Capitulo #18

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Por varias razones es que Taeyong prefería ordenar sus cosas antes a estar el mero día buscando todo y frustrarse por ello. Cosas tales como las que ahora se daban en el castillo.
Era el primer día de clases oficial de RenJun y el pequeño se hallaba corriendo de aquí para allá gritando.

-¿¡Donde esta mi corbata! ?

Taeyong se dio cuenta que también tenía solo un zapato puesto por lo que su búsqueda llevaría más tiempo, Ten de ultimo momento chillaba por sus prendas despojadas de su maleta y no había forma de meter infragantti ninguna prenda pues era custodiada por su marido.
Ésa mañana con diferencia de otras Susana cocinaba con gritos y demasiada presión, Taeil era quien pagaba los platos rotos.

Veinticinco minutos después, Taeyong, Ten y RenJun se encontraban ya en el auto siendo despedidos por la familia. Los adultos dejaría al menor a la escuela para de ahí ir al aeropuerto y tomar su vuelo que los llevaría a Canadá.

En el transcurso del viaje todos iban en silencio pero no uno incómodo sino todo lo contrario. Hasta que RenJun hablo por primera vez.

-Chittaphon.

-Hmh. -Responde Ten. Gira su rostro mirando a su primo.

-¿Y si no me quieren?

-Lo harán, todos lo hacen. -Estira su mano para colocarla sobre su rodilla en forma de apoyo.

-¿Y si no hago amigos?

-Por supuesto que los harás, además, que yo sepa ya tienes amigos, ¿recuerdas a los cotillas de la otra vez?. -RenJun asiente. -¿Vez?, tu tranquilo todo ira bien.

-¿Cuando vuelven?. -Cambia totalmente el tema y toma a Ten desprevenido.

-Serán solo cuatro días, Ren. -Esta vez responde Taeyong.

-¿No me van a abandonar, verdad?

-Oye, oye. -Ten por fin reacciona y le dedica una enorme sonrisa a su primo. -No haremos tal cosa, ¿te digo algo?.

-Si -Responde emocionado.

-Es un Negóbodas.

-¿Que es eso?. -Pregunta RenJun más animado pero con duda.

-Un viaje de negocios que también es regalo de bodas.

Cuando RenJun quiere opinar sobre la poca creatividad de su primo, Taeyong aparca el auto sin llegar a apagarlo para mirar al menor.

-Llegamos, suerte.

-Gracias. -Arrastra su cuerpo fuera del auto y cuando cierra la puerta va a la ventana de Ten. -Diviertanse y me traen algo.

-Hecho, te quiero Ren.- Ten saca la mano del auto y desordena el cabello del menor para luego volverla a meter. -Demuéstrales quien manda.

Entonces el timbre suena y con todo el ánimo del mundo RenJun sale corriendo dentro del edificio.
Ten se gira para ver a Taeyong pero se lleva un pequeño susto cuando lo ve demasiado cerca.

-Dios, no hagas est....

No lo deja terminar, pega sus labios con los del menor. Ten no tarda en corresponderle acercándose y entrelazar sus manos alrededor de su cuello.

-Ahora si, vámonos. -Comenta Taeyong cuando se separa.

Ten le dedica una sonrisa y relame sus labios para luego perderse en el paisaje hacia el aeropuerto.

~×~×~×~×~×~×

Luego de diecisiete largas horas en el avión por fin habían llegado a su destino. Canadá.
Ambos estaban muertos del cansancio a pesar de dormir en casi todo el viaje, cada uno tenía su maleta y decidieron que antes de ir al hotel darían un pase. Al menos Taeyong seria el guía de Ten por que él nunca había estado en un país extranjero.

Las miradas de mucha gente se posaban en ellos conforme pasaban y miraban cada lugar detalladamente, unas se acercaban curiosas y hablándoles en inglés les pedían tomarse una foto que ellos gustosos aceptaron aunque luego de que las chicas salieran corriendo todas emocionadas y gritando barbaridades los hombres se quedaban confundidos. ¿Tan raro era ver un oriental en Canadá? Claro al parecer no toda la gente sabia distinguirlos, luego de que Taeyong le terminará de comprar un trozo de pastel al menor escucho como unas chicas se acercaban al encargado y le preguntaban si sabia de donde venían por lo que el solo se limitó a responder que eran Takatakas, causando una risa en él.

Cuando Ten se hubo cansado de correr aquí y allá y sentirse extranjero ilegal como la protagonista Eun Tak de un drama que lo había hecho llorar horrores. Se dispuso a chillarle a Taeyong por un hotel cercano y cuando se hicieron de un taxi sumándole otros quince minutos en lo que los registraban y subían a su habitación, Ten espero que su marido le abriera para entrar y correr a la cama.

-No me despiertes hasta mi otra vida. -Pide cerrando los ojos.

-Al menos tenemos piscina, no te aburrirás tanto.

Pero el menor ya se había quedado dormido en la gran cama matrimonial. Taeyong deja el balcón y vuelve a la habitación para sonreír y negar.

-¿Que voy a ah caer contigo?

Después, se acerca a la cama y se quita los zapatos haciendo lo mismo con los de Ten para luego abrazarlo y dejarse caer en brazos de morfeo.

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Tres palabras.
No me culpen. :'v
Él capitulo estaba listo hace 900 años. (Bueno no, exagere) pero desde que volví a tener Internet me pasa que Wattpad borra los capítulos o no me deja abrirlos y cuando por fin lo logro no hay ni mergas escrito, ¡NI MERGAS! </3 entonces volví a escribirlo y se que quedo corto pero ya no me acordaba bien de todo lo que el capítulo que se me borro tenía. :(((
Bien dejémonos de lamentaciones. Quiero decirles que eso de que el señor les dijera a las chicas que eran unos Takatakas me paso junto a una amiga. XD
A diferencia de que nos pusimos en modo acosadoras y los seguimos a donde iban hasta que bueno, subieron a un auto y se fueron y con ellos mi corazón. (Ah mira pobrecita XD) y debo decir que me sorprendió pues estaban guapos que parecían Idols (●♡∀♡)
Ok ya, espero les guste. :)

Falling for you [TaeTen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora