Decisiones llegan y se van. Algunas son volátiles, pero cuando se trata del Amor, las desiciones suelen ser la más crueles y hostiles.
Cuando Julia decide ser independiente, ella recibe los mejores consejos de sus seres que le aman. Buscar trabajo...
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Nada parecía más odioso que darme cuenta que mi hermano ya estaba interesado en ella. No estaba demasiado seguro entre interponerme o no; al final de cuentas no era yo quien tomaba la decisión, era Julia quien debía hacerlo.
—Deje arreglado el cuarto por favor —le pedí a la señora Luna, tenía la esperanza de que Julia regresara esta noche. Ya había hecho mi parte, el pedir disculpas.
Para la tarde-noche. Nos tocó reunir a los cinco últimos que quedaban para la última prueba, debíamos escoger tres únicamente. Sabíamos Carlo y yo, que si Julia o alguno de sus dos amigos quedaba, iban a cooperar y trabajar mejor. Los otros dos sabían que estaban en desventaja pero de formas continuaron y eso hablaba bien de ellos.
—Buenas tardes, pasen —ofrecí de modo cortante. Mamá tuvo un asunto de urgencia, por lo tanto nosotros debíamos continuar con éste asunto.
Cada uno nos fue mostrando la manera en que aparecería la publicidad, todos tenían la misma base, pero solo dos eran lo que esperábamos. Necesitábamos que llamara la atención pero no cargarlo con tecnología, no era lo nuestro. Así que el primero que saldría sería Federico y de ahí le seguiría el otro chico. No entendía la frase "un toque femenino" hasta que lo estaba viendo.
Julia había hecho la perfecta combinación entre lo empresarial, profesional y clásico. Era todo lo que esperábamos, las siguientes dos chicas podrían apoyarla, aunque dudo que les agrade tener que seguir el proyecto de Julia y no el suyo.
Desiciones, desiciones. Tenía que pensar la manera en que trabajaran de manera estructural. Escribí en una hoja los tres nombres y se la entregué a Carlo para que él fuera quien anunciara.
—¿Estas seguro? —inconformidad asomaba en el rostro de Carlo.
—Estoy seguro —afirmé.
—Deberíamos...
—Si pero no —no dejé que continuara.
—Bien —se levantó de su asiento, haciendo todo el ruido posible. Me incomodé —. Julia, Ashley y Federico serán quienes nombraremos como nuestros publicistas. Están sujetos a leer las cláusulas del contrato y negociar solo una.
Sus reacciones fueron distintas la de cada uno, pero la que más me gustaba ver era la reacción de Julia. Era como si hubiese estando esperando por ella todo este tiempo. Por un segundo nuestras miradas se cruzaron antes de que Ashley la jalara contra ella para apretujarla en un abrazo.
Me levante para despedir a quienes debía y felicitar a quienes lo merecían.
—Gracias por estar aquí —le di la mano a la chica, y enseguida pase con el chico —. Gracias —asentimos.
Continúe. Felicitando hasta que llegue con Julia. Nos miramos,expectantes. —Muy buen trabajo Julia —estreche su cálida y suave mano.
