La hija de Josh Miller®| Terminada✔

Capítulo 52.-No me olvides.

Me desperezo por las sábanas, abro mis ojos con facilidad y me quedo contemplando el techo por un momento.

Y pensar, que en pocas horas estaré saliendo de éste internado para siempre y no será con mi mejor amiga.

Tendré un verano entero para mi solita para pensar que diablos quiero hacer con mi vida.

Aparto las sábanas de mi cuerpo y me dispongo a vestirme, en pocas horas será la graduación y aún tengo la mala cara de por las mañanas.

Si Harper estuviera aquí ya estaría lista, pero claro...

Pongo Confident de Demi Lovato y mientras bailo y hago un poco la payasa me visto.

Llego al espejo para peinarme por última vez, entonces me observo, tengo el sombrero de graduado en mi mano y lentamente sin apartar la vista de mi me lo pongo.

Contemplo mi rostro, mi cuerpo, a mi. He llegado a lo que un día creí imposible, estoy a dos pasos de graduarme y haber cambiado mi destino totalmente.

—Abi, eres una grande.—me digo a mi misma sonriendo orgullosa.

Muerdo el labio inferior indecisa, han pasado tantas cosas, he hecho tantas cosas, he intentado huir de ésto cuando en verdad, sin darme cuenta, ha sido el mejor hogar de todos.

Llaman a la puerta y en unos segundos se abre enseguida.

—¡Abi y Harper! ¡Vamos tarde chicas!.—la voz de Kris llega a mis oídos.

Salgo del baño y entonces me encuentro a la prima de Harper a su lado. Retrocedo rápidamente y cojo mi cepillo para tirarselo a la cara.

—¡Zorra!.—le digo mientras le tiro el cepillo.—Harper no está.

—¡Oye!.—se queja.—¡Mi maquillaje!.

—Tranquila, no es que te haya tapado mucho lo fea que eres.—le sonrío y la aparto para salir de mi habitación.

—0—

Estamos todos sentados en las sillas, mientras comienzan a nombrar chicos y chicas.

Max está en la otra parte y no dejamos de mirarnos, muerdo mi labio inferior cada vez que lo miro y aparto la mirada enseguida, pero luego vuelvo a caer.

—Maximiliano Stone.—anuncia la directora y no puedo evitar reírme.

A él le nace una sonrisa de pronto.

—Bueno, he de confesar, que desde que estoy aquí, que es desde los 8 años, no he podido pasar el mejor año de mi vida.—comienza.—he hecho amigos increíbles y diferentes a lo que se supone que era mi "estatus".—hace comilla con sus dedos.—he descubierto mil maneras nuevas de divertirme, y he conocido a alguien muy especial que me ha marcado para siempre y que no olvidaré jamás.—me mira y me pierdo en sus ojos mientras que él hace lo mismo que yo.

—Bueno Max, gracias por todo.—la directora corta nuestra conexión a través de miradas.

—Mi hijo Ian.—dice ésta con una sonrisa y Max baja del escenario.

—Bueno, ¿cómo empiezo?.—dice y aclara su garganta.—mirar, iré al grano, soy gay.—la madre pone cara de horror al instante.—esto va para los antiguos del siglo XVIII por ejemplo, soy una persona igual que todos, he sacado materia de honor, he superado mi miedo y he salido del armario llevándome una buena sorpresa de ser bienvenido, he tenido a unas  mejores amigas increíbles que me han ayudado a hacerlo, aunque por desgracia una no vaya a estar este día. He dejado de ser un nerd, porque maravillosamente desde que llego una persona los grupos sociales dejaron de existir, y Abi, te debo la vida en serio, has cambiado todo lo que había aquí dentro, le has dado mil vueltas y has hecho que todos salgamos con una sonrisa de aquí, así que, este gay de aquí se va orgulloso de ser gay, lo siento mamá.