14; ❝ NOTHING. ❞

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CAPÍTULO CATORCE;
NADA. ❞

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»¿Como un corazón como el tuyo, puede amar a un corazón como el mío

En el momento que Carl Grimes escuchó el arma siendo cargada en su dirección, fue cuestión de segundos para que él estuviera tendido en el asfalto por aquel empujón propinado, metros lejos del peligro. Se percató de su amiga morena, empujando el filo potente de su katana dentro del cuerpo de su atacante, dejando el resto del trabajo para aquellos seres, que no tardaron en iniciar la matanza con sus dientes. Al mismo tiempo, el disparo resonó a través de su canal auditivo, por lo qué, por pura inercia, cerró los ojos, mientras se cubría. Más, la bala nunca llegó, y dando un vistazo a su alrededor, pudo ver a su familia tan sanos como él.
Sentía qué, tal vez, podrían salir ilesos del caos.

Estuvo de pie, dando un asentimiento hacía Michonne cómo una forma de demostrar su gratitud hacía la mujer por haberlo salvado de su atacante.
Hasta que lo escuchó, la suave melodía que hacía su corazón estallar en emoción por la belleza que la misma poseía. Se giró en su dirección, percatando como ella también lo hacía hasta enseñarse ante él, dando una imagen que lo dejó con la boca abierta en una "o", y las lágrimas rebalsando su mirada oceánica.

Su cabello dorado como una cascada de oro, creaba una cortina en su rostro, pero podía ver a la perfección la sangre bajar por la mitad del mismo. Hasta que lo distinguió, su ojo derecho no estaba.

⏤Rachel...⏤
ella no pudo responder a su débil llamado cuándo su cuerpo acabó de cortar el hilo de vida que lo sostenía, y cayó. En un golpe seco, que la dejó tendida en la acera, inerta. Casi muerta.
Pero Carl no iba a permitir que su historia acabará allí, cómo su temblorosa anatomía le permitía alzó su peso entre sus brazos, sientiendo aquello más liviano de lo normal que las anteriores ocasiones en las que la había tomado de esa forma, y también se ausentaba su risa, tan cálida como el sol de verano, que entre suspiros, exigían aire tras tanto carcajearse, que bajará de nuevo sus pies al suelo. Pero, no había nada allí. No había risa, no había respiro, no había armonía.
Nada.

La familia del castaño acompañó al menor en la pérdida, ayudando en acabar con aquellas caminantes que se multiplicaban como cucarachas en frente sus ojos llorosos por lo ocurrido con la pequeña rubia. Pero eso no iba a detenerlos, debían llegar dónde su salvación estaría.

⏤Oh, mi Dios.⏤ Aaron susurró, a salvo dentro de las cuatro paredes, admirando aquella escena que se desataba. ⏤Es Rachel.⏤

⏤Ella...⏤ Heath titubeo al hablar ante el pánico de que su indagación fuera afirmativa, pero aún así, a pesar de miedo en sus venas, tragó saliva, y acabó sus palabras. ⏤¿Está muerta?⏤

Aaron iba a contestar, titubeante en su respuesta ante no conocer en totalidad aquella misma. Pero antes de ello, Denis se adelantó al resto, e inhaló fuerte, dando una voz medianamente ronca para que supieran que hablaba en serio, y que aquella mujer indefensa, en peligro, ya no se encontraba más en ella. ⏤No.⏤

En ese momento, empezó a dar órdenes que fueron ejecutadas de inmediato por la firmeza en su voz. Hasta que todos fueron testigos de la escena que se hizo en cámara lenta, cuándo Aaron abrió la puerta principal, dando paso a una exhausta Michonne que arrojó su katana al suelo apenas estuvo dentro, seguida de un agitado Rick, y como cereza del pastel, un adolescente con el alma tan rota como su corazón, con los brazos temblorosos que sostenían a su amada rubia, para dirigir a la misma dónde la plancha fría iba a acoger su cuerpo durante toda la operación. ⏤Debes salvarla.⏤ musitó, casi inaudible.

⏤¡Rick, Michonne! ¡Los necesito aquí!⏤ las órdenes reanudaron, y nuevamente fueron acudidas al segundo. ⏤Michonne, sostén su cabeza. Rick, ve por la linterna. Vamos a necesitar luz, y mucha paciencia.⏤

Pero Carl estaba desesperado para eso, en ese momento no conocía sobre la paciencia, sobre esperar por lo mejor. Él estaba exigente de querer a Rachel a su lado, compartiendo de su dulce compañía. Así que, no esperó un segundo más. En sus dedos delgados, abrazó el mango de madera del machete, y entre pasos firmes, se acercó hacía la puerta. Haciendo caso omiso a cada grito que sonaban lejanos a su posición, apenas si tomándolos en cuenta ante la manera en la que sus oídos se tapaban como litros de agua en ellos, se enseñó, cara a cara, ante la multitud de muertos vivientes.

Rick tragó saliva con nervios, al ver a su hijo salir del lugar, para enfrentarse él mismo con la población entera de caminantes.
Sostuvo su rizado cabello en sus manos, mientras se giraba a ver la escena con detenimiento.
Ver a aquella rubia, semi muerta. Sin un ojo, mientras sangre salía a mares por aquel agujero negro no fue muy reconfortante.
Subió la mirada, encontrando a Aaron y Heath, saliendo también de la habitación, auxiliando a su primogénito en la batalla. Los siguió con la mirada, percatando antes de que la puerta se cerrará por completo, cómo todas las personas que habían logrado resguardarse en sus hogares, salían de los mismos. Tan sólo para ayudar al castaño exhausto que combatía con los muertos en medio de las calles.

⏤¡Debo ayudar a mi hijo!⏤ exclamó.

⏤Sólo unos puntos más...⏤ susurró la doctora, sin dejar de lado la operación. Pero la postura de Rick Grimes era una resistente a su decisión sobre ya querer irse, en eso, Denis se dejó por unos vagos segundos. ⏤El chico la quiere. Necesito que te quedes, si no quieres que muera.⏤

( • • • )

⏤¡No paren!⏤ el grito de Carl fue acompañado, de un fuego sofocante, iniciando por Daryl, que se instaló en la laguna. Aún así, eso no robó la atención de los luchadores. A excepción, que la de los muertos se acercaban como moscas a la luz. Y ahí, en ese preciso instante, fue que los nuevos habitantes de Alexandría entendieron, y por la mala; Éstas personas, que habían vivido gracias a los grandes muros que los rodeaban. Se habían adaptado al nuevo mundo, sólo era cuestión de que algo grave pasará, para que funcione como detonante.
Y Rachel Anderson era un claro ejemplo.

Y Rachel Anderson era un claro ejemplo

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𝗦𝗔𝗟𝗩𝗔𝗧𝗜𝗢𝗡┃CARL GRIMES.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora