Alguien se movía, la cama se movía.
Abrí los ojos y me encontré con un Kurtis un poco desarreglado, se alisaba el traje y se acomodaba el cabello- No te he querido despertar- Sonreí.
- No sabes bajar despacio
- No, no se por eso te pido una enorme disculpa
- No te preocupes pero ¿ Ya te sientes mejor?
- Contigo a mi lado los malestares se van- se acercó a mi, depositó un beso en mi frente y salió
- ¿ A donde vas?
- Al baño ¿ Quieres acompañarme?
- No, no quiero
- Eso pensé
Me sentía a gusto con el, no necesitaba otros cosa para estar de mejor ánimo que platicar con el y del que solo habíamos congeniado poco.
La puerta fue abierta de una forma violenta la vista tenía a mi hermana
- Hermanita ¿ Que tal tu cama?
- Muy cómoda gracias Renata
- ¿ Que hacías con Kurtis?
- Solo dormíamos
- Claro y yo solo dormía con Axel
- Te creo hermana te creo
- No te hagas la que no entiende Regina, sabes de lo que hablo
- Mira tu eres experta en quitarle todo - No es mi culpa que ellos baben por mi
- Les des motivos, sabes que Axel comenzaba a gustarme y te acostaste con el
- Sólo te lo advierto, sera la ultima y primera vez que que hago una advertencia. Alejate de Kurtis y de Axel, ellos me interesan y mucho
- No puede estar con dos a la vez
- Tu que sabes, yo siempre obtengo lo que quiero y lo sabes
- Has lo que bien te parezca yo sólo voy a dejar que las cosas fluyan
Bajé la mirada.
Renata salió de mi habitación y justamente Kurtis entró. - ¿ Que tienes?
- Nada
- No me ocultes las cosas
-¿ Renata se te hace muy atractiva?
Se sorprendió ante mi pregunta-¿ Por que me has preguntado eso?
- Sólo contesta con la verdad
- Pues si, es muy atractiva, se mueve de una forma provocativa y eso..
- Eso es algo que yo no hago
- Exacto pero es te hace muy distinta a ella
- ¿ Tendría caso ser como ella?
- No, Regina, no es necesario que trates de imitarla, tu eres hermosa por dentro y por fuera. Hasta yo me doy cuenta de eso- Se acercaba lentamente a mi, me tomó por los hombros, su cara se acercaba a mi, mi presión sanguínea se había disparado.
Mi corazón dejo de latir cuando me besó ¿ Que era lo que me pasaba?
¿ Porque me sentía así? No entendía nada pero mis manos fueron hasta su nuca y lo atrajeron mas a mi, su lengua estaba laxa y su labios me gustaban.
Mis manos descendieron hasta sus hombros, después a su pecho, poco a poco retiré el saco, me sacó la blusa, me costaba respirar, tal vez era por la advertencia de Renata pero no me importaba me gustaba sentir como tocaba mi piel. Un escalofrío me recorrió el cuerpo, una electricidad por mi espina dorsal y un pequeño gemido salió de mi, poco a poco le desabrochada la camisa.
Me tomó de los muslos, mis manos se posaron sobre sus hombros, enrede las piernas al rededor de su cintura, me empotró contra la pared, sus caricias eran constantes- Kurtis
- Mmm- estaba pegado a mi cuello.
- Nada.....- se deshizo de mi sostén
Estaba parcialmente expuesta ante el pero no me daba vergüenza al contrario, me gustaba, me excitaba su toque.
Las prendas volaron entre caricias y besos. Estábamos desnudos sobre el suelo,me estremecía su toque - ¿ Segura de que quieres esto?- su pregunta hizo que recordara la advertencia de Renata pero me daba igual, prefería a Kurtis que a Axel. Después de todo el era atento conmigo y tal vez estaba indecisa pero....no había peros lo quería y ya. Levante las caderas indicándole que si, que estaba segura. Me volvió a besar, lo sentía poco a poco, sentí un ligero dolor- Estas muy estrecha- jadeó
- Si....soy....- no pude terminar ya que me volvió a besar.
- Lo se- dijo agitado por aquel beso
De nuevo se movió un poco, eché la cabeza hacia atrás, me mordió la garganta. Sus brazos rodeaban fuertemente mi cintura. Y sólo dio un pequeño movimiento, lo tenia dentro de mi, el de rodillas y yo sobre su regazo. El era quien me movía, no pensaba, pero no quería hacerlo.
Sus embestidas eran firmes y muy controladas - Siento que ...perderé.... el....control.- dijo mientras entraba y salia de mi
- Pie....rde.....lo...ah!
Mi volvió a tocar el suelo, apoyó las manos en el suelo mi cabeza estaba entre ellas, continuó con lo que hacia.
Mis manos tomaron su mata de cabello y sin ninguna preocupación tiraba de el. Lo acercaba mas a mi, sentía nuestras carnes chocar. Mi cuerpo tenía vida propia, mi piel se erizaba, mis pezones estaban duros y disfrutaban de las atenciones que su lengua ma proporcionaba.
Saque fuerzas de donde no la tenia y lo dejé en el suelo. Mis labios repasaban su cuello, mordisqueaba su pecho, sus manos me apretaban la cintura, con ellas me elevaba, me hacía gemir, el....oh Kurtis..... gruñía cada vez que lo mordía.
El miembro de Kurtis se expandía dentro de mi interior. Mi feminidad se aferraba a el, al igual que mis uñas a sus firmes hombros.
Lo sentí vaciarse dentro de mi, nuestro clímax se fisionó con un grito por parte de los dos.
Caí sobre su pecho, nuestra respiración era una, agitada, el sudaba...yo sudaba.
El palpitar de su sexo aun podía sentirlo, sus enormes manos acariciar mi espalda - Ha sido...
- Magnifico- me interrumpió
- Aja
- Puede que estés a dolorida, lamento si no fui tan cuidadoso
- Kurtis... fue la mejor experiencia de mi vida
- Y la mía.... pero no se si pueda.
-¿ Poder que?
- Nada, cosas mías
Nos levantó del suelo y me dejó en la cama, comenzó a vestirse rápido, me estaba desconcertando -¿ He hecho algo malo?
- No he sido yo quien ha hecho algo malo, ni debí hacer esto, perdoname.
Salió de mi habitación ¿ Me había pedido perdón? ¿ Perdón por que?
¿ Hacer algo malo? por como lo había dicho hasta yo sentía que había cometido un error.
¿ Pero en verdad había sido un error?
Me había elevado, me había dado un placer demasiado hermoso pero así como me lo había dado, me lo había quitado.
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Vecino Yo También Se Jugar
JugendliteraturRegina y Renata son hermanas gemelas, ambas son totalmente distintas, sin embargo a Renata de vez en cuando le gusta jugar a intercambiar identidades. Todo cambia cuando llega Axel, su vecino del balcón de enfrente, Renata desata una batalla en co...