El Raro del Tercer Piso (ED SHEERAN)

Parte 17

Primer día de clases.

Sé que a muchos estudiantes les pasa lo mismo, cuando están en el colegio ya quieren salir de vacaciones, y cuando están en sus vacaciones ya quieren regresar al colegio. Bueno, pues a mí no me pasa eso. Cuando estoy en el colegio ya quiero salir de vacaciones, y cuando estoy de vacaciones quiero que sean eternas.

Llegué tarde a clases, aunque realmente no importaba, ya que era el primer día y no hacíamos nada importante. Llegué tarde porque había olvidado que las clases comenzaban hoy.

Lo primero que hice al llegar fue ubicar mi aula. Una vez que lo hice entré y busqué un asiento. Todos mis compañeros ya estaban ahí, así que solo me quedaba un asiento al fondo. Al lado de un chico nuevo que no conocía. Pero antes de que pueda sentarme, muchos fijaron su mirada en mí, lo cual es muy raro ya que suelo pasar desapercibida. Intenté ignorarlos, pero en ese momento una chica se paró en frente de mí.

- Tú eres la chica de YouTube - afirmó emocionada

- ¿Eskiusmi?

- Sí, tú, la vecina del chico pelirrojo. Todos vimos el vídeo y nos suscribimos a su canal.

- ¿Qué canal? No entiendo.

- Ese que se llama "La dama y el vagabundo pelirrojo" - entonces recordé el vídeo que hice con Ed - ¡Ya suban un vídeo, hace tiempo que no lo hacen!

- ¿Cómo se enteraron? Hay muchos vídeos en YouTube

- ¿Acaso vives bajo una roca? Salió en un reportaje del canal 121, uno sobre youtubers nacionales.

¡¿Qué?! Asentí levemente mientras me dirigía a mi asiento procesando todo lo que me dijo. Aguardé ahí a que el profesor llegara. El chico que estaba a mi lado me miraba de reojo, pero yo no le hice caso. Escuchaba sus conversaciones con disimulo, nos nombraban a mí y a Ed. "Yo creo que Ed es lindo" decía una "¡No! No es lindo" decía otra "¿Sí Julieta llega a ser una youtuber reconocida vamos a ser buenas con ella?" Y entonces decidí dejar de escucharlas.

Luego de unos minutos la maestra llegó, justo el lunes a primera hora llegaba el hermoso y relajarte curso de matemática. ¿Y luego por qué odiamos los lunes? La maestra Juanita nos dio una lista de lo que necesitaremos por el resto del año, otra lista de las capacidades que evalúa y luego se fue con la excusa de que le dolía la cabeza. Primer día de clases y ya usaba esa vieja mentira. ¿Qué iba a usar a medio año? ¿Qué le dio un paro respiratorio? ¿Y a fin de año? ¿Qué la presión se le subió a 300 y tuvo que irse lo más rápido que pudo o iba a morir?

Los demás profesores me cayeron bien, creo que será fácil tratarlos. A la hora del receso fui a comprar un sándwich de queso con jamón y un jugo de pera. Las mesas estaban ocupadas así que decidí ir a las tribunas del patio de fútbol, pero antes de que pusiera un pie afuera llegaron mis compañeras para invitarme a comer con ellas. Yo las rechacé amablemente y fui a comer a las tribunas. Allí encontré al chico nuevo. Como no quería hablar con él, me senté en la tribuna opuesta.

Luego volvimos al salón y estuvimos tranquilos las últimas horas. Al final de la jornada recogí mis cosas en silencio mientras los demás lo hacían conversando y gritando. No me molesta para nada que mis compañeros me ignoren, la verdad es que no quiero hablar con ellos, esa plebe no merece que le dirija la palabra alguien como yo.

Al final puse la mochila sobre mis hombros, decidida a irme de ese lugar, pero el chico nuevo me detuvo.

- Hola, mi nombre es Javier, - extendió su mano, yo la tomé en un gesto de saludo - esperaba que tú me hablaras primero - ¿por qué haría eso? - Ya sabes, como soy el nuevo, creí que te ofrecerías a mostrarme el colegio - siempre nos dan un folleto con un croquis de la distribución del colegio - Quizá después podamos hablar - ¿por qué seguía sujetando mi mano? - O quizá pueda acompañarte a tu casa