Baje las escaleras mientras peinaba mi cabello, fui hasta la cocina donde estaba Derek solo en boxers, preparando café.
- Hola
- Buenos Días. - Gruño.
- ¿Como te fue anoche con el bebe?
- Fantástico, hicimos una fiesta. - Dijo sarcástico.
- Bueno, al menos ya esta dormido.
- Oh, si, aun me queda toda la tarde, y luego, sera tu turno. - Sonrió.- Claro, iré a trabajar, si necesitas ayuda, me llamas... ¡Oh dios, estoy hablando como una adulta!
Derek se acercó a mi y me abrazó besando mi frente.
- Adiós mamá, que te vaya bien, en el trabajo. - Beso mis labios cortamente.
- Te amo.
- Yo también bebe.
Tomé mi bolso, y las llaves del auto, después de varias prácticas y algunos gritos había aprendido a conducir, salí de la casa, mi casa.
La amaba, era enorme y me gustaba, Denise vivía calles mas arribas, y papá, el bueno... no quería alejarse de su mejor amigo, Joseph. Así que vive un poco alejado.
Lana se había mudado en el centro de ciudad en un apartamento, lo cual era muy lujoso y trabajaba como modelo para Allan.
Aparqué el auto y escuché el sonido de mi teléfono. Me quite el cinturón y busqué dentro de mi bolso.
- ¿Que pasó? ¿Algo anda mal?
- Si, ¿Como preparo la leche? Osea, esta en polvo, ¿Como la hago liquida? o ¿solo tengo que dársela en polvo? Esto es confuso, me estoy volviendo loco.
- Échale agua al biberón y luego echa el polvo, lo mueves y listo.
- ¿Así de fácil? Vayaaa. - Alargó.
- Si, Derek. - Reí.
- Esta bien, lo intentaré. - Colgó.
Salí del auto tomando mi bolso y entre en el edificio donde trabajaba como secretaria del fotógrafo Allan Martín.
- Buenos Días, Lia.
- Buenos Días, Kelly.
Tomé el ascensor y llegue al piso donde estaba mi pequeña oficina, habían chicas y modelos en todas partes, Allan buscaba la nueva modelo para promocionar, y pues ahora habían millones de ella haciendo fila.
- Oh, Gracias al cielo que llegaste, Lia, necesitamos empezar, estas chicas me están poniendo nervioso. - Dijo para luego besar mis dos mejillas.
- Nunca pensé que llegarían tantas. - Tomé la hoja de papel donde debía anotar los nombres de cada una de ellas.
- Soy el mejor fotógrafo, Lia, ¡Por Dios! - Exclamo y peino su corto cabello. - Ya vamos a empezar. - Dijo con amabilidad a la chicas y jaló mi brazo para arrastrarme hasta su segunda oficina.
Segunda, porque era el sitio donde tomaba las fotografías, tenía otra mas persona, donde editaba o solo se sentaba a mirar fotos.
- ¡Hola gente! - Lana entró muy emocionada con un vaso de café en la mano, llevaba sus lentes, y linda ropa de diseñador.
Se sentó a mi lado en la gran mesa y dejó su enorme bolso aún lado.
- Hay tanta gente allá afuera. - Suspiró. - ¿Como estas? y ¿Lucas? Trataré de visitarlo hoy.
- Él esta bien. - Sonreí. Derek debería estar pasándola horrible. - Y sería genial que lo visitaras.
- Todo esto se siente tan bien, a pesar de solo tener dieciocho, disfruto de la buena vida, y un hermoso novio, por cierto, Michael te manda saludos.