Fue un error. (Min YoonGi) Wattys 2020

Capítulo 20.

KAY

Terminé de vestir a SuJin, para bajar a desayunar. Sue estaba en la cocina, y por lo que había visto a lo lejos, había preparado panqueques con manjar y un tazón lleno de leche con chocolate, que se resume en uno de mis antojos. En este embarazo, a diferencia del de SuJin, lo dulce predominaba por sobre lo salado.

-Gracias Sue- le dije metiendo un trozo de panqueque en mi boca- está delicioso.

-Me alegro mi niña- dijo Sue acariciando la cabeza de SuJin- me encanta saber que lo que les preparo les gusta.

Esta vez, YoonGi no desayuno con nosotros. Sólo se apareció por la cocina para sacar un yogurt del refrigerador y creo que una manzana, ya que poco logre ver. Se despidió de su hijo, con un beso y abrazo, además de un "cuídate y disfruta de tus tíos". Sin embargo, a mí ni siquiera me miró. Frente a su actitud fría y déspota hacia mi persona, sinceramente me sentí triste, pero también me molesto su actitud.

¿Ahora qué error cometí?

- Pues, nombraste a Jin...y eso le molestó- contestó mi conciencia.

- Sólo le dije la verdad, le conté lo que haría en el viaje a Busan ¿O acaso querías que le mintiera?

- Se llaman celos....

¿Celos? Él no es así. Cuando estábamos casados, después de 4 meses le daba lo mismo si me miraban o no. Nunca mostró una actitud celopata o de sobreprotección hacia mi persona, ya que, según él, nadie estaba a su nivel.

-Sue ¿puedes decirle a HoSeok que tenga listo el automóvil?- sólo asintió y salió de la cocina.

- ¿Iremos a Busan? - asentí ante la consulta del primero.

-Sí Hobi, iré a visitar a mi familia y a Jin- conteste.

-Tú ex- me miró por el espejo retrovisor.

-Es mi difunto marido, no mi ex- le corregí- porque no nos divorciamos.

- ¿Lo extrañas? – preguntó, a lo cual lo miré algo dudosa, por lo que comenzó a observar el camino- digo, porque ha sido muy reciente todo lo que está ocurriendo en tu vida.

-Bastante, pero estoy mejor que antes- hice una pausa- YoonGi me apoya, algo.

-Entre YoonGi y Jin ¿a quién prefieres? - su pregunta era algo más que simple, quería saber mi preferencia. Estaba yéndose de a poco por otro camino en la conversación.

-Los dos han sido y son parte importante de mi vida.

-Pero debes elegir...- lo interrumpí.

-No es de tu incumbencia y este tema se acabó- sólo volvió a mirar y siguió conduciendo.

-Lo siento si te llegó a molestar, pero no lo hice con mala intención

Finalmente llegamos a Busan, tras unas horas de viaje. Estacionamos afuera de la casa de mi hermano y de JungKook. Baje, mientras que HoSeok, se daba la vuelta para abrir la puerta de SuJin, quien se vino todo el viaje durmiendo.

-Hermana- TaeHyung tan solo verme tras la puerta, me abrazo- mi pequeño bebé- tomó en brazos a SuJin.

-Tito Tae- reía Sujin. Se veían adorables este par.

HoSeok fue invitado a entrar a casa, quien en un principio quería irse, ayq eu no le gustaba sobrar en algunos lugares, pero quien, al ser convencido por mi hermano, sin dudarlo ingreso al hogar de mi familia. JungKook estaba en la cocina preparando el almuerzo tranquilamente, pero fue interrumpido por SuJin, que lo abrazaba por las piernas.

-Titaa- gritó cuando Kookie le dio un beso en la mejilla acompañado de una galleta- gracias tita- salió de la cocina para ir al comedor.

-Una pregunta ¿por qué te dice tita y no tito como a TaeHyung? - preguntó dudoso Jung, causando una mirada sonriente entre yo y mi hermano.

-Es que, en mi relación con TaeHyung, yo soy más femenino y delicado que él- le respondió JungKook acariciando su cabellera- y desde pequeño le enseñe a que me dijera Tita, es la costumbre.

-Entonces ¿tú eres el sumiso? - y con eso Kookie empezó a toser sin parar. Le había acertado en al clavo.

Almorzamos muy felices, aparte, la comida estaba exquisita. Pero, lo mejor de todo fue el postre. Jeon se lució con su tarta de frutos rojos o berries con crema batida. Una delicia totalmente. Después de una linda tarde en familia, llego la hora de partir. Insistieron en que nos quedáramos, pero YoonGi no estaba al tanto, y no quería preocuparlo.
Finalmente, nos despedimos y TaeHyung dijo que dentro de un mes irían a vernos, puesto que en estas semanas tiempo no tenían ¿Por qué? Simple, en la pastelería todo iba bien, tenían pedidos y JungKook estaba feliz de lo excelente que les iba ahora. Tenían una docena de pedidos, y era dinero asegurado.

-Solo espero que estes en buenas manos- ante lo dicho por Tae, HoSeok, escuchaba atentamente- no dejaré nuevamente que Min, les haga daño- miró a su SuJin, para luego dirigir sus ojos a mi vientre- daría mi vida por ustedes tres.

-Lo sé- le sonreí.

-Te mereces ser feliz, pero si Min YoonGi te llega a dañar, no me interesa ir a prisión por cuidar a mi hermana.

-Cariño, no seas tan drástico- JungKook comento.

-Amor, tú no sabes cómo actuar ese tipo, detrás de su bello rostro de porcelana, se esconde el mismísimo diablo.

-Tae...

-JungKook, tú mismo fuiste testigo de cómo llego Kay esa tarde de invierno, solo falto que la golpeara.

Antes de irnos de Busan, como destino final, decidimos ir al cementerio, para visitar la tumba de mi querido SeokJin. Decoramos con muchas flores de tono blanco y piel, pero por último y como toque final, le dejé una rosa, roja y pura como nuestro amor. SuJin sólo lloraba a mi lado, y yo, aunque quisiera negarlo, estaba triste. Mi pequeño hijo, nuestro hijo, quien crecía en mi vientre no conocería a su verdadero padre y eso, me destruía. Pero, tenía en plena conciencia, que él sería un pequeño ser producto de nuestro amor.

-Kay, debemos irnos ya-me dijo HoSeok, ayudándome a levantarme- está por oscurecer.

-Está bien- tomé a SuJin de la mano, y caminamos por un largo sendero lleno de árboles, ya con pocas hojas y un frío viento acompañaba un día, que se volvió gris y triste.

Al menos, pude venir a ver a la persona que me apoyo y me acogió en sus brazos, quien me entrego su amor, un amor incondicional.

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