[One_Shots] Miraculous Ladybug: Lemon.

[One-Shot] Hasta contigo (Pareja: LordChat)

Este es un Oneshot Yaoi. Si no te gusta el genero o la pareja, simplemente no lo leas.

-No he cogido por más de un mes- El rubio miró sorprendido y algo confundido a su compañero de batallas -¿Y?- -Es algo frustante- -Supongo, pero ¿Por qué me lo dices a mí?- -No lo sé, tal vez sea porque mi mejor amigo no se encuentra en la cuidad y no tengo con quien desahogarme- Dijo con indiferencia el chico pelinegro con el traje rojo de lunares. Eso lo explicaba, Lordbug nunca hablaba con él, nada que no fuera estritamente relacionado con su labor como heroes de París, nada de familia, amigos, ni relaciones; en resumen, su vida privada. -¿Y a qué se debe la abstinencia?- -Termine con mi novia hace un mes porque descubri que me mintio sobre un trabajo que tenía, sólo para irse a acostar con un tipo al que me cae mal- -Ohh, eso es muy malo- -Seee, no me importa que se acueste con otro, lo que me molesto fue que me mintiera- -¡¿Eh?!- El rubio miró con mayor confusión a que traía el traje rojo -¿Es enserio?- -Sí, y fue una ruptura inmediata, sin sexo de despedida- El rubio levantó un poco sus cejas al ver a su compañero y dijo a tono de burla -Debe ser horrible- -Lo es, en este punto lo haría hasta contigo-

Eso sí lo había dejado sin palabras. El pelinegro veía que repentinamente el color de su felino amigo cambiaba, e intentando ayudarlo se acercó haciendo que reaccionara en ese instante y cayera de espalda intentando recobrarse lo más rápido posible -¿Eres gay?- -¿Ehhh?- -No, no, quise decir ¿No eres heterosexual?- -¿Quién lo es hoy en día?- -Yo- Ahora era el rostro del pelinegro mostraba sorpresa -¿Es en serio?- -Eh, sí- Contestó el rubio con sintiendo un poco de vergüenza ante su propia respuesta. No comprendia el porqué, pero haberle respondido eso lo hacía sentir incomodo, un aire de tensión se había formado entre los dos, o al menos así lo sentía él. -Oh, bueno, entiendo- -¡Pero eso no significa que no haya sentido curiosidad!- Se apresuró a contestar el rubio sin razón alguna. El pelinegro vio la presión reflejada en el  rostro del rubio sintiendo la necesidad de tranquilizarlo diciendo con una sonrisa -Está bien, entiendo, son tus preferencias, no ocupas mentir para hacerme sentir bien. Lo entiendo, en serio- El rubio sintio la calida mano de Lordbug sobre su hombro tratando de tranquilizarlo, no sólo esa vez, lo hacía siempre. Siempre estaba al tanto de todo lo que estaba ocurriendo, siempre sabía que hacer y que decir, y siempre estaba ahí para ayudarlo -No estoy mintiendo, a veces me he preguntado como sería hacerlo con otro hombre, pero me daba vergüenza preguntarle a alguien- El pelinegro tomó entre sus manos la barbilla del nervioso rubio y con expresión seria junto a una mirada dulce, le preguntó -¿Estás seguro?- -No, pero lo quiero intentar- -¿Por?- -Porque creo que me gustas-

El pelinegro jaló la cabeza del rubio para besarlo con delicadeza en sus labios. Este cerró sus ojos para después abrir su boca y dejar entrar la lengua de su compañero. La habilidad con la que el pelinegro se movía dentro de su boca dejaba encantado al rubio. Cuando sus bocas se separaron, Lordbug le dijo al oído -Normalmente te rechazaría de la forma más sensible posible, pero ahora de verdad quiero cogerme algo- y lo volvio a besar con más fuerza. Las manos del pelinegro pasaron a las orejas reales del heroe felino. Los delicados toques del heroe de rojo le daban calidas descargas que lentamente recorrían todo su cuerpo. Sus movimentos eran lentos, dandole la oportunidad de sentir la calides recorrerlo antes de generar una nueva. El rubio se degustaba con las nuevas sensaciones que estaba descubriendo, los labios de su compañero y esos suaves toques. Lordbug abandonó su boca, no sin antes morderle el labio y lamberle la barbilla -¿Y? ¿Qué tal?- -No lo sé- -¿En serio quieres hacerlo?- -Pensé que estabas desesperado- -Desesperado o no, nadie debería ser forzado a hacer algo, menos algo como esto- El rubio miró la expresión seria que tenía su compañero. Adoraba su expresión seria. Si lo pensaba más, prodría arrepentirse. Tenía que ser en ese momento o no lo haría nunca.

Chat abrazó con fuerza el cuello del rojo héroe y abrió su boca para besarlo. El pelinegro, primero, miró sorprendido la acción del gato. Al poco tiempo, respondió con normalidad el beso de su compañero. Las lenguas de los dos intentaban dominar a la otra. Ninguno de los dos estaba dispuesto a ser el sumiso; sin embargo, la poca experiencia en el campo obligó al rubio a someterse a la voluntad del héroe de rojo. Sin detener el beso, el rubio sintió que poco a poco estaba quedando debajo del el pelinegro, estaba perdiendo el control. Nunca se había sentido tan vulnerable, hasta el momento que Lordbug le succionaba el alma por medio de besos. -Es injusto- Murmuró el gato entre los espacios para tomar aire. Lordbug alejó su cara del rubio sosteniéndose del hombro de su compañero le empezó a bajar el cierre de su traje a la vez que le decía -La vida no es justa, y yo no pienso permitir que sea un inexperto el que me dirija- Al ver que no tenía palabras para responder su opinión, el pelinegro introdujo su mano en el pantalón del rubio y buscó su miembro para masajearlo con su mano. El rubio soltó un pequeño quejido que le indicó al pelinegro que su obra estaba teniendo éxito.

Jadeaba sin parar, el sudor estaba cubriendo su cuerpo y su cadera respondía a la voluntad del pelinegro que jalaba su miembro como si se tratara de una manija resbaladiza. Lo estaba disfrutando, podía verlo en su rostro; tenía una expresión sonriente, una sonrisa de diversión que no perdía, y que no perdió incluso cuando dejó de jalar su miembro. El rubio sintió que el aire intentaba regresar a él sin éxito, necesitaba respirar; aun así, le estaba encantando. Mientras Chat trataba de calmarse, las manos del pelinegro sujetaron su cadera y al voltear a verlo, el gato se dio cuenta que su compañero se había bajado su pantalón -Todavía estás a tiempo de arrepentirte- El rubio tragó saliva y cerró sus ojos con fuerza, el rojo héroe interpretó esa acción como el permiso para continuar y lo penetró. Un quejido salió del rubio que se mordía los labios. El pelinegro volvió a tomar el miembro de su compañero empezó a masajearlo para ablandarlo. Al ver que la expresión del rubio se suavizaba, Lordbug inicio con el movimiento de su penetración. Chat volvió a morderse los labios con fuerza, quería sacarse la sangre con sus dientes; pon un lado, sentía que le querían sacar su miembro, y por otro, sentía que lo estaban perforando. Algo tenía que salir, pero tenía que salir ya, el pelinegro sintió que  el ritmo se aceleraba y  se agachó para recibir placer del rubio.

-Viejo, ¿Estás bien?- Preguntó el moreno a su amigo -Sí, ¿Por qué?- -Parece que no pudieras caminar- El rostro del rubio tomó un tono casi imperceptible de rojo mientras recordaba lo que había hecho la noche pasada con su alter ego. Tratando de evitar que su amigo notara ese cambio, se apresuró a ingresar a su salón, topándose con una incómoda pelea -¡¡No pienso volver contigo!!- -Pero, Marin. Ya te dije que lo siento, ya ha pasado un mes, perdóname- -¡¡No me importa!! ¡Me mentiste! Nada me asegura que no me volverás a mentir ¡O que no me estás mintiendo ahora!- La discusión de la "pareja" se detuvo cuando los dos se dieron cuenta que el rubio había entrado. El chico se giró hacia la que le suplicaba y con voz seria le dijo -No pienso discutir más contigo, Lila- Y se dirigió a su lugar en silencio. La chica más molesta que triste hizo lo mismo. El rubio tratando de aligerar la tensión le preguntó al pelinegro -Oye, no vi a Al ayer, Nino y yo nos preguntábamos si no va ayudarnos con el proyecto de química- -No creo, se fue de viaje con su familia. Creo que a Sudamérica o algo así- -Entonces tu mejor amigo no está- Dijo el rubio mientras se sentaba frente a su compañero- -Ni me lo recuerdes-