La hija de Josh Miller®| Terminada✔

Capítulo 40.-Entrevista por sorpresa.

Llegar a clase me sienta super mal, ahora tengo ganas de vomitar con solo oler a libros. Sí, soy especial.

Unas manos agarran mi cintura fuertemente cuando estoy a punto de llegar a mi mesa. Observo las dos manos y enseguida me dan la vuelta.

Como no, Max.

Agacha su cabeza para rozar su nariz con la mía y sonrío inconscientemente. Todos empiezan a hacer unos sonidos extraños y obviamente no me quedo callada.

—¿¡Se les perdió algo!?.—me giro para mirarlos mientras Max solo se encarga de engancharse a mi como un koala a mi.

Roza su nariz con mi cuello y en cuestión de segundos a escondido su rostro en mi cuello, tendrá complejo de oso y creerá que puede invernar en mi cuello, no sé.

Pero me encanta.

Me encanta lo cariñoso y empalagoso que se ha despertado, nadie, y repito, nadie, nunca me ha querido tanto ni me ha mostrado el mínimo cariño.

—Meterse en vuestras vidas inútiles.—ahora habla Max.

—¡Max!.—un grito pelado y demasiado agudo suena por toda la estancia.

Max y yo nos giramos y vemos a Amanda, junto con los libros tirados por el suelo y su bolso.

—¿Q-Qué es esto?.—pregunta ofendida.

—Una clase.—respondo y todos rien.

—Tú te callas estúpida.—entrecierra los párpados y comienza a echarme maldiciones.

—¿Qué me dijiste?.—voy a avanzar para meterle una buena hostia cuando Max me frena sujetando mi brazo.

—Ven conmigo Max, esto hay que hablarlo.—Amanda se dirige hacia la puerta lo que no sabe es que nadie le sigue.—¿Max?.—se gira de nuevo.

La perra vestida de rosa está siendo humillada chicos.

—Déjame en paz.—dice Max.

—Lo hablaré con Bob.—saca su celular y Max se aproxima a su lado corriendo.

—Está bien, hablemos.—los orificios de su nariz están relamente abiertos, parece enojado.

En cambio yo, estoy decepcionada.

—Así me gusta.—sonríe victoriosa.

—Volveré.—se acerca a mi, coge mi rostro con sus dos manos y me besa.

—¿Vale?.—digo confusa.

—Amiga, ese triángulo amoroso no te interesa.—dice un chico negro del fondo.

—¡Cállate!.—digo mientras le tiro una bolita de papel que hay en el suelo.

—0—

Al salir de la primera clase, miro por todos lados a ver si encuentro a Max. Mientras Harper me cuenta algo sobre como los átomos se unen. En serio, mi mejor amiga a veces llega a ser muy aburrida.

De fondo veo a Bob, el padre de Max, pero no lo veo a él a su lado ni a la perra rosa.

¿DÓNDE MIERDA TE HAS METIDO MAX?

Una mano se posa en mi hombro izquierdo y me hace dar media vuelta sobre mis talones.

Max.

—¿Dónde estabas?.—pregunto enojada.

—Arreglando las cosas con Amanda.

—¿Una clase entera?.—me cruzo de brazos y alzo una ceja.