ellos me toma de las manos y otro coloca sobre mi cabeza una especie de bolsa para papas de tela.

-¡Suéltenme! ¿Qué carajo está pasando?-Me retuerzo contra ellos con mi cara cubierta.

-¡Cállate, perra!- Sentí un pinchazo contra mi costilla haciéndome caer en seco contra el húmedo césped y así perdiendo el conocimiento.

NARRA JUSTIN:

-¡Eres una perra! ¡No ocasionas más que problemas!- Le grité en la cara, ella solo rió con crueldad.

-Ay, Bieber…-Negó riendo.- ¿Cuál es el problema? Ahora podemos estar solos…-Deslizó una mano por dentro de mi camisa.

-Eres una inmunda perra, zorra, egocéntrica y sucia…nunca querría enredarme en algo contigo…nunca, te deseo nada más ni nada menos que lo peor, gracias a ti he perdido a la única chica que me importa, no te me acerques que no te quiero ver cerca de mí…-Y así me di la vuelta con toda la bronca del mundo. Caminé unos metros y algo llamó mi atención.
Sobre el césped, un pequeño sobre color blanco estaba escrito:
Para: Justin
De: Tu chica 
Tragué saliva…. Esto debió habérsele caído cuando corrió… seguramente iba a dármelo hasta que terminé con ella….Cerré los ojos suprimiendo el deseo de llorar. 
Me odio demasiado y ansío poder encontrarla en casa cuando llegue para poder explicarle todo lo que pasó.
Guardo la carta dentro de mi chaqueta y subo a mi auto con toda la prisa del mundo.

-



-



-



-



-¡____! ¿Estás aquí?- Revisé la cocina, los baños, dormitorios, jardines y nada. Ni rastro de ella. Lo que es raro es que su ropa sigue estando en los cajones.
Jalo de mi cabello mientras recorro cada corredor de la mansión… ¿Dónde está?
Ella había corrido lejos de mí… me odio tanto, solamente me dejé llevar por mi miedo a que ella me dejara…
¿Y si le pasó algo? Simplemente me muero...con solo pensarlo mi corazón se detiene… la amo demasiado…

Por primera vez en mucho tiempo, estoy llorando… Me siento vulnerable, miedoso de perderla, inservible, fracaso de vida…
No sé qué hacer…
Cojo mi móvil y marco su número 1, 2, 3, 4, 5 y hasta 6 veces. Solamente su contestadora responde. Trago saliva duramente. No me lo perdonaría jamás si le llegara a pasar algo solo por esa estúpida pelea que tuvimos hace unas horas.
Decido dejarle un mensaje de texto:
“Nena, lo siento, no sabes cuánto me odio. Quiero hablar contigo y explicarte todo lo que pasó. Quiero abrazarte, sentir tu calor bajo mis brazos y aspirar tu perfume. Llámame o contéstame en cuanto leas este mensaje,
Te amo y nunca dejé de hacerlo,
Justin.”
Presiono enviar y suspiro.
Me encuentro impaciente junto a la ventana buscando cualquier rastro de que ella esté aquí, pero no sirve de nada. Respiro tratando de calmarme, pero las lágrimas salen inevitablemente de mis ojos.
Pego su carta a mi rostro tratando de recuperar un poco de su aroma a vainilla, y una vez lo logro, beso la carta. La observo, pero aún no la voy a leer, luego lo haré, por ahora esperaré a que ella llegue a casa.

Being Kidnapped (Justin Bieber & tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora