Siempre a tu lado

Capítulo 26: Hago de casamentero sin darme cuenta

Narra Sam:

El volver a sentir el viento en mi cara fue fantástico, y pocos segundos después de hacer la promesa con Kyle, empecé a imaginar cómo sería volver a revivir todo aquello.

Cuando entramos de nuevo, vi como Vivi, Félix y Taylor venían hacia nosotros. Taylor iba la primera, y la verdad, era la primera vez que veía a alguien en muletas correr tan rápido.

-¡Sam te voy a matar!- Grito al acercarse.

Instintivamente solté un grito, que en ese momento sonó completamente ridículo, y me puse detrás de Kyle.

-¿Que ha pasado?- Pregunto Kyle.

-Necesito hablar con Sam.-

-Has dicho que ibas a matarme.- Dije asomando la cabeza por detrás de la espalda de Félix.

-Sal de ahí, anda.-

Kyle se apartó y yo di un paso adelante hacia Taylor un poco asustado.

-¡Gracias Sam!- Dijo abrazándome.- ¡Muchísimas gracias!-

Me quedé mirando a Félix y a Vivi, los cuales me miraban sorprendidos, al igual que yo a ellos.

-Eh... de nada. ¿Que he echo?- Dije cuando nos separamos

-Como si no lo supieras.-

-No, enserio. No tengo ni la más remota idea de lo que he hecho. ¿Es algo malo?-

-No, pero, ¿Como puedes no saberlo?-

-Cuéntame que he hecho, por favor.-

-Estoy yendo a rehabilitación por el accidente.- Dijo un tanto confusa.

-¿Y yo tengo la culpa de eso?- La interrumpir.

-Déjame terminar. El caso es que debía de tener rehabilitación con el doctor Brown, pero al parecer está de baja por paternidad y estoy haciendo rehabilitación con Mike.-

-Te juro que no tengo nada que ver con el bebé del doctor Brown.- Dije y al instante me di cuenta de lo estúpido que había sonado y me di cuenta de lo que quería decir de verdad.- ¿Con Mike?-

-Si.- Dijo sonriente.

-Tenias que haberla visto cuando hemos ido a buscarla. Parecía que tenía la cara llena de tomate.- Dijo Vivi entre risas.

-¡Vivi!- Grito Taylor.

-Es la verdad.- Dijo Vivi.

-¿Sabéis cual es otra verdad?- Interrumpió Félix.- Mi hambre. Es muy real en estos momentos.

Entonces entramos en la cafetería. Esa noche había pescado con patatas para cenar. No soy muy fan del pescado, así que hice lo que hacía siempre que había pescado: Le di mi parte de pescado a Félix y el me dio la mitad de sus patatas.

-Luego la escrupulosa con la comida soy yo.- Dijo Vivi.

-No me gusta el pescado.-

-A mi me viene bien que no le guste.- Dijo Félix con la boca llena.

-Félix que asco.- Dijo Taylor.- Cierra la boca, guarro.-

-No se cuánto tiempo llevan haciendo eso.- Dijo Kyle.

-Da igual, me alimento bien.- Dije yo.

-Y yo.- Añadió Félix.

Cuando terminamos de cenar, íbamos a salir de la cafetería, pero, Taylor aparto la mirada un segundo del frente, lo que provocó que cuando volvió a mirar, se choco con Mike.

-¿Estas bien?- pregunto él.

-S-si.-Dijo ella nerviosa.- Lo siento.-

-No pasa nada.- Dijo ayudándola a levantarse.- Errar es humano.-

-Espero no caerme así en la rehabilitación el próximo día.- Dijo riéndose muy nerviosa.

-Tranquila, si vuelves a tropezar, yo estaré allí para cogerte.-

Mike es uno de esos hombres de los que quedan pocos. Aquello que le dijo a Taylor fue precioso, digno de una película romántica.

-Bueno, voy a dejar que os valláis a descansar.- Dijo Mike.- Supongo que estaréis cansados.-

Después, nos despedimos de Mike y de Kyle y nos volvimos cada uno a nuestros cuartos, la verdad es que estaba muerto de cansancio.