Falling for you [TaeTen]

Capítulo #17

Tantas vueltas me habían mareado, empezaba a creer que la hija de los Nakamoto no sabia de ese tal baile Europeo, solo quería sentarme y pasarla en paz un rato mas antes de que Ten chillara que quería bailar toda la santa noche o incluso que ya se había aburrido y quería irse. ¡Oh sorpresa! Ten no estaba en la mesa, ni Hansol, ni Kun solo Haechan.

—¿Donde esta mi marido?

—Y yo, ¿que voy a saber?. A duras penas pude mantener el ojo en ti.

Sin esperar que diga algo más, salgo en busca de Ten. No dudaba que estuviera con Johnny y la idea de lo que pudieran estar haciendo no me gustaba para nada.

No había tardado demasiado en encontrarlo y sorprenderme de lo que había escuchado.

"Taeyong, Me esta gustando más de lo que quisiera"

No podía ver la cara de Johnny y tampoco es como si necesitará verla para saber que estaba molesto por aquella confesión.

¿Que se supone que debía hacer?, ¿fingir que no escuche nada?

Me aclaro la garganta cuando la vista de ambos va hacia mi, y como no, Ten se había sonrojado.

—Te estaba buscando. —Cambio el tema. Ten asiente empezando a caminar a donde estoy yo pero la mano de Johnny lo detiene. —Sueltalo. —Ordenó.

Ten no hace nada tan solo espera con la cabeza gacha. Soy yo quien termina por ponerles distancia a esos dos colocando a mi marido detrás mio.

—Te dije que no te quería cerca de él.

—Y yo te dije que eso no lo decidías tu. —Contraataca.

—Quien le gusta ahora soy yo y no tu, ¿no te parece suficiente eso? —Bien, no quería hacerlo, no quería que supieran que había escuchado pero si eso servía para dejarle todo en claro a Johnny, lo usaría.

Ten había tirado de mi saco pero lo ignore cuando recibí un puñetazo que me descolocó un poco.
Me había llevado la mano a mi mejilla, deje a Ten y me le fui encima al castaño.

—¡Taeyong!, déjalo. —Pide en gritos mi marido. —¡Hansol!, ¡Kun! Alguien, joder.

Y si, nuestros amigos no habían tardado en aparecer junto a los del orangután.

Nakamoto fue quien me tomo a mi y Hansol a Johnny.

—¿Que carajos sucede aquí?. —Pregunta el anfitrión.

—¿Por que no le preguntas a tu amiguito? —Escupo. Ten se me acerca y me toma del rostro hasta que mis ojos se posan en él.

—Cálmate por favor. —Me pide.

Johnny empieza a forcejear por su libertad y cuando veo que la consigue para ir a golpearme sin tener en cuenta que también está Ten, no tengo de otra —y por estúpido que suene— piso el zapato bien boleado de Yuta para rodear a Ten amortiguando el golpe que él recibiría por mi.

Y luego, eran todos contra todos.

Incluso Kun se había metido en la pelea, solo por que un pelirrojo que no tenía idea de quien era había golpeado a SiCheng.

—Es hora de irnos.

—¿Lo vas a dejar así?. —Señala la bola de golpes.

—Estarán bien, tu y yo tenemos que hablar. —Y esa idea pareció no gustarle. —Quieras o no. —Doy por terminado esto.

Antes de poner un pie fuera de la casa, Sana aparece.

—¿Que sucedió allá?. —Pregunta molesta y con los brazos cruzados. —Estabas conmigo y me dejaste.