No Me Amenaces

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Después de que me he levantado con demasiada dificultad del suelo, estoy completamente segura de que debo tomar unas clases de karate o MMA estaría genial y así nadie me golpearía y yo terminaría llorando.
- Andrés deten a esa criatura- la madre de Andrés se ya ha preocupado por mi pero ahora sólo deseo llagar a casa y llorar del dolor y los golpes que Azucena me ha propinado.
- Espera ‘ criatura de señor ’
- Dejame en paz Andrés
- Pero estas mal
- No me importa ya casi llego a mi casa
- Vamos deja que te cargue
- No, ni se te ocurra tocarme
- ¿ Si lo hago que?
- Ya dejame
Con las pocas fuerzas que tengo corro hasta mi edificio, entro con mucha prisa. Llamo ascensor y entro, solo lo veo hasta que se cierra el elevador.
Me siento en completa paz cuando llego a mi casa, respiro un poco antes de abrir.
No deseo encontrarme con otra escena erótica que tal vez me produzca algo, pero al abrir me siento con tanta tranquilidad ya que no hay nadie, solo la comodidad de mi bello hogar- Espera criatura- Andrés viene por las escaleras, entro a casa y cierro la puerta. Corro hasta mi habitación, cierro la puerta me tiro a la cama, me duelen las costillas, la cara, se que he sangrado y que la comisura de mi boca mañana estará morada.
- Pequeña abre esa puerta
- Que me dejes en completa paz Andrés adiós
- Buscaré la forma de entrar
- Estoy desnuda- es lo único que logro decir
- No importa
- Si, si importa
Camino por la habitación como un león enjaulado, una y otra vez hasta que por fin escucho paz.
Me relajo y esta vez si comienzo a desnudarme, pronto obscurecerá y necesito con ansias descansar.
He terminado de desvestirme, rebusco entre mi closet- Ya esta- volteo asustada, jalo lo primero que puedo y trato de cubrirme- Lo lamento
- Kurtis ¿ Que haces?
- Tu amigo me pidió que le ayudara a abrir la puerta
-  No es mi amigo ¿ Dónde esta?
- Esta en el baño, sal de aquí y deja de verme
- Mmm, no se, no debería dejarte sola con tu amigo
- Cierra la puerta
- Vale- cierra la puerta y me mira
- Sal de aquí y cierra la puerta
- No, tal vez me quede aquí, además no lo se otra ronda de sexo no me caería mal
- Renata está aya afuera así que ve con ella y dejame en paz - me volteo y busco un camisón.- Aquí está- me lo pongo y vuelvo a verlo
- ¿ Te he dicho lo hermosa que eres ?
- No pero me lo han dicho varias gracias- paso de largo y salgo de mi habitación.
Voy hasta el baño, entro y cierro con demasiada urgencia, me siento acorralada, de ser el león ahora me siento una gacela huyendo por su vida, me quito el camisón.
Entro rápido a la regadera, comienzo a bañarme con alegría- Un paracetamol.....si eso debo tomar- digo bajo la lluvia, eso es lo que necesito, solo un paracetamol para poder dormir en paz y sin dolor.
Me he terminado de duchar, me seco el cuerpo, camino hasta el espejo y me miro, se ve un poco morado- Regina enserio debes tomar clases de MMA, de lo contrario te seguirán ganando- busco en el estante y saco una caja de paracetamol junto con una pomada de árnica.
Me duele solo un poco pero me la unto, mañana estaré bien, muy bien o eso es lo que creó ahora sólo ruego que no haya nadie afuera cuando salga de este baño, de lo contrario puede que salga corriendo a donde sea y eso no seria nada bueno.
Mi tranquilidad aumenta cuando veo que todo esta vacío, sonrío y con seguridad abro la puerta- Vamos a hablar Regina- trago en seco al ver a mi hermana en mi habitación
- No tengo nada de que hablar contigo Renata, sólo deseo dormir, me duele el cuerpo ....
- No se por que
- No es lo que crees, no son...
- No tienes que darme ninguna explicación
- ¿ Que es lo que quieres?
- No se que te traigas con Kurtis pero es mío ya te lo he dicho
- Aja
- En cuanto a Axel.... Dejaré que te diviertas un poco, solo un poco
- Gracias me siento mas tranquila ahora podré ir a mi cita con el
- ¿ Cita?
- Olvidalo
- Ellos son mios eso debes saberlo y valla que puedo estar con los dos, pero si tu te sigues interponiendo o si intentas quitarme a uno de los dos buscaré la forma de quitarte de en medio
- No me amenaces Renata, no te tengo miedo, no lograrás amedrentarme
- No es amenaza, esa segunda advertencia que te hago.
Yo siempre consigo lo que quiero sea como sea, cueste lo que cueste, por todos los medios
- No me da miedo es mas yo también puedo jugar contigo ¿ quieres?
- No podrías Regina yo carezco de algo que tu tienes y eso lo sabemos ambas
- No se cuantos escrúpulos has perdido pero no me importa yo no los perderé, mi conciencia estará aquí para ayudarme
- Vamos a ver quien cumple sus amenazas primero
- Yo no juego así de sucio.....por cierto la novia de Axel quiere verte, dijo que era para algunos consejos, puedes ir mañana en la mañana
- Claro que iré cuenta con eso
Sale de mi habitación, no comprendo en que momento cambió, recuerdo que ambas éramos muy unidas, ambas nos cuidabamos y mas ella a mi yo siempre fui su pequeña hermanita y luego todo cambio.
Comienzo a vestirme mientras pienso en la enorme tristeza que me causa esta rivalidad, amo a mi hermana, es un amor filial, tristemente creo que ella me odia.
Llaman a mi balcón, voy y abro la puerta- Hola Axel
- Hola ¿ que te pasó en la cara?
- Tu novia me confundió con Renata y pasaron cosas muy malas
- Ya veo quería saber si te gustaría que nuestra cita fuese en un bar o en el parque o en mi casa en la tuya o algo así
- No se si deba ir, de verdad que no quiero mas problemas
- No los tendrás lo prometo- me da un beso en la frente y me lleva hasta mi cama- Me iré hasta que te duermas- me arropa, le sonrío, esto es extrañamente hermoso
- Gracias- voy cerrando los ojos hasta que caigo en la inconsciencia del bello sueño.

Vecino Yo También Se Jugar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora