CAPITULO X: demonios en el interior, los males ocultos de Hanzo

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Isla del oriente, Rumbo al noreste, de noche con nubes grises en el cielo.

desde este punto relata M'irita.

El tiempo transcurría lento mientras que nos acercábamos al destino que tanto anhela mi gran amigo, los días que hemos pasado juntos han sido para mi los mas agradable que he tenido en mi vida. Por el momento no nos hemos topado con ningún problema durante el camino. Como en cada noche, nos reunimos junto a la fogata para sofocar el frió de las noches. Los elfos como era habitual, estaban acurrucados el uno con el otro al frente de su tienda. Agathe dormía dentro de la carpa encima de unas pieles de animales. Mientras Hanzo... el... desde hace unos días atrás, en cada noche, tiene el habito de sentarse arriba del carruaje para observar los alrededores, pero yo se que es solo una excusa para estar a solas. Últimamente a estado mas distanciado de nosotros, también lo he visto molesto a veces, pero cuando uno le pregunta por el porque de su carácter, el solo responde con unas leves bromas mientras muestra una falsa sonrisa, y se retira. Hanzo, nose que es lo te esta sucediendo, pero es mi deber como tu amiga llegar al fondo de esto y ayudarte como pueda.

Media noche...

-¡hey! ¡Hanzo! -gritaba Alice mientras sacaba la tetera que estaba colgada arriba de la hoguera-. Baja aquí y prueba este delicioso té que preparo Agathe.

-gracias, pero no tengo ganas de tomar nada ahora... -respondió mientras se sentaba de lado en el borde del tejado.

-este idiota... -volvió a sentarse al lado de su esposo y se taparon juntos con una manta-. De una noche para otra se volvió en una persona solitaria -le dio una taza de te caliente a su marido.

-por la forma de su rostro y como se toma la frente con sus manos -tomo un sorbo de su taza-. sospecho que debe tener un pensamiento o ideas en su cabeza que lo este abrumando, pero desconozco su origen.

-me encanta cuando te crees un investigador.. -le da un leve beso en los labios a su pareja-. Ojala supiera que lo aflige, no soporto su cara de coyote agonizando en cada noche.

-creo que pronto lo sabremos, mira -apuntaba con el dedo hacia alguien que estaba subiendo por una parte del carruaje.

-¿es M'irita? al fin dio un paso adelante y fue a hablar con el.

-shhh, no vez que la función va a comenzar.

-cierto, cierto. -se acomodaron para quedar de frente hacia nosotros.

mientras tanto arriba del carruaje...

-Hanzo... -me acerque por detrás de el-. ¿podemos hablar un momento?

-mmm... mmm... ¡Mm! oh-hoh! -se volteo lentamente-. Discúlpame, últimamente he estado... muy distraído, ¿que necesitas?

-¿podemos hablar un momento?

-claro por que no... siéntate al lado mio.

-gracias -me senté a su lado arrodillada.

-¿de que quieres hablarme?

-bueno veras... se trata de tu nueva actitud -vi un cambio de expresión en su rostro-. Me esta inquietando,digo nos esta inquietando un poco a mi y los elfos...

-¿de cual actitud hablas? no se de que me hablas jajajaja... -sonreía con esa falsa sonrisa que no convencía a nadie.

-yo hablo de tu actitud seria y lastimada que pones cuando estas a solas...

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