❝Holding onto yourself the best you can.❞

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No hubo una despedida ese día, ni nada que se le asemejara.

Dolida, decidió retirarse a su casa temprano, sin esperar a nadie. Asumió que Camila se iría con Dinah, y que estaría de acuerdo en no ir con ella. De repente, todo se sentía incómodo entre las dos. Sus sentimientos ciertamente eran un enredo, y no quería volverlos aún mas confusos. Saber que ella no estaba comenzando a seguir lo mismo, era suficiente para que Lauren decidiera establecer una distancia, que debió haber permanecido desde un principio. Jamás debió acercarse a una persona tan llena de problemas. Ella era muy inocente, y esa aura de Camila la absorbió en cuestión de un beso.

Amaba los cuentos de hadas, y por un momento, creyó que puede que ella fuera la indicada para rescatarla de sus demonios. Pero esa princesa no quería ser salvada.

Al llegar a casa, no pudo ver a su madre a los ojos. Se sentó a cenar, con la mirada baja y sin acotar nada a la charla llevada a cabo por sus familiares acerca de las notas sobresalientes de Taylor en su última tanda de exámenes. Le preguntaron por cómo estaba, y por qué no hablaba esa noche, pero no dio muchas respuestas. Se notaba a kilómetros de distancia cuán triste y decepcionada estaba. Se sentía muy estúpida.

La culpa volvió a atacarla por la noche, por no hablar con Camila, y no saber qué era de ella. Sin embargo, creía que la había dejado en buenas manos. Estaba con Dinah, quién sabía cuidarla mil veces mejor de lo que Lauren jamás lo haría, y quién sabía cómo tratar con ella sin generar confusiones internas. Estos pensamientos la atormentaban, y le impedían pasar una noche tranquila. Aún recordaba lo traumático que había sido atestiguar lo de su padre, y no podía sacarse de la mente a esa Camila que se asemejaba a un ciervo asustado. Sus mejillas sonrosadas, sus ojos llorosos, su cuerpo débil... Le dolía imaginársela así de nuevo, y que fuera a buscar consuelo en alguien que no supiera entenderla cómo ella lo hacía. En Shawn, quizás, que no la valoraba de la forma correcta. O en Austin, que le tenía de segunda opción.

Estuvo atenta a la llegada de nuevos mensajes, hasta que uno hizo vibrar su teléfono. Se apresuró a verlo, pero no era de quién quería que fuese.

☀ ☀☀

dinahdime;; como está camila?

laurenmj;; Bien, supongo. ¿Por?

dinahdime;; puedes comprobar que esté bien, por favor?

laurenmj;; Fíjate tú. ¿No se fue a casa contigo?

dinahdime;; creí que seguiría yéndose contigo. no lo hizo?

laurenmj;; No, yo pensé que iba contigo.

dinahdime;; y donde está, entonces????

laurenmj;; No lo sé. ¿Por qué no le preguntas?

☀ ☀ ☀

Comenzó a preocuparse. Supuso que la falta de respuesta por parte de Dinah, se debía a que estaba hablando con Camila. Estaba enojada con la susodicha, pero una parte en ella quería seguir ayudándola. ¿Y si había vuelto a casa?. Su padre la estaba esperando, y no quería imaginar qué sucedería si se lo encontraba en un mal momento.

Ignorando el enfado que sentía, y el dolor de que la hubiese rechazado de esa forma, la llamó. Una vez. Dos veces. Tres veces. Cuatro... Pero nadie respondía. Le dejó varios mensajes, pero tampoco los leía. Quiso pensar en que tenía el teléfono apagado, la opción más normal, pero era Camila de quién estaba hablando. Todo podía pasar tratándose de ella. Y con el paso de los minutos, sin recibir respuesta, su mente siguió creando posibles escenarios que pudieran estarse llevando a cabo en casa de ella. Necesitaba saber que pasaba allí.

She keeps me Warm ;; CAMRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora