La hija de Josh Miller®| Terminada✔

Capítulo 21.-Mejor amiga.

Abi

Llego a mi habitación, y para mi sorpresa cuando la abro Harper no está. Me ha dejado una nota en mi escritorio, me acerco a la mesa y la cojo con mi mano libre.

Estoy ayudando a Leo con los deberes, :).

Sonrío orgullosa de mi amiga aunque ahora mismo me hacia falta su compañía para contarle todo lo ocurrido, Harper es una chica que sabe ecuchar y comprende a una persona tenga mil fallos incluso.

Estoy segura que Leo y ella acabarán siendo la pareja del año, el rey y la reina del baile y todo lo cursi que puede llegar a ser el amor.

Me tiro sobre mi cama y comienzo a cerrar mis párpados lentamente hasta que voy quedando dormida en un profundo sueño.

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Max

Llego a mi habitación, Leo no está así que supongo que estará ocupado con alguna chica. Dejo tirada la maleta por el suelo y me recuesto en mi cama.

Dentro de dos días hace cuatro años desde aquello... la echo muchísimo de menos pero de una manera u otra Abi está ocupando ese lugar.

Una vez le prometí a Mary que jamás habría otra chica que reemplazará lo que sentía por ella, pero entonces llegó esta rebelde y cada día hace que piense más en ella sin ningún motivo, me hace gracia como es, como se mete conmigo, me encanta chincharla y ver como arruga la nariz cuando odia algo. Me encantó su beso, ¿estoy traicionando de alguna manera a Mary?.

Mis párpados se van cerrando con lentitud, solo puedo ver el rostro de Abi riendo a carcajadas por algún insulto que me ha dedicado y a Mary con esa sonrisa tan dulce que me engatusó hace años.

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Abi

Luke me despertó, es increíble que haya estado durmiendo un día entero. Harper ordena sus cosas para el día de hoy y yo me desperezo lentamente sin ganas algunas de ir a clases.

—Buenos días Abi durmiente.—dice Harper y se ríe ante su comentario.

—Hola Harper.

—En el almuerzo me tienes que contar todo lo que ocurrió en Miami.—me guiña un ojo.

Ay madre, ¿ya se enteró? Pero ¿cómo?.

—Claro que si guapi.—reí muy fuerte.

—Vamos a desayunar levantate dormilona.—Harper quitó las sábanas de mi cuerpo y comenzó a tirar de mi.

—¡No! ¡ni se te ocurra!.—grite pero ya era tarde, ya estaba en el frío suelo de madera siendo arrastrada por la habitación.—¡Harper!.

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La cafetería estaba llena como lo más normal, pedí mi plato del día que se trataba de arroz a la cubana y me senté junto a Harper y a Ian. A lo lejos pude divisar a Max, estaba con Leo y las tres odiosas fresas. James estaba con la rubia y el moreno que resultaron ser auténticos fans de mis bromas, y también con Megan.

—¿Y cómo ha estado Miami?.—me pregunta Ian.

—El peor finde de la historia.

—¿Por?.—pregunta ahora Harper.

Bueno, mi padre me obligó a fingir una relación simplemente porque no le gustaría que las personas piensen que su hija de casi 18 años está sola, claro que no hice lo que él me ordenó y Max apareció en la fiesta y me llevó a la playa para besarme, luego casi matan a Michael que lo hizo para salvarme además y así los periodistas, no olvidemos a los periodistas, pues que no tienen vida, inventaron miles de cosas FALSAS.