Erase una vez un apocalipsis

Capitulo 12 Ya nos conocemos mejor

Me levanto de la cama, me froto los ojos y me estiro para desperezarme. Otro largo día nos esperaba. Mónica y esos dos chicos James y Christopher ya estaban despiertos, Mónica me dice en tono burlón: Al fin te despiertas, dormilón como siempre Nate nunca cambias. 

__Cállate mugrosa no estoy para tu lata tan temprano__ le contesto tallnadome los ojos con los puños cerrados. Luego volteo hacia los chicos y los saldo:

__Buenos días James y Christopher__ ellos me responden igual y James me dice que vaya a comer yo acepté estaba hambriento, no eran los típicos huevos con queso, pan y jugo de naranja que mi madre nos hacía de desayuno. Eran unas cuantas golosinas y botellas de agua que había en mi mochila, no era mucho pero no podía pedir más. Aunque Mónica las había dispuesto en la mesa de manera que se veía como un desayuno elegante y apetitoso. Al principio comíamos en silencio y nos ignorábamos, era incómodo para todos convivir con personas que ni conocíamos pero después comenzamos a presentarnos y a hablar de nosotros.

__Yo soy militar,__ comenzó James con cierto atisbo de orgullo por su anterior empleo__ he participado en diecisiete misiones de todo tipo, terrorismo, tráfico de drogas, prostitución y otras cosas. He sido militar por casi doce años. Conocí a Christopher cuando necesitaba un par de armas, y fui a su tienda para conseguirlas ya que vivía en un barrio muy peligroso. Me pareció un tipo agradable y buena onda, comenzamos a hablar y a conoceros y nos hicimos buenos amigos.

__Bueno, __ comenzó a decir Christopher__ yo fui policía por ocho años, me retiré luego de realizar una misión persiguiendo a unos narco traficantes estos explotaron una bomba que causó una explosión que me causó varias quemaduras de segundo grado y me dejó en coma durante un mes, tuve suerte de no perder algún miembro como otros de mis compañeros o de morir, después de eso monté una tienda de armas, le vendo más que todo a policías, militares y otros miembros de protección civil, no suelo venderle a civiles comunes y esas cosas y tú ¿Nathan cierto? Cuéntanos de ti.

__Bueno yo comparado con ustedes o soy gran cosa, sólo soy un chico de trece años que es, o mejor dicho era estudiante de secundaria, con una madre y un padre los cuales no sé si siguen vivos__ dije en tono sombrío pero luego añadí más animado mirando a Monica__ y una cerebrito presumida de hermana__  Mónica voltea la cara indignada.

__Si esas siempre son las peores__ dice Christopher.  Todos reímos excepto Mónica que no dijo nada y se mantuvo seria y volteó la cara indignada, luego de romper el hielo comenzamos a conversar más fluidamente sobre nuestras experiencias, a contar anécdotas y chistes y esas cosas, era relajante conversar tan tranquilamente con alguien después de tanto tiempo de tensión y ajetreo. Estuvimos charlando largo rato, y yo sólo les revelé unas cuantas cosas de mis habilidades pero sin mencionar que había sido mordido por un infectado, que era inmune y que había adquirido increíbles destrezas. Incluso Mónica después de un rato se relajó y comenzó a conversar y reír alegremente con nosotros.

Compartimos información sobre nuestras experiencias con los infectados, y yo trataba de no mencionar las más increíbles y exageradas, ellos como todos habían tenido que huir, esconderse y luchar de vez en cuando con algún infectado. Les conté que había escapado de la escuela con tres amigos, que me estaban esperando y que yo había ido a esa escuela a buscar a Mónica y que si querían podían acompañaros y unirse a mi grupo, los acababa de conocer pero parecían confiables y además estaban en forma y habían sido entrenados muy bien y conocían técnicas de supervivencia que nos podrían ser útiles así que serían de mucha utilidad en el grupo. Ellos se mostraron reticentes al principio creo que pensaban lo mismo que yo pero luego aceptaron. Después Christopher comenzó a contar que estaban haciendo en la escuela de Mónica cuando los rescatamos: