005

48.1K 4.3K 1.7K
                                    

Después de aquellos mensajes, Taehyung se levantó con un enorme bulto encima.
Había soñado con Jungkook, otra vez. Pero nada le impediría ir de nuevo a la escuela, tenía un motivo y ese era su pequeño conejito.

—Mierda. —se levantó rápidamente.—, son las siete y media, no llegaré.

Se dispuso a cambiar de ropa y arreglarse en unos cuantos minutos mientras agarraba un tostada con mermelada de fresa.

—A ver.. —dijo un Taehyung agitado.—Mierdas para la escuela, listo. La nota para mi bebé.. Listo. Llaves.. Listo. Antifaz.. ¿Dónde carajos estás? Ah... Listo.

Llegó a tiempo y calculó la hora en la que llegaría su pequeño, puso la nota en su casillero y corrió lo más lejos posible para que nadie se diese cuenta. Mientras que, por otro lado, Jungkook avanzaba tranquilamente diciéndole a una chica que no estaba realmente interesado en ella.

—Entiende, cariño. No quiero nada contigo, ni siquiera te conozco y tengo mejores cosas que hacer que estar aquí contigo.

—Oppa... Yo lo quiero, lo he querido inexplicablemente desde siempre—dijo la chica en un susurro—. Nos conocemos desde que llegó aquí.

Jungkook soltó una enorme carcajada e hizo a la chica a un lado. El corazón de ella estaba roto en miles de pedacitos, así que solo pudo asentir e irse con el grupo de amigas que estaban esperándola prontamente para consolarla.

—¿Ahora qué mierda? 

Jungkook temía por la sorpresa que podía darle el acosador idiota, ese chico era capaz de hacer de todo para satisfacerse. 

—Genial, daddy estúpido me ha enviado otra nota. —¿él acababa de decirle "daddy"?

«Hola, pequeño.
Daddy te espera en el baño. Así que sí, por fin me conocerás.
No me desobedezcas, sabes que me enojaré y cuando seas completamente mío —aunque ya lo seas— te romperé hasta que todo el mundo escuche tus gritos y sepan a quién le perteneces. 

Te quiere mil,

Daddy.»

Jungkook maldijo a Taehyung mientras arrugaba el papel y lo guardaba en su bolsillo. No sabía qué hacer y los minutos pasaban tan rápido que lo ponían incluso más nervioso de lo que ya estaba. Ignoró el tiempo que fuese que le tomase al ir con su acosador y aunque no quisiese, se dirigió al baño. Realmente no quería verlo, no ahora, le tenía mucho miedo.

"Estás tan idiota por él que ni siquiera has llevado algo para defenderte por si quiere hacerte daño", recalcó el su mente.

Olvidó eso al entrar al baño y encontrar a un chico con un antifaz y unas esposas.

—¿Daddy? —preguntó el azabache.

Sus piernas temblaban y sentía su garganta seca. Era imposible que un desconocido produjese tales cosas en él.

—Llegaste, conejito. —sonreía satisfactoriamente.

—S-Sí. —Jungkook miraba a aquel chico de pies a cabeza.

Era malditamente sexy y a la vez hermoso.

Recorría cada facción de Taehyung y se daba cuenta de que eran muy finas. Jungkook no había visto tal rostro alguna vez en su vida, ¿o sí?

—Ven aquí bebé, daddy te quiere tocar.

Jungkook asintió nervioso y se acercó al rubio, y al abrazarlo se dio cuenta de su aroma, olía delicioso.

Taehyung por otro lado, aprovechó el hipnotismo del azabache y lo esposó.

—¡Idiota! ¡¿Qué crees que estás haciéndome?!

—Solo castigar a mi pequeño por la erección de anoche. Eres un niño muy malo.

—Daddy y-yo.. ¡Ah!-Taehyung volteó rápidamente a su conejito y apretaba su miembro contra su culo.

—Pequeño, sabrás qué es obedecer a tu daddy. Justo ahora.

Empezó a apretar su miembro mientras lamía el cuello del menor, Jungkook estaba muy excitado y solo gemía. La voz grave del rubio era excitante en esos momentos.

—Ah.. S-Sí. —la razón no se encontraba en Jungkook ahora.

Al estar este volteado lo echó un poco y empezó a nalguearlo mientras el azabache gemía muy fuerte.

—No te desobed.. ¡Mmg!

Sacó el enorme miembro y empezó a darle un leve masaje, hasta que lo metió a su boca.

—¡Daddy! ¡Más, quiero m-más!—repetía el menor.

—¿Quién es tu daddy? —Tae sabía que lo era, pero quería oírlo de su pequeño.

—T-Tú lo er... ¡Ah! —sí, había encontrado su punto fijo. —No te detengas, por favor...

Taehyung asintió y lo chupaba lo más rápido que podía, hasta que su lindo llegó al orgasmo.

—Y-Yo quiero saber quién eres. —no podía hablar bien aún, pero sabía que reconocería esa cara de algún lado.

—Por el momento no, Kookie. Adiós, pequeño.

—Pero yo.. Ah, mierda, ¿qué acabo de hacer?

Al sonar el timbre, ambos se arreglaron lo más rápido que pudieron y cada uno se fue por su lado.

—Hola Tae, ¿cómo te fue con.. ¿Y ese antifaz? —un Jimin curioso estaba explotando a mil, sabía qué significaba. —¿Kookie ya cayó tus pies?-preguntó riendo. —¿Cómo va el plan?

—Jiminie, llegaremos tarde a clases. —rió limpiando el poco de semen que tenía.

❝DADDY❞ ━VKOOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora