Duele Amarte

Duele Amarte capitulo 23

 Llegamos al Lobby la gente nos miraba solo un momento después solo volteaban a otro lado, camino hasta llegar a unos sofás, me coloco con suavidad para evitar caerme, le hizo señas a uno de los encargados y le pidió algo porque después de eso se retiro.

-¿Te sientes bien? No sientes mas mareos o alguna incomodidad- Niego con la cabeza- Eso es bueno, por lo menos no es nada grave, tal vez el viaje te haya mareado un poco.

- No creo que haya sido para tanto un pequeño viaje.

-No puedes decir eso, muchas personas son delicadas a viajar, además de como tú no estás acostumbrada te mareas fácilmente.

-Como es que sabe eso.

-Su madre me lo dijo, antes de irnos, que por lo general suele marearse solo en andar en camión.

-Mi madre no tenía que decirle nada de eso- Dije en tono descortés y tajante, iba a decir algo mas pero llego el encargado nuevamente con un vaso con agua y algunas pastillas.

-Tómalas te harán bien puede que solo necesites descansar.

Tomo las pastillas con cuidado pero no dejo de verlo ni un instante, pero mi atención se desvía a otra parte cuando escucho que alguien me grita.

-Sandra! Sandra!- Era marcela la que gritaba y extendía los brazos para poder abrazarme pero se paró en seco antes de llegar, volteo a ver al Doctor

- Puedes abrazarla pero no con mucha fuerza, recuerda que no se encuentra bien.

-Claro que me encuentro bien, no es necesario tanto cuidado.

-Al contrario es necesario porque puede que te baje la presión.

Le lanzo una mirada despreocupada quiero que vea que no es necesario tanto para solo un abrazo, Marcela se acerca y con cuidado me abraza como si estuviera abrazando como si de una muñeca se tratase, le regreso el abrazo para poder animarla pero creo que cree más en las palabras de él que las mías.

-¿Doctor como esta?- Esa es la voz del maestro Javier lo miro de reojo mientras abrazo a Marcela.

-No se preocupe, solo es un mareo por el viaje, ayer llegamos un poco tarde y tal vez es que no descanso mucho, eso debió ser pero a un así debemos tener cuidado y evitar que se agite mucho.

Marcela se separa de mi con rapidez, mira al doctor y al maestro Javier al mismo tiempo siento que se avecina algo grande no me da mucha confianza- Eso quiere decir que no podrá ir a la fiesta de esta noche.

Es cierto esta noche hay una fiesta en la playa, no lo recordaba pero si este hombre dice que no puedo no podre ir-Con las ganas que tenia- he esperado mucho por este viaje, tengo muchas cosas que hacer, no voy a dejar que alguien me lo impide, deseo hacer muchos recuerdos bonitos y experimentar cosas.

-Marcela, tal vez lo mejor es que descanse un poco, si por un viaje tan corto se marea puede que estar en esa fiesta le afecte a un más.

-Pero y si solo me quedo en un lugar sin moverme puedo asistir.-Digo con la cabeza cabizbaja y con un tono algo suplicante.

-No estoy muy seguro Sandra, ara calor, habrá mucha gente y que pasa si no estamos cerca de ti.

Sé que tiene razón y que no estoy en condiciones de asistir pero nunca volveré a un lugar como este, asi que me trago mi orgullo y volteo a ver al Doctor y espero que comprenda lo que trato de proponerle-Podría usted cuidarme- que no se separe de mi, que de esa manera se pueda llegar a un acuerdo.