Cegado, aturdido, rabioso, contagioso, iracundo, impaciente...
Sam intentaba defenderse y poner su mejor cara de "pobre de mí". Liam se marchó, la puerta aún seguía abierta, el viento fresco entraba, pero aun así no bajaba mi temperatura, no calmaba mi locura. Dicen que si respiras profundo, las cosas fluyen mejor, incluso tu cabeza se aclara como el aire, claro. En este momento me importa un bledo todo aquello. Recibí la noticia de que Janis está aquí otra vez, y este pendejo tiene que ver en ello. ¿Cómo no lo calé antes? Cuando miraba su foto con detenimiento...
-Ha-ha-Harry.
Oh cállate. Oh, no sabes cuánto te odio. Mejor cierra tu boca y déjate morir.
¡Harry! ¡Harry! Si muere, no te dará pruebas...
Cierto.
Lo solté y él trataba de recomponerse, en el suelo. Tosía, tosía... maricón.
Con mucha tristeza en su carcasa, golpeé el estómago de Sam, así volvió al suelo y ahora se retorcía.
Me fui de allí. Si, ya sé, debería de indagarlo, pero no puedo ahora, no estoy bien. Tengo ganas de llorar, y eso haré.
Llegué a la habitación y lloré, lloré porque la he perdido. Lloré, también, porque ella volvió. Lloré por todo lo que sufrí. Lloré porque nunca perdí la esperanza. Lloré porque volveré a ser Harry. Lloré porque no había llorado, y se siente tan bien.
*~*~*
Nadie viene a darte una lección de la dolorosa patada en el culo, que es el amor. O quizás no he cachado bien el mensaje en mi larga vida.
Temprano partí de la casa, sin desayunar siquiera, sin besar a mi hija, ni pasar la mañana con ella... fui detrás de alguien segundo y seguro en esto. Niall.
El autobus me dejó a unas manzanas. Caminé analizando bien lo que haría, sabía que iba sin herramientas, sólo iba con ideas. Muy prepotente lo mío.
Llegué. Forcé la entrada. Caminé hasta la cama, donde Niall estaba sentado y un poco alarmado.
-Sorpresa—Le dije un tanto desquiciado.
-No lo es. Te esperaba, ¿soy bueno fingiéndola? Porque he pensado en hacerme el sorprendido, es una característica de los inocen... —Me lancé sobre él. Entonces me hizo volar por la habitación, su rostro era rojo, como la nariz de los payasos, pero esto no le daba gracia.
-¿Dónde está? —Grité en su rostro. Apenas unas gotas de mi saliva, llegaron a él.
-¡Calma! —Él exclamó.
-¡¡¡¿Dónde está?!!! —Repetí desgarrándome en el suelo, llorando.
Otra vez la furia me visitó y me lancé sobre él. Otra vez volé. Caí en el suelo, un poco más cómodo. Me volví de pie, calmé mi mareo, apretando mis ojos. Los abrí, todo a oscuras.
-¿Niall? —Llamé.
-Debes relajarte—Dijo su voz, aún más fuerte.
¿Dónde estoy?
Veía recuerdos de, al parecer, Niall. Muchos sentimientos se encontraban, no sabía diferenciar si todos eran de Niall, o míos, o de ambos. En un momento las piernas me vencieron y estaba acostado, esperando. Allí apareció el rostro de Janis riéndose, dándome energía, dándole vida a mis piernas. Corrí tras la imagen que se alejaba. Yo seguía moviéndome, como su pelo rojizo y largo... como los destellos en su cara que hacían notar sus pecas.
"Yo la pienso mucho, lo siento" confesó, luego de horas, Niall.
Janis vive en la cabeza de Niall, siempre. ¿La tendrá aquí? ¿Cómo me tiene a mí? Debo... debo buscarla.
Un momento, Niall será un dolor de culo y psicópata, pero no es egoísta, no con ella... no la encerraría aquí.
"Me agrada que pienses así de mí" dijo, un tanto sarcástico, un tanto sincero.
Han pasado días, hace días estoy aquí, sin entender aún, qué sucede.
No he hablado con Niall, y sigo en su cabeza, o donde sea que me puso... como si fuera un muñeco de colección.
Era el único aquí. Es un laberinto, uno oscuro... no sé dónde pisar, no sé qué mirar, pero siento como el suelo cambia, se eleva, baja, gira... quizás estoy flotando, quizás no, quizás me evaporaré, quizás me vuelva más fuerte. No sé cómo usar esto a mi favor. He perdido ese don.
Necesitaría perderme, y jamás llegar... caminar para ir.
Han caído ideas sobre mi cabeza, como hojas en pleno otoño. Sólo que ningún viento despejará este camino, ya es tarde, ya las hojas son fantasías... de aquel paraíso al que me destiné, donde Janis jamás me volverá a dejar. Donde nos colgaremos de cada constelación. Donde haremos girar los planetas que fueron frisados.
Oh, te extraño, criatura perfecta.
"Sólo con paz, la hallarás"
-No me hables de paz. Ojalá pudiera meterme en la cabeza de Sam, como en la tuya, y acabar con esto.
"Buen paso"
Me sentí algo incómodo, como si me hubiesen noqueado.
Abrí mis ojos. Estaba frente a Niall.
"Una persona suele explayar sus sentimientos, sus inquietudes, su inconsciente... cuando sueña, ¿sabías eso?"
Corrí lejos. Él cree que aún puedo meterme en los sueños de las personas... haré el intento.
Llegué en la madrugada, metiéndome en la habitación de Sam. Dormía bastante profundo. Después de varios intentos, donde mi descontento crecía... ingresé.
La cabeza se me achicaba, o eso sentía. Mi piel ardía. El mismo infierno en segundos.
La tumba de Janis... pronto aquella imagen se borró.
Estaba frente a Niall y lo abrazaba, Sam, claro.
Visitando a Clara... Clara sonreía y lloraba entusiasmada cada vez que Sam la tocaba, ¿hizo eso todo este tiempo?
Sam me miraba a mí desayunar.
-Deja de mirarlo—Dijo alguien a su lado, se giró... Lucy.
-No te acerques a...
-Lo haré. Porque en ti no confía, eres un extraño, incluso cree que has desaparecido a Janis. ¿Confía en mí? No lo sé, pero sé que le agrado, y eso te está carcomiendo. Aléjate si no quieres que ellos sufran.
¿Qué?
He salido, oh no. Quise volver a intentarlo, pero Sam tenía sus ojos abiertos... de un color azul.
Me alejé y salí de la habitación.
*~*~*~
Por la mañana, cuando Sam no me quitaba la vista de encima. Hablé con los Sullians sobre Janis. Ninguno me creía, todos estaban sintiendo pena por mí, y eso ¡me sacudía las pelotas! No puedo controlar mis feos sentimientos, pero agradezco que pueda seguir a mis presentimientos.
Subí a la habitación y estaba Sam, mirando a Clara. ¿En qué subió? Si yo mismo...
-Aléjate—Ordené, acercándome a un paso rápido. Él también lo hizo, y me besó.
Un poco desconcertado y sorprendido, también disgustado, lo empujé.
-¡¿Qué haces?! — Fui crudo.
-Tú también lo has hecho, muchas veces. Has invadido mi espacio, has alargado mi tiempo. Me has alterado, y besado sin permiso, criatura—Dijo con la voz de Janis.
Esto no...
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REGRESSION - Harry Styles
Fanfiction"Te haré volver, en carne y hueso, a nuestro pasado, aunque esté hecho trizas, es el único espacio que compartimos" - Todos los derechos reservados. Prohibida su copia. Agradecimientos especiales a Editorial Luna por la portada.