— Camila... Por favor, ven a casa. Quiero hablar contigo.
Camila repetía una y otra vez la voz de su madre, proveniente de la nota de voz que le había llegado esa mañana. Sufría repitiéndola, sin saber si responderle o no. Tenía miedo, pero era su madre. Ciegamente, quería confiar en la mujer que le había dado la vida, pese al daño que le había hecho a lo largo de ésta. Quizás el bebé pudiera servir para ablandar a Sinuhe, y conseguir ponerla de su lado.
— Deja de escuchar eso y ve, Camz. — Lauren se estaba vistiendo para ir a clase, ya que ella no podía seguir faltando. Y, de paso, encararía a Normani. — Ella te necesita.
— No sé... Es mi mamá. A veces puede ser igual que mi papá. — Juntó las piernas, mientras dejaba que su cabello cayera a ambos costados de su rostro, despeinado y descuidado. — Pero puede que quiera hablar sobre esto, y me pueda ayudar.
— ¿Quieres que te acompañe por un rato? — Ofreció. — Tengo que ir a clase luego, pero puedo quedarme unos minutos ahí, para asegurarme de que todo salga bien.
— ¿No podemos ir después de clase?
— Si no salgo muy tarde, claro.
— ¿Mi uniforme sigue aquí? — Se fijó en la puerta del armario de Lauren, en busca de las prendas que conformaban su ropa para asistir a la escuela.
— Sí, está ahí. ¿Quieres venir?
— Quiero ir sólo para decirle algunas cosas a tu amiga, la negra.
— Normani.
— Sí, lo que sea. Es una zorra.
— Camila... Sé que estás enojada, pero creo que deberíamos ponernos también en su lugar. La dejé de lado, y ahora está furiosa. — Comentó, decepcionada de si misma. — Tengo que ser su amiga, no su enemiga. Si se lo pido bien, tal vez borre esos tweets y se quede callada. Y tú podrías hablar con Lydia.
No quería saber nada de Lydia. Su mejor amiga se había puesto en su contra de repente. Dinah parecía ser la única persona en la que podía confiar, y sólo se metía en las conversaciones para coquetear con Normani, en lugar de echarle una mano. Le dolía.
— Lo pensaré. Pero no quiero hablar con ella. — Se puso de pie, para buscar su uniforme, y cambiarse. Se arreglaron juntas, y quedaron en ir a casa de Camila después de clases, para ver a Sinuhe. Al estar listas, salieron en dirección al instituto, junto con Dinah, quién las alcanzó por el camino. Estaba preocupada, y lo primero que hizo fue comprobar que su amiga estuviera bien. Lauren había hecho un buen trabajo en vigilarla, cómo siempre.
Al llegar, Lauren se acercó a saludar a Ally, extrañada de que estuviera sola.
— ¿Que haces aquí, Allycat? ¿No deberías estar con Normani? — Frunció el ceño con suavidad, luego de intercambiar besos en la mejilla, a modo de saludo.
— Oh, no... Ella ahora se junta con Lydia, pero a mi me da algo de miedo, así que prefiero quedarme aquí.
— ¿Ayer estuviste a solas todo el día?
— Algo así. Pero no la paso tan mal, no te preocupes. — Su sonrisa angelical iluminó el rostro de Lauren, quién no podía hacer más que sentir pena por ella. — Sólo me aburro un poco, pero es todo.
— ¿No quieres venir conmigo y Camila? Podemos hacerte compañía.
— ¿Camila querrá?
— Claro, a ella le caes muy bien. ¿Por qué no vas a saludarla? — Tomó su mano, invitándola a acercarse a Dinah y Camila con ella. Éstas dos la observaron con la misma extrañeza que Lauren al principio, preguntándose dónde estaba la morena.
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She keeps me Warm ;; CAMREN
Fanfiction"Lauren estaba dándole vida, y Camila estaba dándole, a cambio, la emoción de la que carecía su existencia. Eran cómo el ying y el yang. El sol y la luna." triggerwarning;; TEMAS FUERTES.