Siempre a tu lado

Capítulo 21: Comemos entre lios amorosos

Narra Sam:

Cuando llegó la hora de comer, Félix y yo bajamos a la cafetería, y allí estaban Taylor y Vivi. Era la primera vez que veía que Vivi allí.

-¿Que haces aquí?- Pregunto Félix.

-He acompañado a Taylor. Yo me vuelvo ya para mi habitación.-

-¡Noooo!- Dijo Taylor.- Quédate y come algo.-

-Taylor...-

-Hazlo por mi.- Dijo poniendo ojos de cachorrito.

-Vaaleee...- Dijo tras unos segundos a regañadientes.

-¿Es una broma?- Dije yo.- Llevamos casi una semana intentando que comas algo.-

-Por que no paso hambre.-

-Pero yo si.- Dijo Taylor.-Vamos a comer.-

Taylor agarró como pudo a Vivi y las muletas y entro como pudo en la cafetería.

-¿Puedes caminar?- Le pregunté a Taylor.

-Si, si.-

Cogimos la comida y nos sentamos los cuatro en la mesa. Hoy teníamos pasta carbonara y tarta de manzana. Bueno, yo tarta no, por eso del azúcar, pero pastillas si. La pasta estaba deliciosa, pero Vivi comió muy poco.

-¿No te gusta?- Le pregunto Félix.- Está delicioso.-

-Ya, pero no tengo mucha hambre.-

-Hacemos una cosa: Te comes la pasta y yo me termino tu tarta.- Dijo Taylor.

-Esta bien.- Taylor sonrió orgulloso.

Al cabo de un rato, vi como Mike entraba a la cafetería. Solía venir de vez en cuando a tomar un café. Cuando le vi, le saludé y él me sonrió y me devolvió el saludo. Cuando volví a mirar vi a Taylor sonriendo y completamente roja.

-¿Taylor, estás bien?-

-Perfectamente.- Comió un poco de tarta.-¿Quien es ese?- Pregunto con la boca llena de tarta.

-Es mi médico.-

-¿¡Tu medico!?- Escupió un poco de tarta.

-Si.- Dije quitándome un poco de tarta de la mejilla.

-Lo siento mucho.- Dijo avergonzada.

En ese momento, sentí una mano en el hombro y cuando mire, vi a Mike.

-Hola, Sam. ¿Que tal la comida?-

-Bien, gracias.-

-Ella es Taylor.- Interrumpió Vivi- La del accidente de moto.

-¡Vivi!-

-Hombre, no es el primer accidente de moto que veo. Aunque, es el primero del que tanto me alegro de que haya salido bien.- Le guiño un ojo a Taylor.

-Gracias.- Dijo Taylor sonriendo.

-Nos vemos luego chicos. Ya nos veremos, Taylor.- Sonrió.

En cuanto Mike se marchó, mire a Taylor, estaba rojisima, y Vivi y Félix se rieron mirando a Taylor.

-¿Que pasa?- Pregunté.

-Vaya, vaya con el doctor...- Dijo Vivi.

-¿Que pasa?- Volví a preguntar.

-Sam, eres demasiado pequeño para entenderlo.- Dijo Félix.

-¡¡Tengo 16 años!! ¡Soy un adolescente!- Me queje.- No soy un niño.-

-Esto es más cosa de adultos.- Dijo Vivi.

-Pues no es justo. Félix no es adulto.-

-Pero tengo mentalidad de un adulto.-

-Sigue sin ser justo.- Me cruce de brazos.

-Tranquilo Sam, si no pasa nada.- Dijo  Taylor.

-Que le gusta Mike.- Salto Vivi.

-Ala la otra...- Dijo Félix.- No tienes nada de tacto.-

-Para que andarse con rodeos.- Se rió.

-¿Es verdad Taylor?- Pregunté curioso.

-Es posible, muy posible...-

-¿Quieres que te ayude?- Pregunté emocionado.

-No. Necesito... tiempo. Nada más.-

-Si necesitas ayuda pídemelo, que es mi médico.-

-Vale.- Se rió.

-Además, se más de amores de lo que creéis.-

-¿A si?- Pregunto Vivi.

-Claro, una enfermera...-

-¡Félix!- Se rió.- ¿Dejamos el tema ya?-

Cuando dejaron de reírse, nos levantamos y volvimos a nuestros cuartos y Félix se vino conmigo.