Capítulo 7

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Ya son tres noches sin poder dormir...Tres noches sin pesadillas...pero si con horribles recuerdos al ver a John muerto por mi maldita culpa.

Once ha intentado llevarme a ver el mar pero no lo he permitido, no quiero salir de aquí, no quiero comer nada... Quiero morir aquí encerrada, ya nada importa.

Ni siquiera entiendo por qué le doy tanta importancia a esta situación.

Once abre la puerta y entra.

Yo estoy sentada en el piso mirando un punto fijo.

—Scar...—Lo interrumpí.

—Chss—Tapé mis oídos, no quería escucharle, de cierta forma me aturdía. 

Si ellos no me hubieran secuestrado no habría ningún muerto en este momento. ¿Cómo estará su familia? ¿Ya habrán encontrado su cuerpo? 

—Nada de ''Chss'' —Me dijo y miré fijamente sus ojos. —Nos iremos en una hora de aquí y quería que vieras la hermosa vista.

—Ya dije que no quiero salir—Murmuré.

—Lástima que aquí no se hace lo que tú digas, así que levántate de una buena vez—Me habló frustrado.

Me levanté del piso y él se acercó a mí pero lo detuve con mi mano.

—No te acerques... Te lo suplico, yo no escaparé...Pero, por favor no me toques—Bajó la mirada reteniendo un insulto.

—Bien—Asentí y salimos de la casa rodante.

Caminamos hacia el mar e inhalé su olor.

Me senté en el piso de golpe, es hermoso...

Como las olas golpean la orilla, la arena húmeda entre los dedos de mis manos, la brisa choca con mi rostro... Casi puedo sentirme libre.

No estoy libre, estoy secuestrada.

Observé a Once que ya me estaba mirando.

— ¿Es lindo, no? —Asentí.

— ¿Ya puedo volver a la habitación? —Le pregunté y me miró unos segundos. Se sentó mas cerca de mi, pasó su brazo por mis hombros y me acurrucó en su pecho...No tenía fuerzas para separarme y tampoco quería hacerlo. —Te dije que no te acercaras—Murmuré pegada a su pecho inhalando su perfume.

—Lástima que aquí no se hace lo que tú digas—Repitió su frase, levanté mi mirada para ver sus ojos que observaban el mar y luego pasaron a mi rostro.

— ¿Puedo hacerte una pregunta y me responderías con sinceridad? —Le pregunté y él asintió. — ¿El final de tu plan perfecto es matarme? —Él mordió su labio inferior pero no retiró su mirada de mi rostro. — ¿Eso es un sí? 

—Es un no te diré—Rodeé mis brazos por su torso para estar más cómoda, quería sentirlo cerca.

—Si me dijeras que sí no me asustaría—Él pasó su pulgar por mis labios.

—No lo sé, Scarlett...No sé qué haré contigo—Asentí.

— ¿Prometes pensarlo? —Él negó con la cabeza.

—No lo haré—Me separé de él pero él me volvió a pegar a su cuerpo, su mano estaba firme en mi cintura—Nunca dije que te alejaras.

—Lástima que yo no hago lo que tú digas—Me separé de nuevo.

Él sonrió y volvió a pegarme a su cuerpo.

—Aquí mando yo, tú eres mi secuestrada y yo el secuestrador—En un acto de reflejo miré sus labios carnosos y rosados— ¿De nuevo analizándome? —Subí mi mirada a sus ojos.

Secuestrada Con El Amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora