She keeps me Warm ;; CAMREN

❝Ain't youth meant to be beautiful?❞

(PERDOOOON POR TARDAR TANTO. tenía que estudiar ;_; pero ahorita si, ya mañana termino con algo y estaré mucho mas libre, y trataré de volver al ritmo de actualización cada 2-3 días. y muchísimas gracias a todas las nuevas personitas que están entrando a leer mi historia, y también a las que ya estaban de antes, que siguen aquí pese a las tardanzas <3 para quienes siguen saving me, también la actualizaré en estos días, i swear. LOS ADORO

disfruten de la expansión del bando de los malos de la historia. #NormaniWelcomeParty)

Unas pocas semanas habían pasado desde la visita de Ally, y el padre de ésta había llamado para preguntar por la joven embarazada. Por más buena que fuera, la rubia era incapaz de mantener la boca cerrada, y le había contado a Jerry que Camila estaba quedándose en casa de Lauren, para evitar volver a la que le correspondía. Gracias a Dios, no fue su madre quién atendió el teléfono, o habrían tenido un gran problema.

Habían acabado programando una visita al hospital, que se llevaría a cabo tres días luego de ese. Durante éstos, Lauren pudo notar especialmente tensa a su amiga, lo suficiente cómo para no poder sentarse a hablar aún sobre lo sucedido en la estación de tren. Sus sentimientos eran muy confusos, y necesitaba que ella aclarara el desastre que sus palabras habían dejado. Pero parecía nunca ser el momento para hacerlo, y se forzaba a seguir esperando.  

— ¿Por qué no te has cambiado todavía? — Al regresar a su habitación, tras haber ido a buscar algo de agua, notó que Camila seguía sentada sobre la cama, intranquila. — ¿Camz? — Insistió. — Tienes que estar allí a las cinco. No pierdas el tiempo.

  — ¿Tengo que ir sí o sí? — Alzó la mirada, penosa. No tenía ni unas mínimas ganas de asistir a la cita programada con uno de los doctores. Éste seguramente sería conocido del señor Hernández, y por ende, estaría al tanto de su particular caso. — ¿No podemos ir a otro hospital, por lo menos?

— ¿Que tiene de malo este? — Se sentó a su lado, buscando comprenderla. — No sé si otro hospital vaya a aceptar mi soborno también, Camila. 

— No quiero ver al padre de Ally. 

— ¿Por qué? Él sonaba muy preocupado por ti.  

— Lauren... No puedo hacer más que pensar que esto se está expandiendo. Para que el que me atienda guarde el secreto también, Jerry tuvo que habérselo contado. Y cuando vaya ahí algún día, también tendrán que contárselo a la partera, y a la enfermera, y a todo el mundo. Se supone que esto sólo iba a saberlo Dinah.

Era triste, pero tenía un punto. Quizás tuvieran que agrandar un poco el rango de personas a las cuales llegaba ese secreto, para que tuvieran conocimiento del mismo a la hora de proceder con Camila. 

— Yo creo que estás exagerando un poco. Puede que el de las ecografías si lo sepa, por que es un colega cercano del papá de Ally, pero mientras que no te vean desnuda, no creo que las mujeres que te ayuden a dar a luz tengan que saber. 

— Si tengo que pasar por el parto normal, claro que sí. Se darán cuenta de muchas cosas. — No había duda en sus palabras. Era algo de lo que estaba más que segura, por alguna razón. 

— Podemos intentar conseguirte una cesárea.     

— Me quedarán marcas. 

Aquello daba para rato, ya que tenía un largo camino por recorrer si tenía la intención de reconfortarla con respecto a sus miedos relacionados con el hospital, y con el poco cuidado que Jerry pudiera tener con su secreto. Con lo jodida que estaba su piel para entonces, no debería de molestarle mucho una cicatriz más, pero la cubana parecía convencida en no seguir sumando.