Fue un error. (Min YoonGi) Wattys 2020

Capítulo 34.

Meses después.

YOONGI

Estaba en la empresa, exactamente detrás de mi escritorio. Sentado en aquel asiento de cuerina negro firmando un contrato de renovación con la constructora de Wang, por la simple razón de que el contrato anterior fue un éxito para ambas partes; y mi empresa aumento el triple de las ganancias con la inauguración del nuevo edificio. Todo iba bien respecto a ello. Aunque,  lo único malo o negativo, fue que al momento de la ceremonia de apertura de aquel edificio de 30 pisos, sucedió que Kay decidió no ir, porque según ella le bajaba el ánimo y se sentía insegura. En simples palabras, nos enojamos.

-Entiéndeme YoonGi, no puedo, no quiero asistir porque me recuerda a SeokJin- dijo ya al borde del llanto.

-Pero Kay, eso fue hace ya harto tiempo- dije gritándole- eso ya es pasado maldita sea.

Me miró asustada, con sus ojos llenos de lagrimas. Aquella mirada trasmitía angustia y terror ante mi carácter. Pues, no le gritaba hace ya bastante tiempo. Exactamente, desde el embarazo de Jun. Ante ello, se alejó y se metió al baño, para después de unos minutos, salir vestida con su pijama. Tomó su almohada, abrió la puerta y se giró un instante.

-Dulces sueños insensible- cerró la puerta tras ella y quedé sólo en la habitación. Solo, como un alma en pena.

Estuve una hora aproximadamente sentado en la cama pensando en que ella llegaría de igual manera a nuestra habitación para acostarse y luego yo me acercaría de manera cálida, le pediría disculpas, la besaría y finalmente, terminaría con ella enredados entre las sábanas haciendo el amor... Pero, habían dos cosas que reconocer. Primero que todo, no llegó a la habitación en toda la noche y segundo, no tengo sexo desde que ella cumplió los 7 meses de embarazo hasta ahora. Ahora que Jun tiene ya unos meses de nacido.

-Un gusto hacer tratos contigo Min YoonGi- me estrechó la mano Jackson Wang, con una grata sonrisa. Típica de modelo de ropa interior.

-Igualmente- dije algo cabizbajo. Sentía mis ánimos por el suelo.

Se retiró de la oficina, para luego quedarme sólo, abandonado mirando por la ventana que me daba una espectacular vista de la cuidad de Séul. Todo estaba en paz, hasta que sentí el llanto de un bebé tras la puerta. Ante eso, me levante rápidamente y al abrirla, vi a mi hijo, a Jun entre los brazos de Yandi.

- ¿Qué hace Jun aquí?- me acerqué y lo tomé en brazos- tranquilo pequeño, papá está aquí.

-Vino Kay con los niños, pero a SuJin se le ocurrió ir al baño y bueno, ella lo acompañó- dijo tocando la mejilla de mi bebé- y me lo dejó un instante.

-Ahh entiendo- tomé la manito de mi hijo con cuidado- bueno Yandi gracias.

Entré con el pequeño en brazos a la oficina . Al notar o más bien, ver que este dejaba de llorar, lo dejé en el  cunero que tenía al rincón de aquella habitación. Esperen ¿un cunero? Sí, tengo uno en mi oficina y fue idea de Jimin. Según Jimin, quería pasar tiempo con sus sobrinos y no encontró mejor idea que esta algo descabellada. Aún no comprendo a las neuronas de mi hermano.

Al poco rato, entró Kay de la mano con SuJin. Admito que no veía a mis pequeños hace ya una semana, porque cada vez que llegaba a casa estaban durmiendo. Todo a causa del trabajo.

-Hola Kay- me acerqué para besarla pero se alejó.

-Hola YoonGi ¿no te molesta si te dejo a los niños un instante? Voy a ir al terminal para buscar a TaeHyung y a JungKook- sólo le sonreí y asentí.