Escondidos.

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La culpa se le subió a la cabeza, necesitaba gritar, salir, matar algo, matarlo a él, la había dañado y le prometió que la cuidaría, salió de la habitación y se topó de frente con Negan, sujetaba el bate con la mano sobre su hombro y le sonreía, levantó las cejas antes de alzar la voz.

—Vas a alguna parte —dijo mientras intentaba cortarle el paso.

Daryl pensó acelerado, en las posibilidades de que los hubiera descubierto y ahora estaba apunto de quitarle la vida, sin siquiera haber desquitado un poco de su ira o de haberse despedido de Carol.

Gruño antes de contestar —solo, solo quería pasear un rato.
—Hoy no podrá ser, mi mano derecha, tenemos algo que hacer. —Froto su nariz antes de proseguir —te perdiste de una buena carnicería ayer —le sonrió de nuevo con confianza, las dudas de Daryl desaparecieron —esa gente necesitará un par de visitas para entrar en cintura, pero lo harán y tú me vas a ayudar a eso, es una tarea que solo un hombre realmente duro podría llevar a cargo —le indicó con la cabeza la salida, Daryl lo siguió sin no antes mirar a la puerta de Carol. —Toda esta gente necesita un nuevo aire, que dices te animas —le sonrió aún más abiertamente.

—Qué es lo que hay que hacer —torció la boca sin convencerse del todo de lo que estaba diciendo, todo lo que aquel ser decía no era más que un recordatorio de lo mucho que lo odiaba. —Qué quieres que haga.

Negan bufó y luego soltó una carcajada —pareciera que estás de mala forma conmigo —pasó el brazo por sus hombros —acaso es cierto, algo te está molestando —lo miro de cerca, Daryl podía sentir los cuchillos de su mirada cortándolo en piezas.

—No —fingió demencia y miro al lado contrario.

—De acuerdo entonces podemos seguir adelante. —Sostenía un cigarrillo entre los dedos. —Ayer un grupo de gente quizo enfrentarme, pero tuve que hacer mi trabajo, sabes a qué me refiero no es así —Daryl asintió con la cabeza —mataron a mis hombres y eso no lo puedo soportar, dime si mi gente se acaba quién va a poner un orden, tengo que volver por ellos y quiero que seas tú quien me los entregue.

—Quiénes son —algo en su interior le comenzó a intrigar, por primera vez en mucho tiempo pensó en alguien más, pensó en su amigo, en las personas de Alexandria, en Rick, en Carl, en Judith, se sintió morir al pensar que de quién hablaba podía ser de ellos.

—No los conozco bien, pero sé que el líder es un perdedor, casi se orina en los pantalones cuando me vio llegar, les pedí que tuvieran listas todas las armas y municiones para esta noche, sabes que debes hacer, lo has hecho ya con Ezequiel, créeme será mucho más sencillo, no tienen mascotas exuberantes —puso los ojos en blanco —Daryl, es el trabajo perfecto para ti, está a solo 6 millas de aquí, toma tu tiempo, prepárate por qué esta vez voy a ir contigo, que dices, trabajo en equipo.

—De acuerdo —respondió sin muchas ganas.

—Ve a la cocina, alguien te está esperando ahí.

Lo dejó solo, pensando, la luz del sol ya brillaba colándose por las ventanas, quien más que Carol podría esperarlo en la cocina, comenzó a caminar a prisa, hasta llegar al lugar, una mujer lo esperaba pero no era precisamente quien él tenía en mente.

Saludo con un gesto de su rostro, no terminaba de caerle bien del todo. —Negan me mando acá, alguien quiere verme.

—Daryl deja de pensar en alguien más, soy solo yo.

—Qué sucede —la miro sin rodeos, el rostro de Sherry se veía aún más desencajado, como si hubiera pasado la noche en vela o quizá llorando.

—Esto es de ella —dijo en voz casi inaudible y le extendió un pequeño trozo de papel —no quiero verme involucrada en sus asuntos Daryl, pero ella está destrozada, la pasó mal, Negan la violo —dejó el comentario al aire, claro que Daryl lo sabia y le molestaba tanto no haber hecho nada por ella haber sido un completo cobarde, pero no dejaría las cosas así.

—Ella quiere que se marchen pero sabemos que eso es imposible, te lo dije Negan jamás lo permitiría, Daryl por qué te enamoraste de su mujer.

Él no decía palabra alguna, la mente se le había vaciado al leer «te espero ahí mismo 1:30» justo la hora en la que Negan se encontraba tomando su rutinaria siesta.  

—Eso no es tu asunto —la tomo con fuerza del brazo y se acercó a ella —esto quien te lo dio.
—Te lo he dicho, la fui a ver —se soltó de un tirón —y más te vale que seas más amable conmigo, o dejare de ser su mensajera.

—No eres la mensajera. —La miro incrédulo —no confío en ti.

—No lo hagas, después de todo sus problemas no son los míos, yo e sido considerada porque la aprecio, no creo que alguien como tú sea lo mejor para ella, quizá eres igual a él, igual a todos aquí, unos bastardos abusadores.

Daryl no dijo nada, dio media vuelta y salió, después de todo Sherry tenía algo de razón en lo que decía, todos ahí eran un pedazo de mierda, él incluido, que había matado en nombre del hombre al que había jurado matar, para ese entonces se consideraba tan bastardo como consideraba a los demás, quizá peor puesto que él estaba consciente del porque lo hacía. Merle no valía tanto la pena, pero Carol, con ella era diferente.

Sabía lo que tenía que hacer, acicalo su arma, se sentía agotado pero solo pensar en el cuerpo de Carol la energía le regresaba de inmediato. Espero la hora y se dispuso a esperar a Carol, pero no fue necesario ella ya se encontraba ahí.

En cuanto cerró la puerta, corrió a sus labios, pero Carol se negó a corresponderle.

—No ahora Daryl —colocó su mano en los labios de él —sabes lo que sucedió cierto.

Daryl no era capaz de mirarla a los ojos, debió haber hecho algo por ella.

—Discúlpame —le dijo derramando una lagrima —no pude evitarlo.

—Qué? Pero como pides disculpas, soy yo quien debería hacerlo, tú me necesitabas y no pude hacer nada, debí...

—No, fue mejor así, tú lo sabes bien, me dijiste ayer que no podíamos hacer nada, que lo mejor sería seguir aquí, y Daryl no tengo de otra.

No sabía qué decirle, por qué tenía razón, él había dicho aquello.

—No creo que debamos volver a vernos —Carol sintió que no podía respirar al decírselo  —de alguna manera Negan se enterara y todo terminara mal, no quiero que algo malo te suceda.

—Sucederá, no sé cuándo pero pasara, si no quieres volver a verme estoy de acuerdo, pero no pienses que yo quiero lo mismo por qué no es así, lo único que deseo es poder estar contigo aunque signifique la muerte para mí, sin embargo no voy a poner en riesgo tu vida, es solo que me siento tan mal de no poder defenderte como quisiera.

—Es por eso que no debemos vernos más, Daryl lo que sentimos no lo podemos ocultar por mucho tiempo, Sherry lo sabe, ni siquiera tuve que decírselo cuando ella misma me menciono si algo pasaba entre nosotros, no podemos arriesgarnos a que alguien más nos descubra. Si seguimos estando juntos, cada vez nos será más difícil separarnos.

Se arriesgó a tomarla de la mano, entrelazaron los dedos, estaban hablando de todo y de nada a la vez solo con las miradas.

—Saldré esta noche no sé bien a dónde, pero Negan me lo pidió, tratare de encontrar la forma de que salgamos de aquí, no será sencillo, pero no quiero estar separado de ti.

Carol se acercó a él, no podía evitar las ganas inmensas de besarlo, tomó su rostro y le beso la frente para dejarlo solo inmediatamente.

La mujer de Negan .Donde viven las historias. Descúbrelo ahora