Cuando te perdí

Verano (V)

Rosie

Mi visión todavía es algo borrosa y cada vez que intento levantarme la habitación comienza a dar vueltas. Me siento tan culpable de hacerlos pasar por esto, como si todos no tuvieran ya suficiente para que yo añada mas a la pila.

-Rosie, ¿eres diabética o hipoglucémica?- pregunta el doctor, mientras toma mi presión arterial y toma mi pulso nuevamente

-no- respondo, siento la garganta seca y un ardor espantoso en la boca del estomago

Me mira, su rostro sin expresión -¿está embarazada?- pregunta con indiferencia profesional

En el momento en que mi cerebro procesa la pregunta la bilis sube por mi garganta y el pánico me ahoga

-No- mi cerebro hecho papilla

-¿estas segura?- pregunta el doctor con un rastro de incredulidad

-si- respondo, el pánico llenando mi boca –tuve mi último periodo hace una semana

-¿tu ciclo es regular?-

Asiento porque de repente hablar se siente como algo extremadamente difícil

-muy bien, pero de todos modos quiero hacer un prueba, solo para estar seguros- hurga un poco entre las cosas en su maletín –por el momento solo te pondré una intravenosa y suero ¿está bien?

-muy... bi... bien- tartamudeo

El doctor agarra mi mano y la examina, da uno golpecitos en el dorso de mi mano y cuando está satisfecho frota un algodón mojado en alcohol sobre la zona, luego inserta la aguja y veo como penetra a través de mi piel y se hunde en mi carne pero no siento el típico pinchazo de dolor.

El doctor termina de ponerme la intravenosa y la conecta a una manguera que transporta un líquido de una bolsa a mi brazo, quita uno de los cuadros colgados en la pared y cuelga la bolsa en su lugar. 

Esta es una habitación idéntica a la de Shawn, solo que huele a viejo o ha guardado, como si nadie durmiera aquí o utilizara esta habitación a menudo. Las sabanas son de color verde oliva, el escritorio libre de papeles o cualquier otro objeto con excepción de una lámpara en la esquina, varios posters de bandas de rock decorando las paredes pero eso es todo, si no fuera por eso se podría decir que esta habitación no ha pertenecido a nadie.

-Descansa mientras voy a hablar con los Archer y cuando sientas ganas de ir al baño utilizas uno de estos- me pasa una prueba de embarazo, un pequeño trozo de papel cuyo color puede traer mas caos a mi vida -solo tienes que...-

-se cómo usar una prueba de embarazo- digo bruscamente

Alza las cejas -quiero decir, no he usado una antes, pero son aprueba de tontos, no es ciencia espacial-

Sonríe, pero no es una sonrisa real -muy bien, descansa otro poco y luego utilizas la prueba. Volveré después de hablar con ellos- se levanta y empieza a marcharse

-¡Espere!- digo en voz alta y urgente, se gira para mirarme, con la mano en el pomo de la puerta -no les diga de la prueba de embarazo- miro hacia otro lado, Shawn y yo fuimos cuidadosos y estoy segura de que no estoy embarazada, pero... -sería demasiado- digo en un susurro

-no lo hare- dice y luego sale de la habitación

Miro al techo

Esto es un desastre, yo soy un desastre.

Tomo varias respiraciones profundas e intento levantarme, me siento a la orilla de la cama y apoyo mis pies en el suelo y me levanto lentamente, espero que me den nauseas pero no sucede, así que tomo la bolsa de suero o lo que sea y con pasos temblorosos me dirijo al baño.

Me las arreglo para colgar la bolsa en el toallero mientras uso el inodoro y la prueba, jalo la cadena y me subo las bragas. Empiezo a buscar por pelusas inexistentes en mi vestido mientras espero y aunque estoy casi 90 por ciento segura, todavía hay otro 10 por ciento que me hace dudar y ese 10 por ciento va a hacer de los próximos 3 o 5 minutos, una tortura.